La campaña de vacunación recobró su pulso y esperan inocular a seis mil personas
Con el foco puesto en los mayores de 70 años, después de algunas semanas se reactivó el esquema de vacunación en todos los centros. Al culminar esta tanda, más de la mitad de la población objetivo de Tandil tendrá una dosis aplicada.
Después de varias semanas de impasse, se reanudó en la ciudad la campaña de vacunación gracias a la llegada de un total de 5.850 nuevas dosis, que comenzaron a ser aplicadas desde ayer de acuerdo a los turnos otorgados por el sistema provincial en los puestos de vacunación establecidos en el Centro de Salud Mental “Tita Brivio”, Ioma Tandil, Centro Cultural Universitario, Universidad Barrial, Iglesia Peniel y Suteba.
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El stock disponible fue asignado a mayores de 70 años y mayores de 60 con patologías de riesgo, correspondiendo en todos los casos a primeras dosis. Desde la Región Sanitaria esperan que se logren aplicar la totalidad de las vacunas que arribaron a Tandil en tan solo cuatro días.
“Tenemos casi seis mil dosis y esperamos poder aplicarlas este miércoles, jueves, viernes y lunes de la semana próxima. Para el último día a la tarde vamos a tratar de finalizar el operativo”, declaró la directora asociada de la Región Sanitaria VIII, Martina Iparraguirre, en diálogo con el programa Tandil Despierta.
Según explicó, cuando esta tanda culmine, estará el 57 por ciento de la población objetivo local (personal sanitario, docentes, fuerzas de seguridad y mayores de 60) inoculada con una dosis. Se calcula que hay 32 mil personas pertenecientes a estos grupos anotadas en el distrito y tras esta etapa, quedarían alrededor de 8 mil ciudadanos pendientes de ser inmunizados.
“Con este stock nos ponemos en una situación que no es la ideal, pero sí bastante más holgada que antes”, valoró la funcionaria.
Efectividad de la respuesta inmune
En tanto, la doctora Iparraguirre afirmó que la vacuna utilizada en esta ocasión, la Sinopharm -que recientemente fue aprobada para aplicarse en la franja etaria superior a 60 años- tiene el virus vivo inactivado, lo significa que no es capaz de enfermar pero sí de producir anticuerpos y aclaró que “no genera 90 por ciento de anticuerpos pero sí un 70 por ciento de respuesta inmunológica”.
En este sentido, trazó un paralelismo con la campaña de vacunación chilena, que inoculó a su población con la vacuna Sinovac, que tiene un 50 por ciento de efectividad. “Pareciera que 50 o 70 por ciento de respuesta frente a un 90 por ciento que tienen otras vacunas no es nada, pero hay que pensar que un 50 por ciento es mucho mejor que nada, así funciona”, sostuvo.
Además, subrayó que el Consejo Federal de Salud, que nuclea a los 24 ministros del área de todo el país, definió por unanimidad diferir hasta tres meses la aplicación de la segunda dosis, para poder agilizar el proceso e inocular a la mayor cantidad de gente posible en el marco de la segunda ola de contagios que asedia al territorio.
Reasignación de turnos
En cuanto al devenir de la campaña a nivel local, indicó que si a alguna persona se le pasó el turno o vio la citación tarde, puede concurrir estos días al lugar solicitado por el sistema y acceder igual a la vacuna. Así, la premisa es buscar todas las estrategias para que los mayores puedan recibir su dosis. No obstante esto, enfatizó que es imprescindible controlar las vías de comunicación: mail, Whatsapp, aplicación Vacunate, para estar al tanto del otorgamiento de turnos.
Al respecto, Iparraguirre refirió que si hay personas que quedan pendientes de aplicación por no asistir al turno –por el motivo que sea- el sábado se va a intentar contactarlos nuevamente. De no poder establecer una nueva citación, los turnos se cancelarán y el sistema operativo va a reingresar las dosis vacantes como disponibles para volver a asignar los turnos.
El funcionamiento de los vacunatorios
El Centro Cultural de la Unicen, ubicado en Yrigoyen 662, regaló postales únicas de lo que es la jornada, con 500 turnos otorgados, a razón de 50 por hora, que se respetaron con rigor. Desde la mañana fue posible observar a los adultos mayores que esperan sentados en la vereda, en una larga fila que comenzaba en Yrigoyen y doblaba por Sarmiento, casi hasta mitad de cuadra.
La espera en el exterior se produce porque entre turno y turno se debe desinfectar el lugar. También se da que muchas personas llegan hasta una hora antes del turno asignado y por eso se generan los cuellos de botella. Empero, la mayoría de los adultos mayores, por cuestiones lógicas, asisten acompañados de algún familiar, lo que incrementa el flujo de público en las inmediaciones del vacunatorio.
Asimismo, dentro del esquema planteado para operativizar el circuito, la sala de espera para el grupo de cada turno se constituyó en el Salón de los Espejos y las siete postas de inoculación se relocalizaron en el gimnasio del Centro Cultural. No obstante esto, las vacunadoras también se acercan a hacer las aplicaciones a los autos, en el caso de las personas que tienen su movilidad comprometida.
Alejandro Olariaga, uno de los coordinadores del espacio, detalló que allí se derivó específicamente a la población mayor de 70 años para ser inoculada con la vacuna china Sinopharm. Destacó que el porcentaje de ausentismo fue casi nulo y que esperan liquidar entre ayer, hoy y mañana las 1.350 dosis que destinaron al centro.
La expectativa e ilusión por las vacunas es grande. La necesidad y ganas de acceder a la inmunización denota algo mucho más profundo que una cuestión de salud pública: la inquebrantable fe en la vida. Todos estaban allí porque querían cuidarse y cuidar al prójimo.
Norma Otranto, de alegres 80 años, compartió que estaba esperando su turno hace poco más de un mes y aseguró que “vacuna que anda dando vueltas, vacuna que me pongo”.
“Hay que dársela, porque si te agarra Covid, te agarra suavecito, no queda otra”, dijo con una amplia sonrisa.