Trabajo
El sistema de recolección de residuos por contenedores incorporó a Marina, primera mujer en el servicio
La flamante trabajadora tiene 20 años, está terminado el secundario y juega al fútbol en Juventud Unida. Oriunda de La Movediza, se incorporó recientemente como recolectora. “Es un orgullo para mi”, celebró. Guillermo Rivas, gerente de la empresa Transporte Malvinas SRL precisó que es la primera mujer que se suma en el área de recolección, a partir del desarrollo tecnológico que “iguala las condiciones laborales”. Proyectan incorporar una mujer chofer.
El servicio de gestión de residuos mediante contenedores incorporó recientemente a Marina Celeste More, la primera recolectora de la ciudad de Tandil. Se trata de un avance posibilitado por las mejoras tecnológicas que, según precisó el responsable operativo de la empresa Transporte Malvinas SRL Guillermo Rivas “igualan las condiciones laborales y permiten que una mujer pueda ser parte de una estructura laboral de recolección con seguridad, con las mismas posibilidades que el hombre”.
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Marina es del barrio La Movediza, cumplirá pronto 20 años, y se encuentra finalizando sus estudios secundarios a través del programa FINES. “Empecé a trabajar a la mañana y a la tarde voy a la escuela”, relató en diálogo con El Eco Multimedios. La flamante recolectora es además jugadora de fútbol en el Club Juventud Unida. “El fútbol femeninos es algo que pudimos llevar adelante, porque también es un ambiente muy masculino, y hoy hay millones de mujeres que empezaron a jugar, es un montón”, sostuvo.
Con respecto rol como recolectora, Marina se mostró alegre por la nueva experiencia que atraviesa. “Pensé que iba a ser mucho más duro de lo que fue, pero estuvo muy bueno y más con mis compañeros que me ayudaron”. La trabajadora contó que sus pares recolectores la acompañaron en su primera semana de trabajo, enseñándole y ubicándose a su ritmo “hasta que me ponga a ritmo yo también”, indicó.
La jornada laboral comienza para Marina a las 6 de la mañana y culmina “cuando terminamos de juntar todo”, según contó. “Me va a costar levantarme temprano, pero me voy a acostumbrar”, bromeó. En su semana inicial le tocó enfrentar la recolección en Cerro Leones, en la zona de El Centinela y en Villa Laza. La trabajadora relató que escuchó y leyó comentarios a partir de conocerse la noticia de su incorporación, y también recibió mensajes con felicitaciones. “Es un trabajo que es de hombres y al haber una mujer es raro, pero también es un orgullo para mí. Inicio un camino, esperemos que muchas chicas puedan seguir”, anheló.
Por su parte desde Transporte Malvinas, firma que gestiona el servicio de recolección por contenedores en la ciudad, su responsable Guillermo Rivas transmitió que desde hace 20 años se encuentran incorporando mujeres a la empresa, principalmente en el área de barrido. A partir de los avances tecnológicos en equipamiento y vehículos, precisó Rivas, se avanzó en la igualdad en las condiciones laborales que permiten sumar mujeres en diferentes roles.
La propuesta de la incorporación de Marina More, informó Rivas, surgió de parte del Sindicato de Choferes. “La empresa lo acepta, lo potencia y lo hace realidad”, sostuvo el responsable operativo.
Rivas planteó también que la expectativa de la empresa es “que los servicios crezcan” y en ese sentido agregó que tienen en vista la incorporación de una mujer chofer para el servicio que brindan en Tandil. “Las posibilidades del equipamiento, al tener camiones modernos, facilitan la conducción tanto para el hombre y la mujer. Y los equipos en todos los ámbitos productivos le abrieron la puerta a la mujer para manejar un auto elevador, un camión, una grúa, equipos de reparto. La mujer puede desarrollarse en todos los ámbitos en los que se desarrolla el hombre, más con todo el apoyo técnico que tiene de parte de la empresa”, consideró.
Rivas concluyó señalando que “la barrera estuvo siempre en la cabeza de alguien que evitó que la mujer participara. En nuestra empresa esa barrera no está, es bienvenida la mujer en todos los aspectos. El costo laboral no se distingue por sexo, sino por capacidades. Tenemos la oportunidad, tenemos las capacidades, tenemos la tecnología, ¿por qué no aprovecharlo?.