CIANE avanza en la construcción del playón deportivo para sus chicos

El Centro de Atención a Niños Excepcionales (CIANE) es una organización impulsada por familias con chicos con discapacidad que se encontraban frecuentemente en las salas de espera de las consultas de kinesiología, fonoaudiología o terapia ocupacional de diferentes institutos. 

A fines de 2005, una de las kinesiólogas les sugirió que se reunieran para compartir sus experiencias. Esa recomendación derivó en un primer encuentro en donde hablaron sobre sus hijos, los deseos y dudas sobre un mundo que un padre con un hijo con discapacidad desconoce. 

Nueve años después, esa sugerencia se convirtió en uno de los centros calificados más importantes de la ciudad en materia de discapacidad. Verónica Van Olphen habló con El Eco Multimedios sobre los desafíos pasados y los que se vienen de cara al año que comenzó.

Un balance con avances

Este grupo de padres apuntó a generar un espacio en donde se asesore a las familias, que estén contenidas y que haya un intercambio entre los profesionales. 

Para Van Olphen, la palabra que los representa, definió que el espacio es "facilitador", porque se busca acercales a las familias “todo lo que uno no conoce desde un principio”.

En el Centro de Atención a Niños Excepcionales hoy se reciben a más de veinte familias. “Siempre buscamos asesorarnos y pensarlo como un centro de salud que necesita habilitaciones municipales, provinciales y nacionales; y la idea desde el principio fue que sea económico en lo que son los gastos de mantenimiento”, aseguró.

En octubre de 2021, la ciudad celebró la culminación del edificio donde hoy funciona el centro, pero ese fue sólo un eslabón en una larga cadena. Después comenzó la construcción del capital humano con un trabajo enorme “de un montón de gente que estuvo acompañando”. 

“Se logró integrar un equipo de trabajo: una médica fisiatra, con kinesiólogos coordinando y profesionales para las distintas etapas en las cuales seguimos aprendiendo”, contó. 

La mirada de discapacidad

Para Van Olphen, la palabra "discapacidad es una más dentro de la vida nuestra".

“Quizás para alguien, cuando entra a la familia con una discapacidad es un momento duro, difícil y de mucha expectativa por todas las cosas que uno tiene que lograr o hacer para que los efectos de la discapacidad lo sean lo menos posible”, reflexionó. 

Y destacó que en las charlas, las familias siempre piensan para adelante impulsando más actividades.

Las obras sociales y el Estado

En otra línea, la mujer señaló que con el paso del tiempo, “hay cosas que han cambiado”, y dio el ejemplo de que “a nosotros nos pasaba con las obras sociales que no había un interlocutor que trabajara en discapacidad, y hoy por hoy tienen un especialista en el tema, o por lo menos un interlocutor. Después puede ser más o menos eficiente para resolver, pero antes no había y por desconocimiento no se informaba a las familias”. 

CIANE atiende a chicos de entre 0 a 21 años. No tiene un programa laboral, pero “es algo que va dando vueltas y no está llegando”, deslizó, aunque aclaró que “por ahora estamos más abocados a la rehabilitación de lo físico, lo social. La lectoescritura, el aprendizaje y la conexión con las escuelas es un desafío para este año”. 

Por lo pronto, si bien la idea es que las obras sociales cubran las terapias, para las familias que no tienen este tipo de coberturas en el centro tratan de aplicar un sistema de becas. 

Además, CIANE es prestador de Incluir Salud, con lo cual las personas que no tienen obra social pueden tramitar la pensión nacional y a través del programa, pueden realizar la rehabilitación.

“Este año vamos a entrar dentro de esa dinámica. Nosotros podemos becar un tiempo, pero tiene es el Estado el que debe garantizar la rehabilitación”, sostuvo.

En rigor, las obras sociales permitieron cubrir las terapias pero no en su totalidad, por lo cual las áreas de psicología, trabajadores sociales, enfermería y la parte administrativa es financiada por CIANE a través de los socios, los eventos y la venta de papel para reciclaje. 

“A futuro la idea es que lo recaudado sea para nuevos proyectos”, anticipó 

Objetivos 2024

De cara a este año, el objetivo es que las familias tengan su propio espacio. Dentro del CIANE “todavía no logramos crear un espacio para los padres porque todos tenemos múltiples actividades. La idea de cara a este año, justamente, es proyectar algo para las familias. Que nos demos ese tiempo para seguir pensando cosas para nuestros hijos y para nosotros”, contó Van Olphen. 

También apuntan a generar convenios con todas las obras sociales, y poder realizar evaluaciones en chicos que no viven en Tandil, pero que pueden ir al centro para hacerse las evaluaciones y continuar el trabajo con sus propios profesionales con un seguimiento mediante.

Además, entre el 15 y el 20 de enero comenzarán con el alisado del playón deportivo en el predio. Al respecto, pidió que si existe algún interesado en donar redes, arcos y aros de básquet pueden acercarse al CIANE, en Ruta 30 kilómetro 119.5; o escribir a fundaciontodossomosciane@gmail.com o comunicarse al 249-4525308.