EN EL CONCEJO DELIBERANTE
Estrellas Amarillas propuso crear por ordenanza un observatorio vial
Estrellas Amarillas de Tandil, a través de Hernán Lucio Mansilla, presentó un proyecto para crear el observatorio vial en la ciudad, enfocado a generar estadísticas y políticas públicas para mejorar la seguridad en el tránsito. Se trata de la segunda propuesta en el mismo sentido, teniendo en cuenta que Tránsito entre Todos, con su referente Juan Larraburu, también había utilizado la Banca 21 con el mismo objetivo.
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“Buscamos que nadie más pase por esta situación, porque es irreversible, una pérdida irrecuperable, que creo que la sociedad y el Estado se ha acostumbrado en Argentina y en Latinoamérica, no así en otros países del mundo que gracias a políticas estatales han podido revertir esta situación”, dijo el hermano de Leandro Mansilla, fallecido en un choque en la Ruta 3. En esa línea, resaltó que en el país hay veinte víctimas viales por día, cuando en España son cuatro.
Mansilla citó que la Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud brindan cinco recomendaciones para revertir la catástrofe del tránsito. Enumeró la instalación de una agencia líder; el desarrollo de información estadística “estratégica y oportuna”; elaborar un plan nacional de seguridad vial y establecer inversiones, e implementar todas esas medidas.
Desde la Banca 21, expuso que la demanda de Estrellas Amarillas se centra en el segundo punto, teniendo en cuenta que “el actual Observatorio Vial de Tandil no viene cumpliendo las funciones y obligaciones propias que debería cumplir, en cuanto a la información que se brinda y se recaba, es que proponemos y solicitamos a este cuerpo la creación de dicho organismo por una ordenanza municipal”.
Resaltó que la normativa tendrá que establecer “obligaciones y funciones” del observatorio, que estará a cargo de una persona idónea y que podrá ser removida por incumplimiento de sus funciones.
En cuanto al proyecto de ordenanza que tomó estado legislativo, adelantó que se sustenta en modelos de observatorios que están en marcha en otras ciudades argentinas, como así también de países extranjeros. Agregó que “actualmente existen instituciones privadas y públicas en la ciudad, que hace varios años vienen trabajando y quieren colaborar con esta problemática. Teniendo bases de datos como son las fuentes del Hospital, Policía, ART, compañías de seguro, se pueden crear bancos estadísticos que pueden servir para implementar políticas acordes de acuerdo a la problemática en cada zona de la ciudad”.
Por otra parte, señaló que entre las obligaciones del observatorio incorporaron la obligatoriedad de remitir un informe mensual al Legislativo y otro anual que contenga, además de las estadísticas, el detalle de las políticas implementadas y sus resultados. Además, esos informes deberán ser publicados en la página web del Municipio y geoferenciar los siniestros y sus características, haciendo foco también en los casos que ocurren durante los traslados al trabajo o en la jornada laboral.
“Hace varios meses desde el Ejecutivo nos propusieron a Estrellas Amarillas percibir los fondos provenientes de la compactación de vehículos que estaban secuestrados. Como no tenemos personería jurídica y la realidad es que no manejamos fondos, lo agradecimos pero lo rechazamos, y lo proponemos como una fuente de financiamiento para este proyecto que si bien existen gastos, es una inversión. Al margen de las pérdidas irreparables humanas, que es lo más importante, existen también pérdidas económicas. Solamente basta mirar lo que sale una cama de terapia intensiva en el Hospital por día como para cuantificarlo”, expresó.
“Un Estado ausente”
En un segundo tramo de su exposición de 10 minutos, Mansilla aprovechó para hacer públicas algunas problemáticas que padece la organización, “con una mirada crítica”. Expuso que desde principios de año le solicitan al Ejecutivo los carteles de Estrellas Amarillas –reemplazaron a las pintadas porque se borraban rápidamente- y no han tenido respuestas. Agregó que a pesar de los reiterados reclamos, “no se está cumpliendo con la Ordenanza 14.126 que establece la obligatoriedad del otorgamiento de ese material” y refirió que hay pendientes 15 señalizaciones, que aguardan las familias de las víctimas.
También pidió que se tome intervención por los camiones, acoplados, colectivos y máquinas agrícolas estacionados en la ciudad. “La vera de la Ruta 226 es una vergüenza. Es un mostrador de camiones”, consideró y citó como ejemplo el reciente accidente que cubrió este medio, cuando un camión giró en “u” en plena ruta para enganchar un acoplado y embistió a una moto.
Hernán Mansilla marcó que durante la pandemia se agravó “el desinterés total” de la sociedad por las normas de tránsito y señaló que pudo comprobar el fin de semana que en el Parque había gente con motos y vehículos consumiendo alcohol, con la policía a metros. “Eso es un Estado ausente. La seguridad vial protege derechos humanos fundamentales como la vida, la libertad, la seguridad personal, a la libre circulación y a la salud. Ese es el deber de todos, de la sociedad y principalmente del Estado. Lamentablemente en Tandil son muchas las víctimas que no tuvieron estos derechos y que quedan olvidadas”, remarcó.
Por ese motivo, agradeció el espacio y decidió leer los nombres de las víctimas de la inseguridad vial. A modo de homenaje, recordó a Juan Lista, Alberto González, Andrés Grondona, Claudio Salles, Cristian Cuccarese, Diego Sosa, Emilio Herrería, Ester Amaya, Facundo Aldaz, Facundo Barraza, Fabián Leonardi, Fernando Etchegoyen, Gabriel Marchioni, Gastón Arancibia, Gonzalo Andújar, Gonzalo Diez, Ignacio Lescano, Ismael Fuentes, Jonathan Constantino, Jonathan Iñarra, Jorge Madeo, Josefina Olesen, Juan Falacar, Juan José Poccorena, Juan Torres, Julio Falcón, Leandro Mansilla, Luciano Trujillo, Luis Monteselles, Marcela Diez, Marcos González, Nahuel Rodríguez Garrido, Nicolás Miguel, Nicolás Valderrey, Pablo Sánchez, Roberto Vila, Rodrigo Sanpedro, Romanella Sánchez, Rosa Román, Santiago Chantada, Santiago Mayer y Leandro Gini.
