141 AÑOS
El Eco de Tandil cumplió 141 años
Difícilmente haya imaginado semejante vigencia Juan S. Jaca, aquel boticario que el 30 de julio de 1882 lanzó a la calle por vez primera una simple hoja tipo sábana que decidió llamar El Eco del Tandil.
Recibí las noticias en tu email
Al repasar nombres de propietarios y directores se evidencia que en El Eco no hubo sucesores pero sí compradores, que en semejante cantidad de años no fueron tantos porque tampoco el negocio era tal. Los ocasionales adquirentes, por convicciones políticas, simplemente se hacían cargo de las deudas e impedían el cierre.
Y es que la esencia del diario, por sus ideas comunistas durante décadas, era seguir a cualquier precio con tal de combatir con la palabra.
El Eco nunca se caracterizó por tener grandes tirajes, pero sí llegada, algo que parece lo mismo pero es diferente.
Visto a la distancia, era lógico que tuviese pocos lectores. Primero, por las ideas expuestas, favorables solo a una minoría, y después porque tuvo que pelear en distintas épocas con diarios que estaban dotados de tecnología moderna, algo que era imposible que adoptase el matutino de aquellos tiempos, con pobres ingresos y nulos ahorros.
Tuvo que asumir sangre joven en los albores de los 80 para que El Eco tomase otra dimensión; para que a la par del contenido, se tuviera en cuenta lo económico, que significaba trabajo para más y más gente.
Fue entonces aún más dura la batalla, porque los que tenían mejores “armas” seguían estando y dominando ampliamente el mercado.
De a poco, con innovaciones, ideas que los convecinos aceptaron de buen gusto y los comerciantes avalaron con sus publicidades, El Eco fue creciendo.
Se incorporaron profesionales, se adquirieron nuevas maquinarias, se anexaron propiedades linderas, se construyó el edificio en pleno centro y se fue plasmando algo que se tornó fundamental: un Multimedios.
El Eco dejó de ser solo un diario. Se sumaron canal, radios, web, redes sociales, cartelería en vía pública…
Y menos mal que se adoptó esa decisión integradora, porque el avance de internet primero y la cruel pandemia después aniquilaron a una enorme cantidad de medios de comunicación de todo el país.
Son muy pocos los diarios que hoy existen en Argentina. Algunos cerraron, otros se transformaron en cooperativas y la mayoría se vio obligada a espaciar sus días de aparición.
El Eco de Tandil, sin embargo, sigue llegando a la comunidad día tras día con lo mejor que puede ofrecer.
Porque esta bendita ciudad de 200 años y su maravillosa gente lo merecen.
¡SALUD, TANDIL!
Gracias por tanto.