Como cada año, el carpintero solidario Miguel hace juguetes para donar a los niños en su día

La historia vuelve a ser noticia todos los años, cuando en cercanías a la fecha del Día del Niño, el carpintero Miguel Ponce inicia una solidaria tarea que alegra a muchos chicos y chicas de la ciudad. Con recortes y descartes de madera fibrofácil, Miguel fabrica figuras con formas de dinosaurios y juegos didácticos que dona a jardines e instituciones educativas, para disfrute de los infantes.

“Hay que tener la voluntad”, le dijo Miguel a El Eco Multimedios desde su pequeño taller, donde cada mes de agosto, rodeado de maderas, sierras, y otras herramientas e insumos, le da forma a estos juguetes que desinteresadamente regala. Recibe la ayuda de su hija quien sigue sus pasos y también utiliza las máquinas, lija, y coloca las etiquetas de figuras infantiles en cada juego didáctico. 

“Todos los días le dedico un tiempo a cortar las figuras estas, todas hechas con recortes”, relató Miguel. “Nosotros no tiramos nada, vamos juntando todo. Y también la empresa DecoNews, Alejandro Ruggeri y toda la gente que trabaja con ellos, nos ayudan con retazos de madera también”, contó. “Con recortes se pueden hacer un montón de cosas, se puede generar alegría”, expresó el carpintero. 

Aproximándose el domingo 21 de agosto, la agenda de Miguel se carga de eventos en los que comienza con sus donaciones. “Vamos a entregar en el barrio Tunitas, al jardín 924, más de 110 figuras de dinosaurios, le vamos a entregar 8 juegos memotest y otros productos más, didácticos. Para que los chicos se mantengan entretenidos”, expresó. Y agregó también que "mañana vamos al jardín de Cabral, el 906. Le vamos a llevar casi 200 figuras y juegos”.

Según relató Miguel, la iniciativa propone que en los jardines e instituciones que reciban estos juguetes, los niños puedan pintarlos y luego llevarlos como regalo. 

“Siempre pienso en generar alegría en los chicos y verlos tan felices, y tan contentos cuando ven los dinos así, les gustan tanto”, expresó emocionado. El carpintero relató que muchas veces pasan por la puerta de su taller familias a las que invita a entrar y conocer. “Les encanta”, aseguró. A los visitantes también suele ofrecerles de regalo algunas de sus creaciones y observa que “a los padres les gusta mucho ver a sus hijos contentos”.

Pese a sus complicaciones, Miguel y su hija continúan con esta gesta desinteresada. “Nosotros trabajamos, vivimos de nuestro emprendimiento. Pagamos alquiler, impuestos. No tenemos nada de lujos”, dijo. Agregó que también hace tiempo fue diagnosticado con EPOC. Sin embargo, se sobrepone y en ese sentido dijo que “todo lo negativo que puede ser no te roba la voluntad de generar alegría. Si vos generás alegría, eso vuelve”.

Desde su taller ubicado en Montiel 1160, al que invita a la gente a concurrir, Miguel manifestó que desea que colegas suyos se incorporen a fabricar con su oficio un regalo para los niños en su día. 

“Ojalá que se sume más gente que trabaja con el mismo material, y tengan la voluntad de hacer cosas y ayudar”, dijo esperanzado. “Porque estamos en una situación muy especial. Hay familias que están sin trabajo, y hay gente que está con trabajo y no llega a fin de mes. Y ahora, como pasa siempre, para el Día del Niño las cosas son muy caras”, lamentó.

Miguel relató que le han preguntado por qué no vende, aunque sea a un bajo monto, parte de sus creaciones. “Un señor pasó por acá y vio que yo tengo un celular con la pantalla rota y me preguntó por qué no vendía los dinosaurios para generar plata para comprarme uno. Entonces yo le dije que la plata es importante, pero lo que yo pienso es que con la plata no podría comprar alegría ni felicidad de los chicos”, contó.