Espacios culturales pidieron la habilitación para dar talleres y adhirieron al acta por espectáculos en vivo
En medio de la Fase 5, con varias actividades restauradas, los centros culturales pidieron que se los autorice a brindar clases como música, teatro, pintura y cerámica, ente otras. Desde Cultura local advirtieron que la autorización depende de Provincia, pero Alguacil se comprometió a insistir con el pedido. Aseguraron que más allá de lo económico, es una cuestión de salud emocional.
Mientras cada vez son más los sectores que vuelven a la actividad, representantes de espacios culturales de la ciudad se reunieron ayer con el subsecretario de Cultura, Alejo Alguacil, a fin de solicitar la habilitación para volver a trabajar con clases y talleres de todas las disciplinas en sus propios establecimientos.
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A su vez adhirieron a lo solicitado el lunes por los trabajadores de la música en relación a la posibilidad de restablecer los espectáculos en vivo. Tal como manifestaron, la intención es acordar la apertura con los debidos protocolos de capacidad de sala reducida, distanciamiento e higiene, entre otros, “del mismo modo que se ha hecho en los demás sectores”.
Canto, música, teatro y artes visuales son solo algunas de las disciplinas que aún no están permitidas a realizar en Tandil a pesar de transitar la Fase 5, mientras que algunas relacionadas a la danza sí han podido iniciar por encuadrarse dentro de los gimnasios, que fueron habilitados a mediados de junio.
Según explicaron, esta diferencia surgió porque la mayoría de las escuelas de danza están creadas por profesoras de educación física, además de bailarinas, que cuando aprobaron sus espacios lo hicieron como gimnasios y quedaron incluidas así las clases de danzas.
“Quisimos plantear nuestra preocupación porque aún no hemos podido retomar nuestras actividades”, explicó Mercedes Guazzelli, referente del Salón Danés, que estuvo acompañada por Fernanda Ghezzi, directora de Bamablinas, y Oscar Di Rocco, del Centro Cultural La Compañía, en representación de unos 14 espacios culturales de la ciudad.
Esperando el 17 de julio
De acuerdo a la respuesta recibida sobre la no posibilidad de apertura, le indicaron que el Gobierno de la Provincia de Buenas Aires manifiesta explícitamente que las culturales no se pueden desarrollar, aunque sí se puede tramitar el permiso desde cada Municipio.
En este sentido, Tandil hizo llegar hace 30 días el protocolo que los interesados habían diseñado conforme la autorización del Sistema Integrado de Salud Público (SISP), pero no han recibido ninguna respuesta, lo que se interpreta como una negativa.
“Por eso vinimos a solicitar que nuevamente la Subsecretaría se ponga a la cabeza de nuestro reclamo e insista con la reapertura de los espacios porque están preparados para cumplir con las normas correspondientes y así desarrollar nuestras actividades”, aseveró Guazzelli.
Los referentes de los espacios revelaron que la respuesta por parte de Alejo Alguacil fue buena, ya que asumió el compromiso de insistir con esa aprobación. “Ellos nos reciben y escuchan siempre, pero no nos están pudiendo ayudar “, coincidieron.
En el mismo encuentro, aprovecharon para adherir al acta que se conformó el lunes luego de la visita de los músicos, donde se hace hincapié sobre la necesidad de que retornen los espectáculos en vivo. La intención es que puedan realizarse en puntos gastronómicos como en peñas u otros sitios culturales.
A este mismo documento, el Subsecretario anexó el reclamo de habilitación de clases y talleres artísticos, contemplando que como fecha cercana podrían tener novedades el 17 de julio, que es cuando se harían nuevos anuncios con respecto a la continuidad de la cuarentena y sus alcances.
“Vinimos a seguir insistiendo y, si realmente no depende de una decisión local, que por favor ejecuten todas sus herramientas para poder dinamizar la situación porque son muchos días y realmente la lógica de prohibición no encuadra dentro de la reactivación que se está viendo”, manifestaron, haciendo referencia a que puede haber 20 personas en un café, pero no unas pocas tomando clases de cerámica, por ejemplo.
De acuerdo a la percepción, tanto de ellos como del funcionario, la respuesta de Provincia viene muy lenta. ”Hay tiempos que están siendo demasiado largos para la situación favorable que estamos viviendo acá”, lamentaron. En este punto, Di Rocco consideró que esto podría suceder porque se enfocan en lo que está pasando en Buenos Aires o La Plata, sin contemplar la realidad epidemiológica de Tandil.
“Esperaremos al 17, que es como que nacerá una nueva época”, dijo con la esperanza de recibir una respuesta positiva.
“Que el Municipio se embandere”
En otro término, Fernanda Ghezzi indicó que hay un protocolo que puede ser totalmente eficiente al momento de llevar adelante los talleres sin necesidad de incurrir en algún tipo de riesgo sanitario. “Estamos súper dispuestos a trabajar de acuerdo a lo que se exija para colaborar con mantener esta situación de bienestar dentro de la ciudad”, garantizó.
En este sentido, también revelaron que hubo una oferta por parte de la intendencia para que los espacios privados puedan llevar sus actividades a los ámbitos municipales, sin embargo aseguraron que no para todos esa herramienta puede resultar efectiva.
Entonces, para quienes no pueden trasladarse a los sitios en común, ya sea porque no pueden mover su herramental o la comunidad con la que trabajan está en otra zona o bien quieren sostener su identidad cultural, consideraron importante que “el Municipio se embandere” para poder generar el permiso de trabajo.
La salud emocional
“Creemos que hay una cuestión económica muy importante, pero también debe haber un compromiso con la cultura y es importante que la comunidad lo entienda”, señaló Mercedes Guazzelli en la voz de todos.
De esta manera, alegó que las ganas de reabrir no son solamente de los que trabajan en esto, sino también de quienes se benefician con estas clases y asisten a ellas. Así, artistas, docentes, alumnos, entre otro montón de gente, están rogando porque su pedido encuentre una buena salida.
“Son lugares que ayudan a preservar la salud psíquica de la población”, destacó Ghezzi, y recordó que durante todo el transcurso de la cuarentena se ha visto cómo la gente buscaba el arte y el deporte para poder sobrellevarla. “Nuestros espacios colaboran para que todos estemos bien emocionalmente”, dijo.