El 80 por ciento de los trabajadores informáticos de Tandil tuvo un aumento menor a la inflación
Este dato y otros se desprendieron de una encuesta que impulsó la Delegación Gremial de Computación sobre este final de año. La recopilación surgió entre más de cien empleados y permitirá trabajar para delinear un convenio colectivo de trabajo. Por otro lado, celebraron el otorgamiento de la personería gremial que les da la representación oficial de los trabajadores informáticos.
Desde la Delegación Regional Tandil de la Asociación Gremial de Computación (AGC) pusieron en marcha un relevamiento anual del sector local a través de una encuesta anónima que respondieron más de cien trabajadores de veinte empresas diferentes.
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Según indicó el delegado, Manuel Alonso, el objetivo del sondeo fue recolectar datos objetivos a fin de tener un conocimiento de las problemáticas del sector y sus trabajadores, y la intención es poder organizar mejor en base a eso el programa de tareas y sus prioridades, además de efectivizar el vínculo con sus compañeros.
“Este año realizamos una encuesta a mitad de año, justo cuando fue todo el cimbronazo en la economía, más la devaluación y la inflación que se disparó bastante”, contó el delgado y destacó que en su sector en particular no cuentan con paritarias ni convenio colectivo, lo que impacta directamente en el poder adquisitivo. Esto hace que las negociaciones dentro de la empresa se concreten de manera individual, dependiendo de la capacidad de cada uno para arreglar una mejora salarial. “Si bien hay empleadores que están atentos a esta problemática y dan aumentos, en la mayoría de los casos no se trata de incrementos colectivos ni por inflación, sino de rendimiento personal”, explicó y recordó que el índice inflacionario este año superó el 45 por ciento.
Sobre este fin de año se llevó a cabo otra consulta para poder realizar un balance anual con respecto al salario y fue respondida por más de cien trabajadores informáticos de unas veinte empresas locales.
Cabe destacar que la delegación se conformó el 20 de julio de este año y desde allí pusieron en marcha un arduo trabajo que se ve reflejado en el gran número de personas que se va acercando para conocer las herramientas que brindan. “Lo más valioso es que se acerquen a participar y encuentren un espacio abierto de trabajo”, indicó.
Por un convenio colectivo de trabajo
En los resultados recabados de la encuesta se vio reflejado que más del 80 por ciento de los encuestados tuvo un aumento salarial menor a la inflación percibida de enero a diciembre de este año, mientras que sólo un 19 por ciento recibió más del 44 por ciento.
Dentro de los cuestionamientos, surgió la necesidad de saber si en las empresas está bien diferenciado el aumento que es por el rendimiento de cada uno, de aquel que es justamente por adecuación inflacionaria. “Esta es una suba que debería ser para todos por igual para poder sostener el nivel adquisitivo”, sostuvo. Sin embargo, de aquí resultó que sólo el 38 por ciento de las firmas hace esta distinción, mientras que más del 60 no la concreta. “Esto se da porque hasta ahora no había una representación oficial de los informáticos y los empleadores deciden diferente en cada caso”, analizó, y reforzó la idea de que lo que buscan con el gremio es poder representar a todos los trabajadores del sector y que esas negociaciones no queden en manos de uno solo, sino que sea de manera colectiva con las herramientas que son capaces de brindarles.
Asimismo, entre los datos arrojados con relación a la inflación, se observó que los incrementos salariales por esta causa para los distintos empleados de una misma empresa no fueron igual. De esta manera, un 18 por ciento declaró percibir lo mismo que sus compañeros, pero otro 40 dijo que ha sido dispar, con un restante del 32 por ciento que no sabe cómo se efectuó.
Por otro lado, en cuanto al bono de fin de año, casi un 80 por ciento de los encuestados aseguró haberlo recibido, aunque hubo un porcentaje del 13 que al momento de responder no había tenido noticias sobre el mismo, en tanto que solamente un 8 por ciento aseveró que no se lo pagarían.
“Nosotros lo analizamos con nuestro equipo de abogados y se entendía que el decreto presidencial aplicaba para el sector informático, ya que es privado y no está en crisis”, sostuvo, contando que hicieron una pequeña campaña para advertir que era un beneficio que les correspondía a todos los que trabajan en el área. Por lo tanto, destacó como muy positivo que la mayoría de las empresas lo hayan pagado.
“Si hablamos entre nosotros y conocemos nuestra realidad, podemos empezar a tomar conciencia de las diferencias que hay, de las injusticias que muchas veces se cometen en el sector”, dijo al referirse a una parte de la encuesta que buscó promediar los salarios de las distintas categorías, pero con plena conciencia de que es un tema bastante “tabú” entre quienes se desempeñan en el área informática. Trajo a colación, cómo a los de rangos intermedios a altos los afecta fuertemente el Impuesto a las Ganancias.
“Son todas herramientas que nos van sirviendo para delinear lo que va a ser un convenio colectivo de trabajo, es decir, identificar las categorías y los niveles salariales, que son los grandes desafíos que tenemos para los años venideros en general”, adelantó.
La gran conquista
Finalmente, el Ministerio de Trabajo y Producción firmó la personería gremial para la Asociación Gremial de Computación. Esta agrupación se creó en 1993 y el expediente para lograr esa categoría se había iniciado dos años después. “La historia de la AGC ha sido atravesada por la lucha por esa personería gremial, porque son 25 años en los que han pasado todo tipo de gobiernos”, dijo celebrando lo que denominó como “la gran conquista”.
Sostuvo que es una herramienta fundamental para ellos, porque les da la representación oficial de los trabajadores informáticos de la ciudad de Buenos Aires y de toda la provincia, en esta primera etapa. Asimismo, señaló que esto los pone delante de una gran responsabilidad y muchos desafíos, pero sobre todo les da una legalidad al momento de sentarse a negociar de igual a igual con las cámaras empresariales.
“Por supuesto que esto era una meta, pero no el objetivo final, y nos permite avanzar con mucha más fuerza en lo que es la defensa de los derechos de los trabajadores informáticos”, relató, así como también podrán seguir hacia la elaboración de un convenio colectivo de trabajo y en un esquema de paritarias que les permita sostener e incluso, mejorar su poder adquisitivo.