Disminuyó parcialmente el movimiento nocturno pero preocupa la realización de eventos privados sin autorización
El brote de casos positivos de coronavirus replegó al público y mermó, en parte, la intensidad del movimiento nocturno en los locales gastronómicos. La atención está enfocada, por ahora, en prevenir y sancionar la realización de reuniones privadas. Continúan los controles e inspecciones para verificar el cumplimiento de las restricciones vigentes en la Fase 4.
Por disposición municipal y mientras se aguardaban las directivas provinciales para el cambio de fase, los locales gastronómicos funcionaron al 25 por ciento de su capacidad durante el fin de semana pasado. Ahora, con la plena vigencia de la Fase 4, la normativa reza que los espacios pueden estar ocupados hasta el 50 por ciento de su capacidad total, además de establecer los protocolos sanitarios y de higiene correspondientes.
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Pero lo que más preocupa a la conducción comunal no es el desarrollo de las actividades permitidas sino lo que sucede en el ámbito privado, con la proliferación de reuniones y eventos no autorizados que son potenciales focos de contagio. Esta mirada se sustenta en la posibilidad de monitorear las actividades autorizadas para garantizar el cumplimiento de los cuidados, tarea que es más compleja de realizar en lo privado.
En medio del brote, la gestión de Lunghi no es partidaria de restringir al sector económico y comercial, sino que apunta a “convivir” con el virus y controlarlo mediante otras estrategias. Además, claro, de la consabida “responsabilidad social” a la que apelan siempre. Puntualmente, evitar las aglomeraciones y cortar la cadena de contagio en otros ámbitos. En este sentido, el foco está puesto en que se cumplan los aislamientos en los casos que corresponda, aplicar las pautas de prevención y cuidado (lavado de manos, desinfección de espacios, uso de tapabocas y distancia) y no propiciar encuentros o eventos clandestinos que concentren personas y que puedan significar una complicación.
Gastronómicos en alerta
En tanto, autoridades comunales y miembros de diferentes instituciones que componen el sector gastronómico, se reunieron para analizar la situación actual de la actividad en el contexto de la pandemia y evaluar diferentes acciones.
El encuentro fue coordinado por la secretaria de Desarrollo Productivo y Relaciones Internacionales, Marcela Petrantonio, y contó con la participación de directivos de la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Bares, Confiterías y Afines de Tandil, integrantes de la delegación local de la Unión de Trabajadores Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina, propietarios de restaurantes y funcionarios comunales.
Al respecto, Petrantonio señaló que “estuvimos trabajando sobre varios puntos, uno relacionado al cumplimiento de los protocolos sanitarios establecidos, otro sobre el control conjunto que efectuamos y la concientización de la población sobre los riesgos y consecuencias que conlleva la participación en reuniones o fiestas numerosas y que no están permitidas”.
“El sector ha mostrado mucho compromiso y responsabilidad y la mayor parte de los establecimientos cumple de forma estricta con los protocolos para preservar la salud de las personas que asisten a esos locales y de los trabajadores. De todos modos acordamos continuar con los controles que llevamos adelante”, agregó.
Además, expuso la preocupación que genera la realización de fiestas no permitidas y aseveró que se evalúan diferentes acciones para controlar y sancionar a los responsables. “Es importante que quienes las organizan y asisten comprendan que ponen en riesgo a toda la comunidad”, dijo y recordó que este tipo de encuentros se pueden denunciar al 101.
Menor movimiento nocturno
El director general de Inspección y Habilitaciones del Municipio, Javier Camgros, refirió que, al igual que en la semana que antecedió, el horario de salida de los inspectores fue modificado para optimizar el trabajo de las guardias, que funcionan de miércoles a domingo.
En comunicación con este Diario, el titular del área afirmó que se calmó notablemente el movimiento de personas y la afluencia de público en los locales gastronómicos durante la franja nocturna, y señaló que, en torno a las fiestas no permitidas, se trabaja en forma conjunta con las fuerzas de seguridad para contener la situación.
“En la reunión con los empresarios, ellos manifestaron su inquietud y les pedimos que si tienen datos precisos de algún evento organizado en forma irregular, den aviso para poder ir a constatar”, explicó.
En caso de verificarse alguna trasgresión debe actuarse según corresponda. Si se trata de un local comercial o de eventos interviene el Municipio y si la irregularidad se detecta en un domicilio particular la policía es la encargada de labrar las infracciones correspondientes.