El Hospital sumó nuevas camas para ampliar la capacidad de respuesta ante el aumento de casos
Son seis plazas con las que se pretende mejorar la gestión de recursos durante las próximas semanas. Tienen potencial de convertirse en alta complejidad ya que cuentan con “panel de gases central”. Al recorrer la sala, el intendente Miguel Lunghi pidió a los tandilenses un esfuerzo más y mantener los cuidados mientras avanza la vacunación de los grupos de riesgo.
Ayer se pusieron en funcionamiento seis nuevas camas en el Hospital Municipal “Ramón Santamarina”, que permitirán aumentar la capacidad de gestión de ese recurso en medio de la segunda ola de contagios de Covid-19 que anticipa un impacto mayor.
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Las nuevas unidades fueron dotadas con oxígeno central y la potencialidad de convertirse a alta complejidad en caso de ser necesario, como una terapia de alto flujo de oxígeno, y contarán con la incorporación de recurso humano adicional para la atención de los pacientes que allí se deriven.
Con una inversión cercana a los 1.3 millones de pesos, las camas se encuentran ubicadas en un sector del centro asistencial público que fue previamente reacondicionado y cada una cuenta con un box de aislamiento.
La estrategia es contar con plazas con todo el potencial para usarlo en el momento y la demanda que se requiera. La aparatología se encuentra disponible en el Hospital, aunque desde el Sistema Integrado de Salud Pública adelantaron que se licitó la compra de dos respiradores por dos millones de pesos.
En cuanto al recurso humano, estiman que al menos habrá que avanzar con el nombramiento de personal de enfermería para poder alojar pacientes en ese sector, con la posibilidad de rotar.
“Mejorar la capacidad de gestión”
El vicepresidente del Sistema Integrado de Salud Pública, Matías Tringler, explicó que “esta iniciativa forma parte de las acciones que venimos implementado para hacer frente a la segunda ola de coronavirus”.
Con estas nuevas camas “podremos mejorar la capacidad de gestión del uso y ocupación de plazas dentro del Hospital, serán utilizadas según necesidad y con el consenso de los distintos jefes de servicios”, explicó y agregó que “incluso, en caso de ser necesario, se podrían adaptar rápidamente a aparatología de alta complejidad por contar con panel de gases central”.
Finalmente detalló que “la gran ventaja de contar con este tipo de camas es que se pueden utilizar para pacientes de baja complejidad y liberar otros sectores para casos más complejos relacionados con el coronavirus”.
“Un esfuerzo más”
El intendente Miguen Lunghi recorrió ayer el centro asistencial y el sector donde se encuentran instaladas las nuevas camas. En la oportunidad, destacó que el sector sanitario público “trabaja de manera articulada con el privado para optimizar recursos y aumentar al máximo posible la capacidad de respuesta para esta segunda ola”, que es “mucho más fuerte que la primera como ya lo vimos en otros países”.
El jefe comunal valoró el “esfuerzo y compromiso” de todos los profesionales de la salud, “que día a día enfrentan la pandemia desde sus lugares de trabajo”.
Por ese motivo, es “fundamental” que toda la comunidad comprenda que “debemos hacer un esfuerzo más, redoblar los cuidados individuales y colectivos y respetar las medidas de prevención”.
En ese sentido, llamó a “utilizar barbijo, evitar las aglomeraciones de personas, higienizarse las manos, mantener el distanciamiento social y ventilar los ambientes”.
“Hace más de un año que en el mundo estamos enfrentando esta situación y todos esos hábitos ya deben ser una costumbre. Tenemos que cuidarnos más que nunca mientras se avanza con la vacunación”, concluyó.
El anuncio
El pasado 1 de marzo, durante el discurso de apertura de sesiones ordinarias del Concejo Deliberante, Lunghi anunció la decisión de reforzar la disponibilidad de plazas en el marco de la emergencia sanitaria.
En esa oportunidad, englobó la inversión en salud durante el último año en 1.500 millones de pesos, que fueron destinados para la realización de “más de 22 mil hisopados, incorporar seis nuevas camas para cuidados respiratorios intermedios y el refuerzo de camas en terapia intensiva, la reorganización de las unidades de atención en los hospitales”, entre otras iniciativas.
Por entonces, la estrategia apuntaba a contar con la disponibilidad de plazas en caso de presentarse un incremento en la demanda, circunstancia que es casi un hecho poco más de un mes después, y destinarlas a pacientes que requieran cuidados respiratorios intermedios o para liberar otros sectores de internación.