Desde Tandil elevaron un petitorio al Gobernador para que atienda las demandas de los talleres protegidos
Lourdes Martínez, presidenta del Taller Protegido de Tandil y referente de la red nacional y provincial de las instituciones, lanzó una colecta de firmas a través de Change.org para que el gobernador Axel Kicillof atienda las demandas de los trabajadores con discapacidad.
Junto a todos los talleres bonaerenses, la presidenta del Taller Protegido de Tandil, representante de la Red Nacional de Talleres Protegidos y referente de los Talleres de la Provincia de Buenos Aires, Lourdes Martínez, armó un petitorio digital, a través de la plataforma Change.org, en el que le solicitó al gobernador Axel Kicillof que atienda las necesidades de las instituciones para evitar su quiebra.
Recibí las noticias en tu email
“Los Talleres Protegidos de la Provincia de Buenos Aires están al borde de desaparecer. Para los que no los conocen, son instituciones que otorgan la posibilidad laboral a las personas con discapacidad. De lunes a viernes, 4.500 trabajadores con discapacidad trabajan ocho horas para hacer una serie de productos y brindar servicios”, comenzó explicando en el petitorio Martínez.
Remarcó que estas entidades, en un alto porcentaje, son asociaciones civiles sin fines de lucro que surgieron como respuesta a la “histórica deuda social” que el Estado mantiene con el colectivo de discapacidad respecto al derecho al trabajo, y que atraviesan un contexto pandémico desolador.
“Hoy en día los trabajadores con discapacidad están sumidos, en un alto porcentaje, en la pobreza; se encuentran confinados en sus hogares con la sensación agónica de perder una vez más un derecho básico. Este petitorio pretende visibilizar y dar voz a esta situación crítica. Los talleres tenemos un sinnúmero de gastos que podríamos enumerar”, clamó.
En diálogo con El Eco Multimedios, contó que desde abril están conformando la Red Nacional y que, a su vez, tienen la provincial ya que son temáticas diferentes las que se van tratando, teniendo en cuenta que cada jurisdicción tiene políticas de discapacidad y acompañamiento distintas. Además, informó que la gran mayoría de las instituciones del país está concentrada en Buenos Aires.
Aseguró, por otra parte, que contrariamente a lo que opinan algunas personas, no es una demanda particular a Kicillof por cuestiones políticas o partidarias sino que es un reclamo que lleva ya varios años: “Nosotros desde los talleres protegidos hacemos política social, no lo podemos negar. Pero siempre venimos reclamando esto. Y hoy por hoy el Change.org que se ha convertido en la plataforma que parece abrir las puertas”.
En esa línea, lamentó que el camino burocrático muchas veces es más lento y menos efectivo, mientras que un petitorio lanzado por la web puede llegar a todo el mundo.
Tandil, un caso aparte
Si bien en el comunicado destacó que muchos establecimientos están al borde de desaparecer, en comunicación con este medio aseveró que el Taller Protegido de Tandil cuenta con un gran acompañamiento tanto del Municipio como de los ciudadanos, de modo que no atraviesa una crisis tan severa como la que están afrontando algunos del Área Metropolitana de Buenos Aires o de pequeños pueblos.
“Hay talleres que siempre dependieron de la ayuda estatal. Y nosotros, de repente, somos unos beneficiados”, señaló.
Asimismo, reconoció que es una agradecida a la institución que preside, debido a que año a año se fueron generando proyectos nuevos, a diferencia de algunos establecimientos de otros lugares “que se quedaron en el armado de trapos de piso, y no está mal”.
En esta ciudad, por ejemplo, se avanzó en la elaboración de dulces, confección de artesanías y armado de un vivero, entre otras iniciativas. “Son actividades que hacen sustentable a la institución”, destacó.
De cualquier manera, señaló que no están “súper cómodos” sino que “estamos como cualquier Pyme local: luchándola y peleándola día a día”.
Los pedidos a Provincia
Remarcó la presidenta del Taller Protegido de Tandil que lo que piden son temas puntuales y, de hecho, en el petitorio lanzado a través de Change.org, que ya lleva colectadas más de seis mil firmas, son sólo cuatro los puntos destacados.
En primera instancia, que la provincia de Buenos Aires adhiera a la Ley Nacional 26.816, Régimen Federal de Empleo Protegido, debido a que esto les daría acceso a los trabajadores a un porcentaje de salario mínimo, vital y móvil, a una obra social, aportes para una jubilación y vacaciones.
“Que las personas con discapacidad tengan una obra social, un sueldo digno, una posibilidad de jubilarse, y que sean tratadas como todos. Ocho horas diarias y demás, todos los derechos de los seres humanos en cuanto al trabajo, que ellos aún no lo tienen. Y por suerte están en un Taller Protegido, distinto sería que estuvieran en sus casas sin hacer nada”, aclaró Martínez y completó: “Esa es la primera petición que hacemos, porque si la ley estuviera en vigencia no estaríamos pidiendo todo lo que viene atrás, que es, por ejemplo, que se aumente el peculio que reciben los trabajadores con discapacidad de parte de la Provincia, que es de 1.300 pesos por mes, es la nada misma, aunque hay algo por lo menos. Ese monto, hace dos años aproximadamente que no varía”.
Anexado a ese pedido está también la solicitud de incremento de becas a los talleres para evitar el quiebre de las instituciones en el corto plazo.
El tercer punto refiere a que, en caso de que no se promulgue la ley, el Gobernador tome la determinación de agregar a todos los empleados con discapacidad al plan de la Tarjeta Alimentar, debido a que de esa forma estarían ayudando a cada familia o, en su defecto, a la persona que logró una vida independiente, “porque también peleamos por eso”.
El cuarto y último punto, que se puso en evidencia aún más por la pandemia del coronavirus, es que el presidente del Banco Provincia bancarice a todas las personas con discapacidad que concurren a los talleres protegidos bonaerenses.
“Hace años que venimos peleando por eso y ni siquiera en siete meses de pandemia hemos logrado que en el banco aprieten un ‘enter’ y, así como los docentes pudieron bancarizarse rápidamente, también puedan hacerlo los talleres”, concluyó.