Red de agua potable
En Villa Cordobita, 270 familias tienen problemas con el agua y reclaman obras para el barrio
La baja presión y los cortes del suministro son una constante en diferentes barrios de la ciudad, que sufren esta problemática desde hace años. Piden que el Ejecutivo priorice las obras de infraestructura para extender las redes de agua corriente.
Como sucede cada vez que llega el verano y sube la temperatura, los problemas en el suministro de agua potable se replican en la ciudad. En esta línea, vecinos de Villa Cordobita expusieron que padecen reiterados cortes de agua y poca presión por la alta demanda, e interpelaron al Municipio para que resuelva la problemática.
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“Seguimos con esta lucha interminable, para que el Municipio de Tandil deje de poner parches y realice una obra en el barrio que resuelva el tema”, indicaron algunos vecinos congregados en el colectivo La Poderosa, de gran inserción en la barriada.
En base a la cronología, en 2008, la comunidad barrial logró que el Ejecutivo colocara una bomba de agua para proveer a gran parte de la zona. En ese momento, la condición requerida por las autoridades fue que no se conectaran más familias a la red que las ya existentes, y que los mismos vecinos regularan este sistema.
El crecimiento demográfico atentó contra esta premisa porque la expansión del barrio y la radicación de nuevas familias en ese sector de la ciudad durante los últimos 13 años. De este modo, señalaron que, según el Registro Nacional de Barrios Populares (Renabap), hay más de 270 familias en el lugar que necesitan disponer de este servicio elemental.
Karina Balmaceda reside en el barrio y sostuvo que “esta red no alcanza para abastecer a todas las personas y, desde hace dos años, estamos sufriendo reiterados cortes. Pasamos todo el año con poca presión y ahora que llega el calor la situación se agrava porque directamente se corta, y tampoco tenemos agua a la noche”. Además, refirió su situación personal y compartió que cuando se corta el agua, utiliza un balde prestado por una vecina para realizar las tareas más básicas.
“Desde el 2014 que vivo en Villa Cordobita y tengo este problema: ya se me quemaron dos termotanques eléctricos porque se quedaron sin agua", reveló.
Vivir sin agua
En tanto, ante la tercera ola de contagios de Covid-19 que azota al país, puso el foco en las dificultades para mantener la higiene adecuada en este contexto. Al respecto, Balmaceda enfatizó que "es imposible cuidarme de la nueva ola de Covid sin agua, no me puedo lavar ni las manos, incluso para tomar me tengo que llenar una botella de agua de una canilla que está contaminada ya que la usan varios y también conectan una manguera ahí. Desde hace dos días no tenemos nada de agua ni para tirar al inodoro, la higiene estos días está imposible".
Asimismo, los vecinos de Villa Cordobita recordaron que no son el único barrio encolumnado en esta lucha, porque la problemática se reproduce de idéntica manera en diferentes puntos del ejido urbano; La Movediza, La Elena y Los Charitos, por ejemplo.
Para visibilizar esta situación realizaron una pequeña concentración el martes último, cuando el Concejo trató el Presupuesto 2022 para pedir que se priorice una parte del presupuesto para obras en esos barrios, que están demoradas desde hace años. De hecho, el lunes, previo a la sesión, vecinos de Los Charitos, La Movediza 2, La Movediza, La Blanqueada, El Hornero, La Unión y Villa Cordobita se reunieron con concejales del Frente de Todos para tratar el tema y avizorar alguna solución dentro de la planificación de obras públicas de cara al 2022, que ponga fin a este problema.