Buscan al hombre que acosó a una nena de 13 años a plena luz del día en 11 de Septiembre y Maipú
Una niña de 13 años atravesó por una despreciable situación el pasado miércoles cuando un hombre canoso a bordo de un automóvil gris oscuro la acosó e intentó que se subiera a su vehículo. Por el traumático hecho, la chica tiene temor de volver a salir a la calle y le pregunta a su madre qué ropa debe ponerse para que la gente no le diga nada.
Un lamentable episodio se registró este miércoles por la tarde, a plena luz del día, en la intersección de las calles Maipú y 11 de Septiembre: un hombre que circulaba en un automóvil gris acosó a una niña de 13 años e intentó hacerla subir a su vehículo.
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Silvina Villaverde, madre de la víctima, dialogó con El Eco de Tandil y contó el traumático episodio que vivió la menor, quien hoy tiene miedo de volver a salir a la calle: “Mi nena me pregunta ‘¿qué me tengo que poner para salir a la calle y que no me digan nada?’”.
Explicó Villaverde que su hija había salido a andar en bicicleta y que cuando volvió, como estaba cansada, decidió salir a caminar por la zona para relajar las piernas. Se alejó apenas dos cuadras de su vivienda, ubicada en 25 de Mayo y 11 de Septiembre y, alrededor de las 17, su mamá le mandó un mensaje para que regresara.
“Salió de la plazoleta del barrio Mi Jardín y cuando estaba cruzando Maipú paró un auto y le hizo señas como para que se acercara; le decía ‘vení, vení’ con la mano. Pero como ella imaginó que era por una dirección, no le dio importancia. Agarró 11 de Septiembre y dobló por 25 de Mayo para llegar a casa, pero en ese momento volvió a ver al mismo auto que venía a mayor velocidad. El conductor frenó violentamente, paró el motor y desde el habitáculo le empezó a gritar ‘¡Venís para acá, venís!’”, relató Villaverde.
La niña, cuando comprendió la situación y advirtió que el acosador atinaba a abrir la puerta, dio unos pasos hacia atrás y salió corriendo hasta su casa, donde estaba su padre. Le contó lo que había ocurrido y salieron a buscarlo, pero el hombre ya se había ido, de modo que no pudieron registrar la patente.
Lo único que sabe la nena es que era un auto gris oscuro y que quien manejaba era un sujeto canoso de pelo largo. Como no pudieron averiguar el nombre del acosador, Villaverde realizó un posteo en Facebook para ver si algún vecino podía ayudarla. Inmediatamente, le llegó un video que circuló por las redes, que una joven tuvo el coraje de grabar, pero clamó que no era el mismo individuo.
“La nena quedó con un susto terrible. Si bien ella no es de salir, y menos ahora con todo esto de que están todos los chicos encerrados, cumplió los 13 años en cuarentena y dije ‘bueno, es tiempo de que por ahí pueda salir sola’”, contó.
Además, señaló que tristemente fueron muchas las chicas de 12, 13, 14 y 15 años que la contactaron y que le comentaron que lo que sufrió su hija ellas también lo vivieron pero que nadie las escucha y que se sienten desprotegidas al momento de salir a la calle.
La denuncia correspondiente la radicaron en la Comisaría Primera pero por el momento no tuvieron novedades: “Me dijeron que me quedara tranquila, pero yo tranquila no me quedé. Fui por el barrio para ver si encontraba cámaras, ya que me dijeron que desde Fiscalía iban a buscar, pero que acá no hay dispositivos del Centro de Monitoreo. Y la realidad es que es una zona tranquila; nunca me había pasado absolutamente nada”.
La publicación en Facebook
Tras recorrer sin éxito el barrio en búsqueda del sujeto, Villaverde volcó toda su furia en una publicación que realizó en su perfil de Facebook con el fin de que algún vecino le comentara que contaba con una cámara. No obstante, lo que logró con el posteo la sorprendió.
Comentó, por otra parte, que el único dispositivo de videovigilancia que lograron observar es el de una carnicería ubicada en la esquina de Maipú y Montiel, pero se lamentó porque en las imágenes se ven varios autos que a esa hora giran, “entonces no podemos andar señalando o acusando”.
“Pero no es una chica que se maneje en la calle cómodamente. Y fue un susto bárbaro, ahora ya no quiere salir. Cuando escribí en Facebook, lo quería matar. Ahora que bajé un poco, veo que lamentablemente es casi imposible encontrar a esa persona”, sentenció.
Informó que desde que compartió el comunicado en las redes sociales le llamó la atención la gran cantidad de nenas que le escribieron informándole que habían pasado por la misma situación y que también tienen miedo.
“Realmente lo publiqué en un momento de debilidad, de calentura de madre. Yo soy porteña y en Capital eso es moneda corriente. Pero me mudé a Tandil porque era una ciudad tranquila para criar a mis hijos. Y encontrarme que acá eso también es común fue como un baldazo de agua fría. No creí tener que volver a lidiar con una cosa así y hoy me veo teniéndole que explicar a mi hija de 13 años que por el simple hecho de ser mujer tiene que soportar estas cosas”, suspiró.
Relató que, incluso, se contactó con ella una chica que tiempo atrás atravesó por una situación similar pero que, en su caso, el acosador llegó a sujetarla y a arrastrarla durante media cuadra. “Al conocer eso, dije ‘ay Dios mío, de lo que se salvó mi hija”.
“Se está naturalizando el acoso callejero”
El miedo que aún aqueja a Villaverde es que esta persona está impune y sigue circulando por las calles de Tandil, de modo que lo que le hizo a su hija se lo puede estar haciendo a cualquier otra niña.
“Tenemos que concientizar, ¿cómo puede ser que sea tan común el acoso callejero? ¿Cómo puede ser que a una nena le hagan esto en la calle? Porque es una nena. Uno me dijo que aparenta un poco más, pero ¡¿qué tiene que ver?! Es naturalizar algo que no corresponde”, enfatizó.
Evaluó que del acoso al abuso hay solo un paso y que si no se hacen movilizaciones o manifestaciones para visibilizar lo que está ocurriendo, mañana esta misma persona podría tomar coraje y agarrar a una menor indefensa. “Y ahí no nos vamos a lamentar porque la quisieron subir; lo vamos a hacer porque efectivamente la subieron”, completó.
Contó la madre de la víctima que si llega a encontrar al sujeto que acosó a la joven iniciará una acción penal y procurará que se le aplique algún tipo de restricción: “Quiero tenerlo identificado, que no aparezca más en mi vida. Y también que se sepa quién es, porque lo mismo que le hizo a mi hija se lo puede hacer a cualquiera”.
La denuncia en la Comisaría
Luego de recorrer la zona, se dirigieron a la Comisaría Primera para radicar la denuncia correspondiente. Al llegar a la dependencia, le informaron que en las redes sociales había un video de un sujeto que acosaba a una chica y que quizá era el mismo hombre. No obstante, cuando volvieron a su casa buscaron las imágenes y corroboraron que no era la misma persona: “Evidentemente son varios los que hacen eso”.
Manifestó Villaverde que aún no han tenido novedades de la Policía y que le dijeron que realizarían una investigación.
Desde la comisaría comunicaron a este medio que, si bien la madre de la víctima señaló que son varias las chicas que atraviesan por esa situación a diario, fue la primera denuncia de esa índole que recibieron.
“Estamos analizando los videos y haciendo los relevamientos pertinentes pero por el momento no hemos podido identificar al hombre”, sentenciaron.