El proyecto del barrio Amemt volvería a cobrar vigencia con el relanzamiento del Procrear
Son 39 lotes con servicios ubicados en intendente Américo Reynoso (ExQuintana) y Buenos Aires, que están desde hace tres años a la espera de programas de financiación para acceder a la vivienda familiar. Además, la mutual posee 20 terrenos en La Movediza adjudicados a socios bajo la modalidad de autoconstrucción.
En 2017, la Asociación Mutual de Empleados Municipales de Tandil (Amemt) adquirió 14 mil metros cuadrados de tierra en las calles Intendente Américo Reynoso (exQuintana) y Buenos Aires, donde se planificó la construcción de viviendas. Se trata de 39 lotes con servicios que quedaron desde entonces a la espera de algún programa de financiación para su concreción. Ahora, con el relanzamiento del Procrear, se renovaron las expectativas en torno al predio y sus posibilidades de ofrecer una respuesta al problema habitacional.
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Consultado por este Diario, Raúl Escudero, presidente de la mutual, destacó que el año pasado se completó la documentación pertinente y se aprobó la subdivisión del macizo, lindante al desarrollo urbanístico del Procrear. También se diseñaron modelos de casas para construir en ese espacio. Y aunque el proyecto de viviendas fue al principio concebido como una iniciativa prioritaria de Amemt, ahora las puertas están abiertas a toda la sociedad.
“Después de haber hecho dos barrios de 60 viviendas aprendimos a ser prolijos y tener todos los papeles en regla. Si existiera la posibilidad de otorgar créditos, podemos presentar una carpeta con toda la documentación para que se pueda acceder a estos lotes”, explicó.
En este sentido, expuso que deberán conocerse bien las características y condiciones del nuevo Procrear recientemente anunciado por el Estado nacional para ver cómo se puede adaptar a este pequeño banco de suelo urbano, ya sea para adquirir un lote con servicios o para construir una vivienda.
También barajó la alternativa de que existan fondos que se otorguen directamente a la mutual como institución para dar crédito a los beneficiarios, enfatizando que sin aportes estatales a través de líneas crediticias es imposible que un trabajador pueda comprarse una casa.
Y sostuvo que “Procrear es un gran barrio en cuanto a diseño y calidad de las casas, ese desarrollo habitacional está muy bien en la proyección, los servicios, el ancho de calles. Con este parámetro, dejamos de proyectar la antigua casita del Instituto de la Vivienda y en su momento pensamos lo propio considerando que en algún momento la Argentina iba a ser normal”.
El crédito hipotecario como herramienta
El proyecto empezó a tomar forma hace tres años, pero el acceso a créditos hipotecarios se reducía a los famosos créditos UVA, cuyos intereses se dispararon de forma sideral y generaron un gran endeudamiento en las familias que los tomaron.
“El crédito UVA es inadmisible, terminan siendo cuotas impagables, pero siempre pensamos que en la posibilidad de que un trabajador pueda obtener un crédito para construir su casa”, señaló Escudero en alusión a las condiciones actuales que podrían empezar a darse para allanar el camino hacia la casa propia.
“Pensemos en lo que significa comprar un terreno en una de las ciudades más caras de la Provincia. Faltan políticas del Municipio pensando en el perfil de la ciudad. Mucha gente viene a radicarse, pero construye viviendas de 300 metros cuadrados en otros lugares, con otras características. El déficit habitacional no se resuelve en un año, pero el Gobierno local tiene unos cuantos periodos y evidentemente no está dentro del plan de políticas institucionales la generación de suelo urbano y de viviendas sociales”, evaluó.
Autoconstrucción en La Movediza
Por otro lado, a los 39 lotes mencionados, se suman 20 parcelas en el barrio La Movediza, ubicadas en Los Jazmines y Azucena. Estos terrenos fueron cedidos por la comuna a la institución en el marco del Plan Familia Propietaria y ya hay diez edificaciones de socios que se acogieron al modelo de autoconstrucción, mientras que el resto están en proceso de adjudicación o de inicio de obra.
“La Municipalidad nos da la facultad de que seamos responsables de adjudicarlos y el valor de los terrenos es muy accesible, mucho más bajo que el precio de mercado. Cuando se termine de urbanizar se va a abonar y a entregar las escrituras”, detalló.
En la modalidad de autoconstrucción, la entidad provee el plano, la dirección de obra y facilita la compra de materiales a medida que se va construyendo. También hacen aportes de mano de obra si llegara a hacer falta. “Todos tienen que hacer el mismo proyecto y está quedando un grupo habitacional muy lindo”, describió el referente de la asociación.
