Pedido de obras
Desde el barrio Smata reclamaron por el estado de las calles y aseguraron que el Municipio los discrimina
A los problemas por la falta de gas natural y de cloacas, denunciados públicamente en reiteradas oportunidades por parte de los afectados, se suma ahora el de las calles de tierra que en los días de lluvia “se vuelven intransitables”, con todos los problemas que esto acarrea para el normal funcionamiento de la vida cotidiana. Los frentistas difundieron una nota en la que sostuvieron: “es increíble que ni la ambulancia pueda ingresar”.
Vecinos del barrio Smata volvieron a realizar un reclamo, en este caso por el mal estado de las calles “que, cuando llueve, se vuelven intransitables”, señalaron, y aseguraron sentirse discriminados por parte del Municipio que, a su entender, ejecuta obras en los “barrios’ cerrados’ o zonas alejadas, donde parece que la prioridad es mayor”.
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A los problemas por la falta de gas natural y de cloacas, denunciados públicamente en reiteradas oportunidades por parte de los afectados, se suma ahora el de las calles de tierra que en los días de lluvia “se vuelven intransitables”, con todos los problemas que esto acarrea para la realización de tareas sencillas como ir a trabajar o a la escuela.
En una nota difundida ayer, un grupo de residentes del barrio ubicado en cercanías a la avenida Juan B. Justo de la ciudad, indicó que “es increíble que ni la ambulancia pueda ingresar, como así tampoco el personal esencial que vive allí y debe salir a realizar su labor cotidianamente”.
“No solo ello, sino que contamos con vecinos que requieren de cuidados paliativos y domiciliarios; pero claro, parece que ello no importa porque hace más de un año que reclamamos la mejora de calles con estabilizado y cordones”, agregaron en el escrito al que accedió este Diario.
Los habitantes del Smata consideraron asimismo que “nuestro barrio es relegado, porque desde Vialidad nos dicen que no tienen estabilizado para realizar las mejoras, pero claro, para ir a realizarlas en el barrio La Elena, barrios ‘cerrados’ o zonas alejadas donde parece que la prioridad es mayor, ahí sí se consiguen los recursos”.
En diálogo con El Eco de Tandil, Jonathan Ferrando, un vecino del lugar, remarcó que “las calles están bastante abandonadas, son calles de tierra, no están entoscadas ni tienen estabilizado”.
“Desde el Municipio nos prometieron un par de veces que iban a pasar y desparramar un poco de estabilizado para que no pase esto, porque más de una vez nos encajamos”, añadió.
Ferrando vive en Smata desde hace siete meses pero hace ya varios años que conoce el barrio –y con ello a sus moradores y las problemáticas que los aquejan- porque hace cuatro años que, junto a su pareja Mariana, comenzó con la construcción de su vivienda.
“Mariana es licenciada en Obstetricia y trabaja en una clínica del centro de la ciudad. Por su profesión, para realizar las guardias, tiene que salir de casa a las 22 o a la madrugada y, cuando llueve, se ha quedado encajada en más de una ocasión”, relató.
Y continuó: “Me ha tocado a mí ir a sacarla para que se vaya a trabajar o darle mi vehículo y quedarme yo esperando a ver si alguien me daba una mano para sacar el auto”.
Ferrando se dedica al mantenimiento de los tambos. “A mí, como trabajador de la industria láctea, también me pasa que tengo que salir en cualquier momento de improvisto y se me dificulta el ingreso y egreso del barrio”, alegó.
Sin respuesta
Como en tantos otros sectores de la ciudad, los vecinos armaron un grupo de WhatsApp en el que comentan los sucesos y situaciones que consideran destacables; por ejemplo, si se produce un corte de energía o ven un automóvil que les llama la atención. Allí comparten además fotos y videos que demuestran la situación de los servicios y de infraestructura del lugar.
En este momento circula material referido al estado de uno de los caminos, donde el barro producido por la lluvia del martes pasado dificulta el tránsito de los automóviles.
En la nota difundida ayer, los vecinos intimaron al Municipio que encabeza Miguel Lunghi “a que se mejoren las calles con estabilizado, cordón y se coloquen los nombres de los pasajes”.
“Basta de callarnos, basta de favoritismo y de que la elite sea favorecida siempre, cuando las necesidades son reales”, remarcaron.
Según dijeron los frentistas, hasta el momento ningún representante del Estado municipal se acercó a escuchar las necesidades del barrio, actualmente conformado por 180 familias y con una población en crecimiento.
Ferrando sostuvo al respecto que “dejamos una carta en el Municipio pero nunca tuvimos una respuesta. Sí hay que decir que, cuando nos acercamos, desde Vialidad nos dijeron que tenían programado pasar en los siguientes 15 días a mejorar un poco las calles, pero de esto ya pasaron dos meses”.
Falta de gas y de cloacas
El pedido por el estado de los caminos se suma a los anteriores reclamos -algunos de muy larga data- vinculados a la falta de servicios básicos para la habitabilidad del lugar como cloacas y gas natural.
“De los servicios esenciales solo tenemos luz y agua corriente”, dijo Ferrando, y finalizó: “estamos acostumbrados a hacer pozos y a arreglarnos con una salamandra, una estufa o un aire frío-calor pero la realidad es que tanto las calles como los servicios son una prioridad”.