Cerone afirmó que “el comercio se está dando cuenta de que hay que abrir los fines de semana largos”

La Semana Santa de seis días llegó a su fin pero todavía sigue dejando análisis entre los representantes de los rubros que sintieron la visita masiva de turistas a la ciudad. Bruno Cerone, presidente de la Cámara Empresaria de Tandil, dialogó con este medio y analizó los buenos resultados que dejó el turismo para los comerciantes, al mismo tiempo que confirmó el desafío que se viene para los próximos meses con la inflación y la situación económica del país.

Al igual que en otros rubros, las conclusiones de la actividad comercial durante el fin de semana extra largo fueron positivas. Según comentó Cerone, el comercio trabajó y se destacó que muchísimos abrieron las puertas jueves y viernes. “Algunos con resultados positivos, otros con resultados regulares pero lo interesante de esto es que el comercio se está dando cuenta que hay que abrir los fines de semana largo”, afirmó a El Eco de Tandil.

Esta situación que remarca el presidente camarista tiene que ver con que habitualmente el comerciante elegía cerrar su negocio los días feriados. En esta ocasión, cerrar las puertas en un fin de semana de seis días deja las cosas complicadas para el balance mensual. El empresario concluyó: “Se abrió y la gente anduvo y aprovechó a hacer algo de compras”.

Al mismo tiempo diferenció la situación para las empresas del Parque Industrial, las cuales se ven más complicadas porque son muchos días con las puertas cerradas y si abre “tienen que pagar doble jornada por una cuestión del día no laboral”. 

La versión extra larga de la Semana Santa fue un impulso importante para varios rubros vinculados al turismo. La ciudad contó con una gran cantidad de visitas, que pusieron los alojamientos casi al tope y que, según analizó Cerone, eso provocó que se vendiera muy bien. A su vez remarcó que no se puede tener tantos días cerrados por una cuestión de imagen de la ciudad y también de servicio.

Refiriéndose en líneas generales a lo ocurrido durante los últimos días remarcó que notó que la gente se cuidó un poco más en la cuestión gastronómica. “La gente por ahí la parte de alojamiento lo tiene resuelto y cuando viene acá por ahí va menos al restaurant y come en la cabaña. De todas maneras, en estos fin de semana, trata de salir y aprovechar”, concluyó.

El rubro alojamiento es otro sector en el que está involucrado y sobre esta cuestión destacó que Tandil tiene un público muy variado, donde la familia por ahí elige más la opción cabaña y las parejas buscan hoteles o alojamientos céntricos. A su vez agregó que las cabañas vendieron paquetes completos de cuatro y cinco noches, algo que en hoteles es más complicado. 

“Seis días en Tandil por ahí es demasiado tiempo, entonces la gente eligió tres días y otra gente dos”, describió  y luego agregó que hasta el martes se veía mucho movimiento más allá de que algunas actividades cerraron antes, como la feria del Parque o el mercado gastronómico.

Pasado el boom del fin de semana de seis días, ahora se viene un momento complicado para el sector empresarial: una segunda parte del primer semestre que es la más baja en ventas. Cerone entendió que va a ser un gran desafío pero confía en que la inflación va a bajar por el hecho de que va a bajar el consumo.

“Al no poder vender, se va a bajar”, afirmó el empresario que luego explicó que hay un sobre stock por muchos lados, las fábricas siguen funcionando y no se vende. Al mismo tiempo reconoció que es una forma drástica de bajar la inflación, no es la más aconsejable pero el Gobierno nacional está por ese camino. “Habrá que afrontarlo con más iniciativas, promociones, con nuevas formas de tratar de vender y llegar al consumidor”, sentenció.