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Biblioteca Sarmiento: “La Ley Ómnibus atenta directamente contra el Sistema Nacional de Bibliotecas”
Lo expresó Braian Urban, de la Biblioteca Popular Sarmiento, ubicada en el corazón de Villa Italia.
Bibliotecas populares de todo el país transmitieron su preocupación por los recortes y modificaciones en su regulación que fueron incluidas en el proyecto de “Ley Ómnibus”, elevado por el Presidente al Congreso Nacional.
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En Tandil, específicamente en el corazón de Villa Italia, desde la Biblioteca Popular Sarmiento brindaron detalles de cómo afectarían los cambios a estas instituciones de promoción cultural y profunda inserción barrial.
“Los argentinos nos hemos puesto de acuerdo con que es importante que nuestros chicos y nuestras docentes tengan políticas claras de acceso al libro, de promoción de lectura, de acceso a la información. Bueno, todo eso viene a romperse”, contó Braian Urban, al frente de la comisión directiva de la Biblioteca Popular Sarmiento.
Urban precisó que “este proyecto de ley, llamado Ley Ómnibus, atenta directamente contra el Sistema Nacional de Bibliotecas y contra la Comisión Nacional de Bibliotecas (Conabip) y viene a atacar varios ejes”.
La Conabip, cabe aclarar, es un organismo que fue creado por Domingo Faustino Sarmiento en 1870, y que en la actualidad nuclea alrededor de 1500 de estas instituciones de todo el país.
En ese sentido, indicó Urban, existen dos ejes concretos que podrían ser afectados si el proyecto se aprueba. El primero es presupuestario, ya que la iniciativa erradica el Fondo Especial Para Bibliotecas. Esto supone entre otras cosas terminar con el programa Libro Por Ciento, una política pública de reconocimiento internacional a partir de la cual las bibliotecas podían –en el marco de ferias y encuentros- acceder a nuevos libros con importantes descuentos y así actualizar su acervo.
“Tiene reconocimiento mundial porque no existe un programa así, en el que los representantes de las bibliotecas puedan ir hasta Buenos Aires con los gastos pagos y poder comprar libros, que son los que establecen sus propios socios y comisiones directivas. Nadie impone nada, se da todo un proceso participativo que es maravilloso”, amplió.
Pero además, explicó Urban, el proyecto propone eliminar la Junta Representativa de la Conabip, una entidad donde confluyen bibliotecas de todas las provincias. Dicho punto limita las proyecciones conjuntas que puedan establecer las entidades a nivel nacional.
Las bibliotecas populares se verían afectadas también por la derogación de la Ley del Libro, una iniciativa rechazada de plano por el conjunto de las librerías pequeñas y medianas de todo el territorio, por las consecuencias que tendría sobre los valores de los libros.
Preservar la cultura solidaria
Como tantas otras bibliotecas populares de la ciudad y el país, la Sarmiento es un espacio de encuentro, de intercambio, y sobre todo de promoción de la cultura en general y la lectura en particular.
Con una identidad asumida a partir de décadas de historia y participación en Villa Italia, la institución se perfiló en los últimos años como un ámbito de preservación de la memoria oral y comunitaria del barrio y de Tandil.
A la fecha se dictan en el lugar nada menos que 30 talleres, pero también trabajan en articulación con la Defensoría del Pueblo, generaron un espacio de alfabetización digital en donde entre otras cosas asisten a adultos mayores en cuestiones ligadas a estafas virtuales, brindan asesoramiento para estudiantes escolares y universitarios, y llevan adelante producciones audiovisuales y revistas.
Recientemente ampliaron sus instalaciones, y a la par que suman nuevos títulos también crearon un espacio denominado “Comiteca” –dedicado al mundo de la historieta- y mantienen un área que destinan especialmente a autores tandilenses de todos los tiempos.
“Las bibliotecas no solamente tienen que ver con esto del acceso y promoción a la cultura, también en ellas se da un proceso participativo de una densidad comunitaria y de una cohesión social muy fuerte”, sostuvo Urban.
“Las comisiones directivas las integramos los vecinos, de manera voluntaria, ad honorem. Nos ponemos de acuerdo para que nuestro barrio, nuestra ciudad, nuestro pueblo, tenga un espacio de cultura, tenga un espacio de acceso a la información. Y esta Ley también viene a afectar eso. No es solamente el sostenimiento material”, agregó.
El referente de la biblioteca de Villa Italia consideró además que en el caso de buscar modificar la actual normativa, deberá darse “un debate serio”, en el cual intervenga tanto el Movimiento Nacional de Bibliotecas como otras áreas implicadas.
“Si se va a dar un debate parlamentario respecto a la ley, tiene que ser convocando a las bibliotecas. Requiere una seriedad esto, y un respeto hacia quienes formamos parte de este movimiento. Porque nosotros abrimos todos los días la persiana, y como lo hacemos nosotros, lo hacen todas las bibliotecas”, expuso.
Las bibliotecas, sumó, “tienen que ver con una matriz solidaria de la Argentina, que no es nueva. La Argentina tiene una historia muy rica, y Tandil sobre todo, tiene una historia muy rica de la participación de la sociedad civil con una mirada solidaria”.
Esa historia, concluyó, supone además “un modelo de relación entre la sociedad civil y el Estado que acá se pretende borrar de un plumazo. Esperemos que nuestros legisladores sepan ver, entender esta situación. Que entiendan la historia y el rol de las bibliotecas populares en nuestro país”.