Terapia Alternativa
Cannabis Medicinal Tandil volvió a la presencialidad con el foco en el Reprocann y el programa de la Unicen
La ONG cannábica retomó, tras la pandemia, las reuniones periódicas informativas que tanta aceptación tenían en la comunidad. Tras la autorización del Ministerio de Salud para que también las organizaciones se inscriban como cultivadores, las charlas rondan en esa temática para despejar dudas y explicar los alcances legales. Además, se refirieron al Programa Estratégico Regional de la Unicen.
Volvieron las reuniones presenciales de Cannabis Medicinal Tandil, que dejaron de ser los sábados como habitualmente y pasaron a los viernes aunque sin diagrama fijo, y la referente Ana María Fazekas contó hacia dónde apuntan las charlas en una conversación con el programa Tandil Despierta, de EcoTv y Tandil FM (104.1).
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En el primero de los encuentros tras la virtualidad de la pandemia, que se ofició el último día hábil de la semana pasada a las 18 en la sala A del Centro Cultural Universitario, procedieron a mostrar sus videos institucionales como siempre y luego ahondaron en las novedades que principalmente están vinculadas al Registro de Productores de Cannabis con fines terapéuticos (Reprocann)
La referente explicó y recordó la reglamentación en torno a este sistema, que otorga un código que vincula al cultivador, con el médico y el paciente en cuestión. Además de continuar trabajando con las instituciones que los acompañan desde siempre, contó que también lo están haciendo muy de cerca con la Defensoría del Pueblo provincial, ya que en torno a este Registro hay una cuestión legal que requiere hacer las cosas “muy bien”.
Las novedades del Reprocann
Hace pocos días, dentro del mismo Reprocann, se implementó el registro para que las agrupaciones cannábicas pudieran cultivar en un espacio propio. “Cuando salen estas normativas, una cosa es la promulgación y otra es la reglamentación que regule todo, y en esto también estamos trabajando para dar información concreta a quienes lo solicita, que son muchos”, sostuvo Fazekas.
Es válido mencionar que después de dos años de reuniones, pedidos, consultas y planteos, el Ministerio de Salud de la Nación finalmente dio la vía para legalizar a las ONG en la plantación de marihuana con fines medicinales para sus integrantes.
La determinación legitima el trabajo de las agrupaciones que, en algunos casos, ya desde hace más de diez años se pusieron al frente de tratamientos solidarios con cannabis. Es el reconocimiento a colectivos de pacientes, familiares y amantes del cultivo de la planta organizados para provocar un cambio de legislación.
Así, el Ministerio que conduce Carla Vizzotti aceptó el pedido del Consejo Consultivo del Reprocann (integrado por médicos, activistas, científicos y funcionarios nacionales) y autoriza a cultivar a las asociaciones para un máximo de 150 pacientes.
De esta manera, las ONG tendrán permitido cultivar en 15 metros cuadrados en diferentes predios al aire libre y hasta seis metros cuadrados en cultivos de interior por persona, siempre y cuando estén debidamente autorizadas. Dentro de los límites de esa superficie, se podrán tener hasta nueve plantas florecidas por cada usuario.
Organizaciones e individuos
Los consumidores que integren las ONG, a la vez, deberán inscribirse en el Reprocann y vincularse en la plataforma con el médico que les autorice la indicación y, también, la organización correspondiente, en el rol de cultivadores para terceros.
En definitiva, las reglas para las organizaciones son un espejo de las establecidas para usuarios particulares en una resolución publicada el año pasado. Se trata de la misma superficie permitida de cultivo, idéntica cantidad de plantas y el mismo permiso para transportar cogollos o aceite dentro del territorio argentino: entre uno y seis frascos de 30 mililitros o hasta 40 gramos de flores secas. La novedad, en este caso es que se incluyó el permiso de movilizarse con plantas, siempre en la cantidad autorizada por persona representada.
Con respecto a la acción terapéutica del cannabis, Fazekas advirtió que la planta ha pasado de ser prohibida a creerse que sirve para todo y cualquier cosa, “desde una uña encarnada hasta un cáncer en el cerebro”, lo cual no es así.
“Siempre tiene que estar el médico de por medio, tiene una acción medicamentosa y sus propios tiempos para hacer efecto”, aclaró.
Programa Estratégico regional
Por otro lado, Fazekas mencionó que la agrupación que preside también es parte del Programa Estratégico regional de Cannabis Medicinal promulgado desde la Secretaría de Extensión de la Universidad Nacional del Centro (Unicen).
De hecho, es oportuno decir que el pasado 15 de marzo en aulas de la Facultad de Agronomía se realizó la primera reunión del Programa, que busca acciones comprometidas con el acceso y el uso terapéutico responsable de la planta.
Esta propuesta regional está dirigida por Marcelo Sarlingo (de la Facultad de Ciencias de la Salud y Facultad de Ciencias Sociales) junto a Carlos Saumel (de Facultad de Ciencias Veterinarias), con la coordinación de Cecilia Astigueta (Secretaría de Extensión de rectorado).
Además, ratificando la institucionalidad y el acompañamiento que reciben las organizaciones cannábicas, se numeró la participación de Sergio Sanchez Bruni (Conicet-Facultad de Ciencias Veterinarias), Laureano Schof (Conicet-Facultad de Ciencias Veterinarias), Gastón Barreto (Conicet-Facultad de Ingeniería), Luciano Grasso (Facultad de Ciencias de la Salud-Sistema Integral de Salud Pública Municipal Tandil), Andrea Perez Villareal (Facultad de Agronomía), Paula Lafourcade (Facultad de Derecho-Facultad de Ciencias Económicas-Defensoría del Pueblo Tandil), y estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Salud y de la Facultad de Ciencias Veterinarias.
También integran el Programa Estratégico diversas organizaciones e instituciones, todos con el objetivo de ampliar el proceso de articulaciones interinstitucionales de la Universidad principalmente con la autoridad de aplicación en todos los niveles del Estado y con las asociaciones civiles cannábicas de la región de influencia, para realizar actividades conjuntas sin fines de lucro.
Tal como informaron, dese allí se gestionará para que tanto los profesionales de la salud como el Estado y la sociedad toda, asista, contenga y acompañe a quienes deseen acceder a una terapéutica de cannabis segura.