El primer día hábil del confinamiento se registró un intenso movimiento en las calles de la ciudad
El centro evidenció ayer una alta circulación de gente dentro del margen de las actividades autorizadas. La normativa vigente apunta a mantener las limitaciones hasta el 30 de mayo y sólo abarca tres días hábiles. Los comercios no esenciales están cerrados al público e impulsan estrategias de venta telefónica y online para mantenerse en pie.
Lejos de tratarse de una jornada calma de confinamiento, después del fin de semana largo la ciudad evidenció un marcado movimiento de personas. Aunque las clases presenciales están suspendidas desde el 17 de mayo y se restringieron las actividades no esenciales, la circulación de público se hizo sentir dentro del margen de lo permitido durante el día y mermó considerablemente hacia las 18, hora del toque de queda.
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En horas de la mañana y al mediodía fue posible observar un buen número de transeúntes en las calles céntricas, aunque la mayoría de los comercios se hallan cerrados. No obstante esto, los ciudadanos aprovecharon la ocasión para hacer compras en los comercios esenciales, retirar mercadería, realizar actividad física y de esparcimiento en los espacios verdes, y trámites en los bancos, cajeros automáticos y algunas oficinas gubernamentales que siguen funcionando de forma presencial.
Vale reseñar que el sábado último entraron en vigencia las restricciones impartidas por el Gobierno nacional para los distritos en alto riesgo o en alarma epidemiológica, a las que Tandil adhirió a través de un decreto rubricado por el intendente Miguel Lunghi en el que se limitaron la mayoría de las actividades hasta el 30 de mayo inclusive, y se volverá adoptar el mismo esquema durante el fin de semana del 5 y 6 de junio para desalentar el desplazamiento de gente.
En este sentido, la idea de las autoridades nacionales fue instaurar nueve días de confinamiento estricto que solamente abarcara tres días hábiles –ayer, hoy y mañana-, contemplando en este marco temporal los feriados del 24 y 25 de mayo, y los dos fines de semana. El sábado y domingo pasados el mal tiempo ayudó a que la gente se quedara en sus casas y la circulación se viera fuertemente resentida, pero los días subsiguientes la comunidad se volcó nuevamente a las calles por diferentes razones.
Circulación limitada
De acuerdo a la normativa que rige en la actualidad se suspendieron de modo presencial las actividades económicas, industriales, comerciales, de servicios, culturales, deportivas, religiosas, educativas, turísticas, recreativas y sociales. Asimismo, los rubros considerados esenciales pueden atender al público de 6 a 18.
Por otra parte, según el decreto emanado desde el Ejecutivo nacional, las personas deberán permanecer en sus residencias habituales “y sólo podrán desplazarse para aprovisionarse de artículos de limpieza, medicamentos y alimentos y artículos de necesidad en comercios esenciales y retiro de compras autorizadas, siempre en cercanía a sus domicilios”
En línea con las determinaciones resueltas en los niveles superiores, a nivel local también quedan exceptuados de cumplir la modalidad horaria de 6 a 18 los hoteles afectados al servicio de emergencia sanitaria, prestaciones profesionales a domicilio a personas con discapacidad y establecimientos para la atención de víctimas de violencia de género.
Además, el marco jurídico establece que pueden realizarse salidas de esparcimiento en espacios públicos, al aire libre, de cercanía, en horario autorizado para circular, y dando cumplimiento a las reglas de conducta generales y obligatorias. Y en ningún caso se podrán realizar reuniones de personas, ni concentraciones, ni prácticas recreativas grupales, ni se podrá circular fuera del límite del partido, departamento o jurisdicción del domicilio de residencia.
No esenciales y gastronómicos
En tanto, los locales gastronómicos pueden trabajar bajo la modalidad take away -hasta las 18-y delivery hasta las 23. Por su lado, los negocios de venta de indumentaria, perfumería, artículos electrónicos y para el hogar, jugueterías, librerías y demás, sólo pueden comercializar sus productos de forma digital con envío a domicilio o retiro en el lugar, sin contacto con el público ni ingreso a los espacios físicos.
Así, se pudo observar en muchas vidrieras y persianas carteles que avisan a los clientes que se puede comprar por Whatsapp o a través de las páginas web o redes sociales. Por este motivo, en algunos de los comercios fue posible observar movimiento en el interior, de los dueños o los empleados que se acercan a los locales para organizar y despachar la mercadería, en aras de subsistir en medio del lucro cesante que implica mantener los negocios cerrados.