En una masiva marcha, los peronistas salieron a la calle para respaldar a Cristina Kirchner

Ayer en horas de la tarde cientos de personas de distintas agrupaciones peronistas salieron a la calle a respaldar a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, en el marco del juicio en el que se la acusó del desvío de fondos e irregularidades en la asignación de obra pública de Santa Cruz.

Poco antes de las 17 se congregaron, en la Glorieta de la Plaza Independencia, los manifestantes y luego se apostaron durante algunos minutos rodeando la pirámide central de la plaza, con bombos, cantos y banderas argentinas.

Luego, se encolumnaron detrás de la leyenda “Todos con Cristina” y marcharon por Yrigoyen hasta España y de ahí regresaron a la plaza por Rodríguez, donde se ubicaron en la explanada de la Municipalidad, y finalizaron el encuentro cantando el Himno y luego la Marcha Peronista. 

“Basta de perseguir”

Con el canto de “si la tocan a Cristina qué quilombo se va a armar”, avanzaron por las calles céntricas, alzando diversos carteles que exponían el motivo de la manifestación.

Encabezaron la marcha el diputado nacional por el Frente de Todos Rogelio Iparraguirre y los concejales de ese mismo bloque Darío Méndez, Juan Arrizabalaga, Guadalupe Garriz, Daiana Esnaola, Nicolás Carrillo y Juan Manuel Carri.

Asimismo, había otros referentes del peronismo vernáculo, como el exdiputado Roberto Mouillerón, el exconcejal Mario Bracciale y la exconcejal María Eugenia Poumé. 

Flor de Murga acompañó el reclamo con sus bombos y música. 

“Basta de perseguir y judicializar a las organizaciones sociales”, “Defendemos a Cristina porque nunca tomó medida alguna contra el pueblo trabajador”, “Libertad a Milagro Sala", exigieron en algunos de los carteles. 

“Un problema de los argentinos”

En diálogo con El Eco de Tandil, el diputado Rogelio Iparraguirre expresó su preocupación porque “más que analizarlo desde lo que está atravesando la vicepresidenta, lo veo como una situación que estamos atravesando los argentinos, ni siquiera los peronistas, acá hay una situación que está atravesando muy fuertemente a los argentinos”.

“Me parte bastante el alma que estando al filo de los 40 años de la democracia que tanto nos costó conquistar, los argentinos hoy producto de la intolerancia de algunos sectores del poder pero que son minoritarios en relación al conjunto de la sociedad, hay una incapacidad de procesar a determinado sector político y son capaces de llevarse por delante a las propias instituciones, a la propia Constitución”, manifestó.  

Y agregó que “a partir de lo que hoy es conocido en el mundo como low fare o la guerra judicial, que es la utilización de un sector del Poder Judicial de anular aquellas figuras o aquellos espacios políticos que entienden estos sectores minoritarios que atentan contra sus intereses que suelen ser además intereses desmesurados, que no son los intereses del conjunto del pueblo trabajador, de las pymes, los empresarios, del campo, jubilados”.

“Lo mismo ha sucedido en Brasil, en Ecuador, en Bolivia, en Honduras, es un fenómeno que sufre la región, que tiene una denominación más global, que es el low fare, pero a nosotros los argentinos nos tiene que encontrar esta situación en la capacidad de apelar a nuestra propia honestidad intelectual como pueblo y poner por encima de todo el amor y el interés por la patria”, sostuvo.

En esa línea, consideró que “este no es un problema de Cristina o del peronismo, es un problema de los argentinos. Tenemos que saber vivir en paz y en democracia zanjando nuestras diferencias a través de las herramientas que la Constitución nos brinda, entre ellos las elecciones, el parlamento y parece que hay sectores que no están dispuestos a aceptar estas reglas del juego”.

Respecto a la manifestación en la puerta de la casa de Cristina, afirmó que “había una situación de absoluta paz y tranquilidad, de respeto, durante 96 horas hubo una especie de vigilia militante en la puerta del domicilio de la vicepresidenta sin ningún tipo de incidente, altercado, hecho de violencia”.

“Bastó que el jefe de Gobierno de la Ciudad tomara una decisión tan temeraria e irresponsable como aprovechar la lluvia de la madrugada y que por primera vez en 96 horas no había militancia apostada en ese lugar para hacer un vallado ridículo, pretendiendo aislar a la figura que está movilizando esto, que es Cristina, del sector del pueblo que la apoya, donde estamos nosotros por supuesto”, afirmó.

Y cuestionó que se trató de una “medida muy irresponsable, muy ridícula, muy violenta, y obviamente desencadenó en los hechos de violencia que la Policía llevó a cabo”. 

“La derecha está intentando volver”

Por su parte, el concejal Darío Méndez expuso que la idea de la movilización fue “replicar lo que se viene dando a lo largo y ancho del país, que son un montón de manifestaciones espontáneas y organizadas de distinta índole, a partir de lo que fueron los últimos sucesos en el juicio a la vicepresidenta”. 

“La idea es expresar lo que venimos sintiendo, que no es ni más ni menos que una persecución política que data de alrededor de 10 años, y entendemos que es algo que viene pasando en toda Latinoamérica que se conoce como low fare que es la persecución de todos los líderes populares”, sostuvo.

En ese sentido, planteó que “hay un sector del Estado que está totalmente captado por la política que está siendo utilizado para perseguir e intentar proscribir a quien es hoy en día nuestra conductora del Partido Justicialista, con una figura muy novedosa que es entender las estructuras del Estado como una asociación ilícita”.

“Esto nunca se había dado, entendemos que está totalmente manipulado para tratar de proscribir a Cristina, y condicionar a los dirigentes. La derecha está intentando volver a gobernar el país y para eso necesitan borrar del mapa a Cristina”, señaló.

Apoyar la democracia

En tanto, el diputado Roberto Mouillerón consideró que la manifestación fue para “primero apoyar la democracia y el Estado de derecho, que creo que es lo importante, después trabajar para que los compañeros no se sientan perseguidos como se están sintiendo, y también defender a la compañera Cristina que está soportando efectivamente un ataque en este caso judicial pero que además se traduce todo esto en los medios de comunicación, que pareciera que están empeñados en que el peronismo no termine su mandato”. 

“El peronismo en pocas horas va a dar muestra de lo que es estar en la calle, y cómo se defiende la democracia, eso es lo que estamos haciendo hoy, de la mejor manera, mostrando que tenemos la suficiente capacidad de movilización como para acompañar a quienes nos gobiernan”, sostuvo.  

Y agregó que “si el jefe de Gobierno de la Capital cree que esa es la forma de parar al peronismo se equivoca, ya eso lo intentaron en la Argentina desde 1952 en adelante con golpes de Estado, nunca lo pudieron parar, y además, lo está haciendo porque con eso compite internamente en su espacio político. Nos parece una barbaridad”.