En el día de San Cayetano, organizaciones sociales realizaron una asamblea por tierra, techo y trabajo

Diferentes agrupaciones nucleadas en la Unión de Trabajadores de la Economía Popular, llevaron adelante este sábado una asamblea popular en la explanada de la Municipalidad bajo la consigna “tierra, techo y trabajo”. 

En el día del santo patrono del pan y el trabajo, las muestras de organización popular y fe suelen replicarse en todo el país con fervor y Tandil no fue la excepción. 

En sintonía con la movilización que se realizó a nivel nacional, cuyo epicentro congregó a miles de personas que marcharon desde el barrio porteño de Liniers, donde está la Parroquia de San Cayetano, hacia la Plaza de Mayo, en la ciudad las organizaciones decidieron no marchar para evitar la masiva movilidad social. 

No obstante esto, se plantaron en la sede del poder comunal para exponer sus reivindicaciones, en lo que fue el primer acto de la UTEP como un sindicato formalizado. 

Florencia Villemur, del Movimiento Evita, conversó con El Eco de Tandil y recordó que “hace cinco años hubo una gran marcha de los movimientos populares pidiendo la Ley de Emergencia Social y la replicamos en esta jornada del patrono del trabajo, con las consignas de tierra, techo y trabajo, poniendo de relieve la tarea realizada por las compañeras promotoras sociocomunitarias en la pandemia”. 

Las trabajadoras, pilar de los barrios 

En tal sentido, señaló que los sectores populares llegaron a la pandemia castigados por las políticas sociales del gobierno anterior y que la crisis sanitaria los dañó aún más. 

En la localidad,  las organizaciones también se vieron afectadas  por la emergencia social y sanitaria que desató la pandemia de coronavirus y en ese contexto las trabajadoras sociocomunitarias se encargaron de sostener los comedores y merenderos, de entregar mercadería y brindar asistencia, contención y acompañamiento a las familias en los barrios populares. 

A esto se suma la labor de las promotoras  de salud, que llevaron información  y tranquilidad a los vecinos en torno al Covid-19 y posteriormente sobre la campaña de vacunación. 

Este escenario no hizo más que reforzar  y recrudecer la feminización de las tareas de cuidado, históricamente en manos de las mujeres, que dedican su tiempo y esfuerzo a sostener estas demandas dejando de lado otros aspectos de su vida.  

Además, desde la UTEP argumentaron que se deben generar mejores condiciones de vida y promover el acceso al hábitat  de manera integral  en los barrios periféricos, donde la falta de servicios  básicos, de espacios verdes públicos y el acceso al transporte está restringido. También bregaron por la  creación de un boleto de colectivo especial  para los trabajadores de la economía popular

Finalizada la jornada, la joven sostuvo que “seguimos adelante porque queremos reafirmar nuestro sindicato en la ciudad para continuar trabajando con los compañeros”.