La historia detrás del Falcón verde que se movilizó durante la marcha contra el aborto

Pablo Aspesi, uno de los organizadores de la Marcha por las Dos Vidas que el pasado sábado recorrió, en sintonía con lo que sucedió en el país, las calles céntricas de la ciudad, dialogó con El Eco Multimedios.
Recibí las noticias en tu email
Accedé a las últimas noticias desde tu emailMás allá de la marcha en sí, se difundió a través de las redes sociales y también en medios nacionales, la imagen de un Falcón color verde que pasaba por la Municipalidad con un cartel que decía “Sí a la vida”. Los comentarios se multiplicaron relacionando el auto que fuera símbolo durante los años aciagos de la última dictadura cívico militar y la marcha en contra del aborto.
El asunto escaló de tal manera que Aspesi tuvo que salir a aclarar de quién se trataba el Falcón verde y porque “de ningún modo” se pueden relacionar ambas cosas.
“Estamos sorprendidos por la convocatoria de la marcha del pasado sábado, calculábamos alrededor de 300 vehículos. Estábamos dando la vuelta por avenida Santamarina y Belgrano y algunos vehículos aún estaban en la Estación del Ferrocarril. Esto es lo que hizo que en algún punto un grupo de personas nos busque relacionar con grupos de extrema derecha. En su momento dieron también a entender que un sector de la gente que se movilizó había pintado una esvástica sobre un pañuelo de Madres de Plaza de Mayo. Una locura total”, comenzó explicando Aspesi.
El dirigente dijo que “sentimos que de algún modo nos tienen que agredir. La caravana por sí sola habla, que se ve que para mucha gente el aborto no es una alternativa sino que hay otras posibilidades y debemos trabajar por eso. Ahora, hay sectores que buscan defender a capa y espada el aborto y buscan deslegitimar la protesta de esta manera”.
“Piensan que ese auto que pasó por ahí es porque reivindicamos la dictadura, nada que ver. Los propietarios son una familia. Él es cuentapropista, tiene un servicio de gomería a domicilio. Es una familia de cinco integrantes. El Falcón es súper cómodo para llevar a la familia y también para llevar las herramientas de trabajo. Desafortunadamente ellos no pueden tener la plata para comprar una camioneta doble cabina para movilizarse. Lo hizo en lo que pudo, pero se está tergiversando el tema”, contó Aspesi y agregó: “Esto tiene un límite, que es cuando una familia de bien termina en el ojo de la tormenta de manera ridícula. Uno puede defender sus ideales sin exponer a nadie. Ellos sienten temor en salir a la calle por el nivel de intolerancia con el que trascendió la noticia”.