La gastronómica Sandra Maqueira acusó el poco apoyo del sector para mantener los locales abiertos
La "rebelión" del ámbito gastronómico en medio de las restricciones de la Fase 2 tuvo resultado dispares y casi ningún local permaneció en funcionamiento después de las 20, pese a lo consensuado en el sector. La empresaria infraccionada por mantener sus puertas abiertas afirmó que no volverá a abrir, expuso su desazón porque sus colegas "faltaron a la palabra" y señaló sin empacho que "podríamos habernos unido para lograr algo pero fuimos unos cag...".
Como se informó en la edición de ayer, en la noche del miércoles cuatro locales gastronómicos fueron infraccionados por estar trabajando con público y fuera del horario permitido de acuerdo a los decretos vigentes hasta hoy inclusive. .
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La decisión de los empresarios del rubro de abrir sus puertas desafiando la normativa actual generó una gran controversia y situaciones dispares. A lo largo del día, las autoridades municipales notificaron a una nómina de 26 propietarios bares y restaurantes sobre las eventuales consecuencias y advirtieron que después de las 20, hora en la empieza a regir la restricción de circulación en la vía pública, iban a efectuar severos controles.
Aunque varios espacios abrieron temprano y habilitaron la presencia de clientes en los salones -sólo pueden hacerlo en el exterior-, decidieron cerrar a las 20 y no a las 23 como habían advertido, para evitar mayores complicaciones. No obstante esto, otros siguieron adelante con sus actividades en medio del adverso contexto y fueron infraccionados por ello.
La titular de uno de los comercio en falta, Sandra Maqueira, habló del episodio al aire de “Informadísimas” (ECO TV 104.1 Tandil FM) y manifestó su decepción por el poco acompañamiento de sus colegas para sostener la atención al público.
“Estábamos en una situación en la que habíamos acordado la apertura de los locales en disconformidad con el cierre, nos pusimos de acuerdo en eso y a las 20 empezó a haber bajas, decidieron cerrar porque ya estaba la información de que el Municipio iba a salir a infraccionar. Es respetable que no hayan querido abrir pero faltaron a su palabra, podríamos habernos unido y haber logrado algo, pero somos unos cag…”, señaló con vehemencia.
Fuera de la ley
Vale reseñar que algunos de los negocios que se detectaron en off side pertenecen a los mismos socios, cuyo abogado seguirá la causa en la justicia de Faltas. Por el momento, las infracciones podrían derivar en una multa económica y por consejo legal acatarán el marco normativo para evitar mayores inconvenientes o una posterior clausura.
Empero, Maqueira reconoció que abrieron fuera de la ley pero que la situación “no da para más”, enfatizando que el segmento gastronómico y de eventos sufre un fuerte ahogo por las limitaciones a su funcionamiento. En esta línea, indicó que no han recibido ayuda del Municipio ni de otros niveles del Estado para sostener la actividad y puso de relieve la urgencia de poder trabajar para surfear la crisis. Al respecto, reconoció que “hay necesidades desde lo sanitario y lo laboral, pero este país no da para más”.
Asimismo, destacó el respaldo de los clientes que pese al singular escenario acudieron al local. En concreto, se registraron 28 comensales en el interior del lugar, pero no se les labraron actas.
Un barco solo y a la deriva
En el local en cuestión incluso se vivieron momentos de tensión y zozobra cuando los trabajadores del área de Inspección y la fuerza policial se apersonaron en la esquina de Yrigoyen y San Martín para constatar la transgresión. Ante esta situación, los comensales repudiaron el accionar con silbidos, gritos y cánticos. A través de un video viralizado en las redes sociales se pudo ver cómo los presentes se oponían al procedimiento y pedían que dejaran trabajar a la gente.
En este sentido, pese a la impotencia y tristeza que le generó el momento, la empresaria reveló que no esperaba la convocatoria que tuvo y se lamentó de que ese apoyo no se vio reflejado entre sus pares del rubro, que abandonaron el barco antes de que se complicaran las cosas.
“Estamos remando solos en este barco; es lo que nos toca vivir pero es acostumbrarmos a esto o empezar a salir. Ayer no salimos, fuimos unos cag…, lamento que no nos hayamos unido. Era la oportunidad para poder decir ‘acá estamos’, era el momento justo pero bueno, no se pudo”, dijo y añadió que “capaz esto sienta un precedente y otros salen a abrir locales porque no nos van poder callar a todos, cada uno desde su lugar y cuidándonos podemos hacerlo”.
Las infracciones
Según el detalle del parte policial, después de las 21.30 del miércoles, agentes del área de Inspección General con acompañamiento del personal de la Comisaría Primera, infraccionaron al propietario de un local comercial del rubro pizzería, ubicado en Rodríguez al 600, donde se encontraron aproximadamente 12 personas incumpliendo el protocolo.
En el raid céntrico también se reportó que se labró un acta en un local comercial de expendio de comidas y bebidas de las mismas características, en San Martin al 500, que albergaba en su interior a cerca de 30 personas y se hallaron irregularidades en un local de 9 de julio al 500, donde se constató la presencia de tres personas dentro del lugar y seis en un patio cerrado. En la misma cuadra, otro comercio gastronómico fue considerado en falta por estar funcionando con cinco personas en su interior. Todas las actuaciones fueron remitidas al Juzgado de Faltas loca para su tramitación.