Reclamo
Con críticas al Ejecutivo, vecinos de La Elena volvieron a reclamar por el suministro de agua potable
Son frentistas de la calle Galicia al 1000. Pusieron 400 mil pesos en 2019 pero nunca se conectaron los cambios.
Vecinos de La Elena mantienen desde hace años un reclamo constante por el suministro de agua en el barrio. En calle Galicia al 1000, donde se concentran alrededor de 13 familias, llegaron incluso a abonar el adelanto de una obra que nunca se concluyó. Por eso pusieron manos a la obra, zanjearon, y analizan conectarse por sus propios medios a la red.
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“En el 2019 pagamos 400 mil pesos para hacer zanjeo. Obras Sanitarias y el Intendente nos iban a proveer los caños. Cuando se hicieron todos los trámites, los caños no estaban. Nunca nos dieron los caños y perdimos esa plata”, comentó Ricardo, uno de los vecinos que alzó la voz por la barriada, que además de la falta de suministro planteó su preocupación por el dengue y los depósitos en los que acumulan agua de lluvia.
La red, explicaron los vecinos, llega a tan sólo una cuadra de la manzana en la que viven. Incluso a pocos metros de su propiedad, otros frentistas tienen la posibilidad de realizar riegos y hasta de llenar piletas durante el verano.
“Si se llegó a una cuadra, ¿no pudieron haber continuado? No estamos hablando de mucho, y la excusa es siempre que faltan los caños”, agregaron.
Ricardo y otros frentistas, comentaron, abonaron en 2019 la mencionada suma de dinero para el avance de la obra. Desde el Municipio, precisaron, se comprometieron a brindarles los caños correspondientes, aunque “nunca estuvieron, esto es un robo total”, lamentaron.
“La plata que pusimos y de la que tenemos los comprobantes, es toda de la empresa. Pero la empresa del 2019 a ahora no va a cobrar lo mismo”, consideraron los vecinos. Por lo tanto decidieron avanzar por su cuenta y realizar un zanjeo y el principio de una conexión. Entre todos los integrantes del grupo llevan gastados casi 2 millones de pesos en recursos y analizan –de no obtener respuesta-, realizar por su cuenta el total de la conexión.
“Esto es un libertinaje total y absoluto para los políticos, no para nosotros. El laburante vive siempre igual, tirado como perejil en maceta y a nadie le interesa. Pero nosotros hicimos la obra esta, con llave de paso, con todos los chiches y la vamos a conectar. Que se enoje el intendente”, alertaron los vecinos.
“No estamos pidiendo algo de oro”
De parte de la barriada explicaron que desde que colaboraron con dinero para el avance de la obra, y registrando su pausa, realizaron más de un recorrido por el Municipio y por dependencias como Obras Sanitarias. Aunque al momento, no recibieron respuesta positiva.
“Fuimos a todos lados. Pero la excusa de siempre es que acá no pueden poner plata porque estamos en el campo. Pero la gente vive”, consideró Ricardo, quien agregó su preocupación por posibles peligros por dengue ante la presencia de agua estancada.
De la zona, explicaron, el área menos afectada es aquella en la que se encuentra un vivero ya que cuenta con pozo. Sin embargo esa no es la suerte del resto de los vecinos que a la fecha dependen del camión que concurre todas las semanas con 2500 litros de agua. También recurren a otros métodos como la acumulación de agua de lluvia en tanques.
“Hay niños pequeños, bebés, embarazadas. No es que estamos pidiendo algo de oro, es una cosa necesaria el agua. En el tanque de atrás de mi casa cargo agua de lluvia para poder lavar la ropa, porque con lo que me deja no alcanza. Tenés que bañarte, tenés que limpiar, tenés que hacer las cosas”, contaron.
“Ahora resta solamente conectarlo a la red”, alertaron los vecinos, cansados no solamente por no contar con el servicio sino también porque la inversión que realizaron en 2019 no se desarrolló. “En ese momento era mucha plata, fue un sacrificio pagarlo”, señalaron sobre los 400 mil pesos.
En el lugar, ampliaron, abonan los mismos impuestos que el resto de la ciudadanía. Incluso, agregaron, “pagamos impuestos como cualquiera, como una zona residencial”, concluyeron.