Cultura
En el teatro para bebés está previsto que ocurra lo imprevisto
Matías Valdez, de la cooperativa Sueños en Barrilete, contó la experiencia del Festival de Teatro para Bebés y del espectáculo que dieron en Tandil. "Buscamos espacios donde se puedan producir obras de teatro para bebés y primera infancia", señaló Facundo Di Paola.
Por Alicia Armani (*)
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En la primera edición del Festival de Teatro para Bebés participaron compañías invitadas de Buenos Aires, como Proyecto Upa -pioneros con esta propuesta-, Cocolicio y el teatro Dudú de Mar del Plata. Tres Arroyos también dijo presente, con una compañía dedicada a la narración para la primera infancia, en zonas rurales.
Sueños de Barrilete avanza para fortalecer lazos con la región y producir una obra tandilense.
-¿Qué es el teatro para bebés, cómo lo definirías?
-La experiencia de la expectación que nosotros trabajamos, tanto en la sala, como en nuestras actividades, tiene que ver con vincularse inicialmente desde esta primerísima infancia, con propuestas estéticas que las pensamos con un trasfondo literario.
-Activan los sentidos…
-Fundamentalmente tiene que ver con la experiencia sensorial. Hay un relato mínimo, breve, que articula una serie de intervenciones nuestras para que tengan sentido literario. Pensamos en lo que le produce en los sentidos a esos niños y esas niñas.
-¿Por qué se llama así?
-Uno le dice teatro para bebés, porque es una forma de enunciarlo para que el adulto, que es el mediador, entienda cuál va a ser la característica de la propuesta y para que se acerque a ver de qué se trata.
-¿Y desde lo teatral?
-Nuestra noción de lo teatral tiene que ver con el teatro participativo, que rompe la situación público-artista. Todo forma parte del espectáculo. Hay un momento de expectación, donde se trabaja la paciencia, la curiosidad, el asombro. Son encuentros muy breves, por la propia condición de esos niños y esas niñas. El teatro lo concebimos muy experimental, porque es algo poco difundido.
Puesta en escena
-¿Cómo organizan la sala para recibir a la audiencia?
-Mucho en el piso, porque al ser bebés, siempre van a estar acompañados por un adulto, una adulta. No tenemos una suerte de anfiteatro, con diferentes niveles. Lo que proponemos son almohadones, alfombras y lugares donde la persona que acompaña al niño, también se siente cómoda. Nosotros trabajamos el teatro para bebés, pero también el teatro para las infancias en general. Entonces hay propuestas que ameritan un poco más de silla, porque la obra está un poquito más situada en el escenario.
-¿Interaccionan con la audiencia?
-La mayoría de las propuestas que tuvimos trascienden esa línea del escenario. El público entra a la escena para experimentar, e interactuar con los actores, con los recursos que ofrece la escenografía.
-Contame más sobre la escenografía…
-Cada producción tiene su propia escenografía, relacionada con lo que transmite. Todas tienen el común denominador de ser bastante coloridas, con movimiento y al alcance de las manos.
-¿Cómo manejan los imprevistos que se dan con la audiencia?
-Nos manejamos con la idea de que está previsto que ocurra un imprevisto. Un niño puede tomar la teta, por ejemplo. Nunca hay un niño sin un adulto a cargo. Cuando se entra a la escena, explicamos cómo es la situación de salida: que la familia sepa que se puede levantar, retirar, tratando de que sean ellos quienes resuelven la situación.
La comunidad artística se motiva
para pensar un arte para lactantes
Facundo Dipaola contó algunos detalles de lo que es la propuesta y de los proyectos que tienen a futuro en Sueños en Barrilete.
-¿Cómo surgió esta propuesta?
-La cooperativa propone una sala de las infancias, en relación al arte. En Buenos Aires había participado en un proyecto de investigación específico de teatro para bebés en la Facultad de Arte y nos parecía bien traer compañías y profundizar la experiencia.
En Tandil, queríamos aprovechar las vacaciones de invierno, hacerlo temprano, teniendo una serie de consideraciones para que la gente pudiese ir, pensándola abierta a la comunidad.
-¿Cuál es el impacto de este tipo de teatro en el público?
-Hay mucha literatura escrita sobre esto, muchas investigaciones sobre el efecto de todos los estímulos artísticos en la primera infancia, que Unesco la toma de cero a diez años. Estímulos y trabajos relacionados con el arte generan una calidad de vida mejor, en el presente y futuro de niños y niñas. Apuntamos a generar una conciencia en el trabajo con los bebés y primera infancia, también motivando a la comunidad artística tandilense a pensar un arte para ellos.
-¿Qué actores participan en la propuesta?
-Son diversos. Cuando empezamos, pensamos en invitar distintos actores de la comunidad, y ahí se sumaron la Facultad de Arte, el área de Cultura de la Unicén, invitamos también a la cátedra que investiga en la Facultad de Arte. Quedamos en contacto para hacer futuros trabajos. La idea es tejer redes con la comunidad y otras cooperativas, hay un trabajo con instituciones de la ciudad. Vale recordar que tuvimos el apoyo del Consejo Municipal del Teatro Independiente y también que el evento fue declarado de interés por el Municipio de Tandil.
-¿Trabajan en red?
-Hay distintos actores sociales con los que tejimos redes para que la propuesta esté firme para esta primera edición. A la vez, lo hacemos para que crezca en general, tejiendo redes con artistas locales. Buscamos espacios donde se puedan producir obras de teatro para bebés y primera infancia. También gestionamos la posibilidad de colaborar con la comunidad tandilense y con artistas locales. Entonces la propuesta es amplia y sigue abierta para que se incorporen nuevos actores y al próximo festival a realizar el año que viene.
-¿Cuáles fueron los resultados obtenidos?
-Los resultados obtenidos nos sorprendieron. Estas realizaciones de innovación generan una especie de vértigo e incertidumbre. La verdad es que la convocatoria fue maravillosa, la gente respondió a sala llena casi todos los día y explotó el último día con la participación. Estamos súper agradecidos con el acompañamiento de la gente, y toda la incertidumbre se cayó y nos ayuda a sostener y pensar en una segunda edición.
(*) Esta nota forma parte de la serie de reportajes realizados por alumnos de Práctica Profesional 1 de la Tecnicatura en Comunicación Social para el Desarrollo del ISFDYT 10 de Tandil, bajola tutela de la profesora Carolina Cordi).