La Dirección de Género puso en su agenda la Ley Micaela y la prevención de la violencia en todos los ámbitos
El área municipal a cargo de Matilde Vide se planteó diversos desafíos para mejorar los dispositivos de atención. Diversos sectores reclaman más estrategias de prevención para atacar el problema de la violencia antes de que estalle. Urge la aplicación de la Ley Micaela, sancionada hace ya un año, para capacitar a los trabajadores estatales con perspectiva de género.
Frente a la proximidad de un nuevo 8 de marzo, Día de la Mujer Trabajadora, las demandas y conquistas de los movimientos de mujeres vuelven a ponerse en agenda como un temblor telúrico que emerge con más fuerza.
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Una de las deudas a nivel local es la efectiva aplicación de la Ley Micaela, para capacitar con perspectiva a los agentes estatales en sus tres niveles. El Concejo Deliberante adhirió a la normativa nacional hace un año, pero la letra legislativa aún no pasó a la acción.
En la ciudad, la Dirección de Políticas de Género y Diversidad Sexual -que existe desde 2016-, es uno de los actores responsables de implementarla y lo tiene como uno de los desafíos planteados de cara a este año. A poco más de dos meses de asumir al frente de dicha área, la exconcejal Matilde Vide se focalizó en la tarea de orquestar las acciones para que en el transcurso de 2020 el Municipio lleve adelante las capacitaciones pertinentes. En este punto, evidenció que al haber nuevos organismos nacionales y provinciales abocados a la cuestión de género, se están “acomodando” para poder trabajar de manera articulada.
Asimismo, indicó que debió sumarse a un equipo que venía trabajando en la temática con diversos dispositivos atención integral a víctimas de violencia y botones antipánico. “Estas herramientas hacen a una atención integral que no se ve. Hay abogada, psicóloga y trabajadora social. Hemos trabajado en revisar las acciones y mejorar las dinámicas. Hay que hacer una autocrítica para mejorar y hacer crecer cada dispositivo”, afirmó la funcionaria.
Los nuevo desafíos
Dentro de los desafíos propuestos para este año, la dirección se ocupará de generar estadísticas que permitan evaluar, diseñar y monitorear estrategias y políticas de intervención y prevención. Hasta el momento, no se cuenta con cifras y datos de atención periódica sostenidos en el tiempo. En este sentido, refirió que junto a la Secretaría de Modernización se van a abocar a sistematizar los casos, preservando la privacidad de las personas, para elaborar un instrumento que posibilite conocer el cuadro de situación.
Además, anticipó que pronto se lanzarán dos espacios grupales de reflexión y de resiliencia, en distintos puntos de la ciudad, para todas aquellas mujeres que necesiten un espacio de escucha e intercambio y así, a partir del diálogo y el debate, ofrecer herramientas para su fortalecimiento.
El Foro contra la Violencia
Por otra parte, las concejales del Frente de Todos, Daiana Esnaola y Guadalupe Gárriz, participaron el pasado 13 de febrero del Primer Foro Federal participativo hacia un Plan contra las Violencias de Género que se realizó en la localidad bonaerense de Chapadmalal.
Esnaola, la edil más joven del cuerpo local, en comunicación con El Eco de Tandil calificó como “muy interesante” el encuentro y la oportunidad de encontrarse con legisladores y funcionarios de diferentes distritos para intercambiar experiencias y escucharse.
La posibilidad de encontrarse, además, con las titulares de las recientemente creadas carteras de género a nivel nacional y provincial, habilitó el cruce y la escucha para poder elaborar un diagnóstico común que sirva para comenzar a desentramar los andamiajes de las múltiples violencias presentes en todos los ámbitos de la sociedad y el Estado.
Para la joven, la instancia más enriquecedora fue que se habilitara la palabra y el cruce de miradas para conocer cómo se trabaja en cada zona y qué experiencias y saberes se pueden recuperar. “El objetivo es confeccionar un plan contra la violencia que contemple las voces de cada territorio”, explicó.
Prevención
Una crítica habitual al abordaje local de la violencia, es que se corre detrás del problema, cuando la violencia hizo eclosión. Esnaola apuntó que en Tandil hay un movimiento de mujeres y disidencias que se viene organizando para pensar estas problemáticas, y destacó la necesidad de que se diseñen y financien políticas públicas destinadas a contener las situaciones antes de que estalle.
“Se le exige al Estado municipal que trabaje fuerte en la prevención, hay diferentes caminos y aristas, pero es algo que exigimos desde hace mucho tiempo”, precisó.
En esta línea, aludió a la urgente implementación de la Ley Micaela para que la violencia no se reproduzca en el marco institucional que deberían contener a las mujeres que atraviesan situaciones de esta índole y no se genere una “ruta crítica” que obligue a la víctima a transitar un derrotero implacable a la hora de recibir una respuesta.
Por último, la edil analizó que haber conseguido los ministerios de las mujeres en las esferas nacional y provincial constituye una conquista enorme, que debe continuar y ampliar la lucha, y celebró el anuncio del fortalecimiento de mesas locales orientadas a tratar las problemáticas de la violencia. En la ciudad existe la Mesa Intersectorial contra la Violencia Familiar y de Género, que aúna a diversos actores sociales e institucionales, y constituye un espacio para diagnosticar y priorizar las demandas. Las iniciativas en esta dirección comprenden la creación de estos espacios donde no existen y la alguna partida presupuestaria para su funcionamiento, acciones que permitirán seguir avanzando en la materia.
