El grupo Tándem cumple dos años promoviendo actividades para personas con discapacidad visual y guías

“Cada guía es nuestros ojos”, contó Pablo Falco. Es uno de los integrantes de Tándem, el grupo que desde hace dos años nuclea a personas con discapacidad visual y acompañantes para realizar actividades deportivas y culturales al aire libre.

La iniciativa surgió tras una capacitación que brindó el Municipio con integrantes de Guías a la Par, un colectivo similar oriundo de la ciudad de Mar del Plata, quienes compartieron su experiencia y un método de acompañamiento. A partir de ahí comenzaron a reunirse para caminar una vez por semana, sumando participantes y buscando nuevas propuestas.

La posibilidad de ascender al Cerro Tres Picos –en Sierra de la Ventana-, una experiencia “espectacular” que finalmente concretaron, los llevó a realizar una capacitación de guía en sierras que les permitió empezar a llevar a cabo no solo caminatas sin bastón sino también sumarse a pruebas atléticas como la Tandilia y la maratón en beneficio del Hospital Municipal.

“Lo más importante es tener un lugar de encuentro y hacer cosas que por ahí uno solo con la discapacidad no las haría. Ir a caminar a las sierras, uno que no ve, si está solo, no lo haría. O con un grupo convencional de caminata en la sierra, no lo haría, por la dificultad que genera. Esto se desarrolla todo con un método y hace que se nos abra la oportunidad, que se nos presente la oportunidad de hacer esto al aire libre”, compartió Falco. “Cuando vamos caminando sobre todo en las sierras o mismo andamos por el Calvario el guía va describiendo el paisaje”, destacó.

De cara al futuro proyectan continuar capacitando personas, “para que sepan tanto si participa del grupo Tándem como si se encuentra a alguien con discapacidad en la calle, sepa cómo ayudarlo, cómo colaborar si quiere cruzar. Porque que a veces tienen la voluntad pero por ahí no saben cómo manejarlo en la situación. La idea es capacitar al público en general”, sumó el integrante, quien invitó a toda la comunidad a sumarse a conocer el proyecto.

Deportes y Patrimonio

Desde Tándem empezó también a promoverse la práctica de fútbol para personas con discapacidad visual. Para eso se contactaron con un equipo del Gran Buenos Aires, quien los asesoró en el tema. Luego compraron dos pelotas sonoras, y a partir del apoyo del Municipio lograron incorporar un profesor de educación física que los acompaña en la práctica.

Una vez por semana se reúnen en la plaza de Villa Italia. “Estamos una hora. Y eso nos trae otras satisfacciones, por ejemplo, ver que a la gente le llama la atención y se suma a practicar con nosotros. Le hacemos practicar con los ojos cerrados. Han venido cursos de escuelas, y es muy interesante en ese sentido que la gente muestre cierta empatía e interés”, contó Falco.

El integrante de Tándem sumó a parte del resto del grupo a otra de las actividades que realiza, tiro con arco. En la propuesta se incorporaron miembros del club de arquería, que practicaron con los ojos vendados. “Para conocer lo que es la sensación, y salir de ese prejuicio entre comillas, que yo también tenía, de que el discapacitado está más limitado”, planteó, para luego agregar que también realizaron remo. También fueron parte de la última edición de Flama, donde compartieron con el público en general el método de acompañamiento, y hasta convocaron a uno de los jugadores de Los Murciélagos.

Por otra parte, semanas atrás fueron parte de una actividad que consistió en recorrer la Municipalidad con personas sin discapacidad visual, pero con los ojos vendados. “Para que puedan sentir el patrimonio de otra manera. Generalmente, la visión es lo que predomina cuando uno entra en un lugar. Lo que tratamos de hacer desde Cultura es que reconozcan el patrimonio con el tacto, con el oído, que reconozcan la diferencia entre materiales de la construcción del Palacio Municipal, y eso ahora lo vamos a ir trasladando a distintos lugares”, destacó Falco.

“Son ideas que surgen en el grupo, que nos interesan, las proponemos y tenemos aceptación desde Cultura, desde Deportes, desde Discapacidad del Municipio. Tenemos aceptación y sirve para generar ideas nuevas y abrirse a actividades que por ahí de otra manera no se te ocurrirían o no las haríamos”, concluyó.

El método

“El método es bastante sencillo, no es nada complicado”, compartió Falco. El integrante de Tándem señaló que suelen caminar junto al guía con una soga “contra palmas del compañero”, es decir unidos por el dorso de la mano de cada uno.

En ocasiones en los que los caminos no lo permiten, ya que se angostan o poseen lugares complicados, hacen uso de una barra de caño plástico a partir de la cual el guía toma la delantera y el acompañado lo sigue detrás. El sistema le permite a éste último percibir los movimientos.

Más allá de cuestiones personales, lo más importante, contó, es que se den pequeñas indicaciones. “Cortitas para que el guía lo pueda dar rápido y cortitas para que el guiado las pueda interpretar rápido. Escalón arriba, escalón abajo rampa arriba, rampa abajo, cordón para cruzar vereda despareja o lo que sea”, precisó.

Los participantes deben afinar el método cuando caminan sobre las sierras, en terrenos donde se torna más dificultoso transitar por los desniveles geográficos. En esos casos, sumó, el concepto es el mismo, pero deben hacer mención a la presencia de piedras y otros elementos del lugar.