La ciudad menguó su pulso y se vio menos gente en las calles en el primer día del Estadio Rojo
Luego del decreto que restringió la mayoría de las actividades no esenciales, Tandil amaneció tranquila y se registró una merma considerable de público en diferentes puntos. Los comerciantes apuntan a persistir bajo otras canales de venta, pero mostraron su preocupación si las limitaciones se extienden en el tiempo. El intendente Lunghi celebró el buen acatamiento de los vecinos a las medidas. el Municipio realizó operativos e inspecciones que no reportaron transgresiones a la normativa imperante.
Las consecuencias del Covid-19 y el avance hacia el interior del país, pusieron en jaque a las comunidades que se encuentran más allá de los límites de los grandes conglomerados. Como es de público conocimiento, la explosión de casos positivos de coronavirus en Tandil, obligó al Gobierno comunal a adoptar ciertas restricciones para limitar la circulación de personas frente a un sistema sanitario que empieza a comprometerse, bajo el esquema denominado “Sistema Integral para Enfrentar la Pandemia”.
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Así, con el Estadio Rojo en plena vigencia, desde ayer permanecen con las persianas bajas los bares, restaurantes, comercios no esenciales y otras actividades incluidas en el decreto que rubricó el intendente Miguel Lunghi, lo que le imprimió un ritmo diferente al pulso urbano, que venía de unos meses de gran movimiento. Además, los espacios autorizados para abrir sólo pueden hacerlo hasta las 18, contrayendo la anterior franja horaria, que les permitía funcionar hasta las 20.
Decir que el virus puso la existencia a contramano es apelar al lugar común, pero es cierto que allí, en los lugares comunes, se esconden grandes verdades. Por trillado, el concepto no deja de ser cierto. De repente, los lazos sociales y productivos deben ser reconfigurados para capear la precariedad en todas sus formas, en un mundo que nunca estuvo preparado para esto; con la distancia social, el alcohol en gel, el lavado de manos, las mascarillas faciales y el aislamiento como caballitos de batalla hasta tanto la ciencia no conciba una vacuna que garantice la inmunidad. Y cualquier recaudo parece poco si lo que está en juego es la vida de la población.
En la ciudad sin furia
Trajinar el espacio público no es igual que antes. Con esta premisa, El Eco de Tandil recorrió algunos puntos neurálgicos para dar cuenta del impacto de las medidas en la vida cotidiana. Desde muy temprano fue posible notar cómo había menos autos en las calles y el silencio se extendía como un manto sobre el asfalto de una ciudad que debe adaptarse a los vaivenes que impone la gestión de la pandemia. Producto de las limitaciones o de la conciencia ciudadana, los vecinos se volcaron con timidez a la vía pública.
En la estación de servicio ubicada en Santamarina y Sarmiento, los empleados relevaron una gran merma de público, ahora constituido fundamentalmente por transportistas y autos particulares encargados de hacer repartos o distribuir encomiendas.
La experiencia de caminar por las arterias céntricas volvió a generar la sensación de hace un tiempo atrás, cuando aún imperaba la cuarentena y la actividad comercial presentaba un marco reducido. El paisaje de las calles 9 de julio y Rodríguez, evidenciaba, a través de las vidrieras a los bares y cafés con las sillas vacías sobre las mesas ofreciendo el servicio de delivery o take away; a los negocios de indumentaria cerrados u operando sólo con el sistema de despacho de mercadería; y a otros locales con sus entradas canceladas. En todos ellos, carteles informando los medios de comunicación y las vías de contacto posibles para no perder el feedback con sus clientes.
Los bancos y las bocas de cobro fueron, sin dudas, los lugares que mayor cantidad de personas convocaron durante la jornada de ayer, junto a los negocios de ventas de alimentos y productos de primera necesidad. Por otro lado, las grandes cadenas de electrodomésticos se encontraban operativas para entregar productos o como centros de pago, y cuyas vías de acceso, pese a estar abiertas, contaban con barreras para impedir el ingreso de desprevenidos clientes.
Comercios cerrados
En principio, la medida rige por siete días, pero muchos comerciantes creen que se va a prorrogar y por eso continuarán apuntalando la venta online, única estrategia de supervivencia en esta coyuntura, para saldar tanta incertidumbre y estrés.
En conversación con este medio, la propietaria de un local de venta de ropa ubicado sobre Rodríguez que concurrió a organizar stock para repartir a domicilio, manifestó su preocupación por la situación epidemiológica y destacó que, a su criterio, a la hora de hacer compras la gente siempre se cuidó y se respetaron los protocolos.
No obstante, consideró como “necesaria” la decisión tomada y expresó su deseo de que no se prolongue “demasiado”, para que no se complique el panorama económico a la hora de sostener la actividad. Una dicotomía entre salud y economía que nunca parece zanjarse.
Aire libre
En el paquete de lineamientos armados ad hoc por el Ejecutivo local para monitorear el cuadro epidemiológico avaló la continuidad del esparcimiento con el objeto de no generar más angustia en los ciudadanos.
De acuerdo a la normativa, las prácticas deportivas al aire libre están prohibidas de nuevo y sólo se permite realizar caminatas recreativas en solitario o grupos de a dos, siempre que sean convivientes. Cerca del mediodía, se pudo observar que pocas personas aprovecharon el sol y la temperatura templada que regaló el día para salir a esparcirse o entrenar en las inmediaciones del Lago del Fuerte.
De forma individual o en pareja, con los tapabocas correspondientes, los ocasionales transeúntes se desplazaban caminando o en bicicleta alrededor del popular espejo de agua, con absoluta calma. “Por suerte se puede seguir saliendo”, comentaron al pasar dos hermanas adolescentes que, con sus correspondientes atuendos deportivos, decidieron hacer uso de ese derecho para combatir el tedio del encierro.
La voz de la Cámara Empresaria
Marcos Redolatti, presidente de la Cámara Empresaria de Tandil, una de las entidades que apoyó la decisión del gobierno comunal de implementar este nuevo sistema de estadios y colores según el semáforo, conversó con el ciclo “Informadísimas” (Eco Tv y 104.1 Tandil FM), y expresó que el cambio al estadio rojo los sorprendió por su premura.
“No nos imaginábamos que esto iba a pasar tan temprano, como tandilense uno está preocupado. Queremos que se cuiden más que nunca y reforzar lo que aprendimos en tantos días de pandemia”, refirió.
El titular camarista destacó que son los médicos y especialistas los que tienen que indicar “cómo hacer las cosas” y al resto le corresponde tratar de acomodarse a esa realidad
“El alerta es preocupante pero esperamos que se pueda resolver de la mejor manera posible y que la actividad económica pueda retornar como estaba antes”, sostuvo. Redolatti recalcó que en este momento se trató de renovar el compromiso con la comunidad y acatar las pautas para concientizar cuando más se lo necesita.
Por otra parte, adujo que la controversia suscitada en torno al esquema semaforizado de estadios tuvo más que ver con una cuestión “semántica” que de operatividad.
En este sentido, defendió el nuevo sistema de gestión de la pandemia y consideró que, de haber tenido que aguardarse la decisión de la Provincia para cerrar, se hubiese perdido tiempo. “Esas decisiones son más lentas en ese caso y lo mismo a la inversa, para tomar la decisión rápido cuando se entienda que se pueden volver a habilitar las actividades y tener un alivio económico sin perjuicio de la salud, compartió.
“No sabemos cuánto va a durar esto y es valedero todo lo que hemos aprendido, hay hábitos de vida y modalidades de venta remota que no se pierden. Es un aprendizaje intenso de herramientas que siempre serán útiles”, concluyó.
Inspecciones y monitoreos
Asimismo, según informó el Municipio, durante toda la jornada los agentes de la Dirección General de Inspección y Habilitaciones de la comuna recorrieron los diferentes barrios de la ciudad para controlar el cumplimiento de lo dispuesto para esta etapa, que comenzó a regir a la medianoche de ayer y que se extenderá por una semana, dependiendo de la evolución de la situación sanitaria.
Desde el área precisaron que se recibieron unas diez denuncias por situaciones puntuales, pero que no derivaron en infracciones ya que se trataba de actividades autorizadas. También detallaron que en las recorridas que hicieron los inspectores no se detectaron infracciones y que tampoco se observó aglomeración de personas en locales de rubros habilitados como supermercados o bancos; y adelantaron que los operativos de control continuarán de manera diurna y nocturna.
Vale reseñar que Inspección y Habilitaciones se ocupó, además, de forma conjunta con la Secretaría de Desarrollo Productivo y Relaciones Internacionales, del control y asesoramiento de las medidas vigentes en el sector industrial.
El Intendente, complacido
Por su lado, el intendente Miguel Lunghi resaltó que “la inmensa mayoría de los tandilenses demostró una vez más el gran compromiso y responsabilidad que tienen. Hoy tuvimos una importante disminución en la circulación y un cumplimiento total por parte de todos los sectores y actividades, a quienes les agradecemos el apoyo y acompañamiento que brindan”.
“No tengo dudas que si nos mantenemos unidos, seguimos respetando las indicaciones y siendo responsables individual y colectivamente, superaremos esta situación que nos toca vivir como lamentablemente ocurre en la región, la provincia y el país”, agregó el pediatra, que vivió unos días ajetreados ante la adopción del esquema propio y el estallido de contagios.
Controles policiales urbanos
En tanto, la Secretaría de Protección Ciudadana coordinó las tareas de la Guardia Urbana que, como ocurre habitualmente, trabaja para evitar la concentración de personas en distintos puntos de la ciudad, en especial en zonas comerciales y en inmediaciones a entidades financieras, ordenar las filas de espera, instar a que se apliquen las medidas preventivas y poder llevar adelante otras acciones que se orienten a la finalidad de resguardar la salud de las personas.
Al mismo tiempo, efectivos de la Policía y Policía Local también realizaron tareas de control, que se intensificarán durante la noche, como ya venía ocurriendo desde hace tiempo.
Finalmente, las autoridades comunales reiteraron la recomendación de permanecer en sus domicilios y solo salir para resolver las cuestiones consideradas imprescindibles, siempre respetando las medidas de prevención.