Avanzan en el pliego de licitación y comenzar con las obras que pondrán de pie la Ludoteca
Como el Ave Fénix, el edificio consumido por las llamas el año pasado resurgirá de las cenizas, y aprovecharán para reforzar el espíritu abierto y participativo. El presupuesto estima 8 millones, que surgen del pago de la aseguradora y una partida extra del Municipio. Se construirán una oficina y dos aulas, y también adquirieron bienes materiales.
A poco de cumplirse cuatro meses del colosal incendio que abatió a la sede de la Dirección de Juventud y dejó apenas, pero afortunadamente, en pie la Ludoteca Municipal, confirmaron que están avanzando en el proceso de elaboración del pliego de licitación para volver a poner el lugar en pie.
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La propuesta consta de dos etapas, de las cuales la primera esperan poder concluirla en este semestre en curso, mientras que para la segunda no hay mayores precisiones en cuanto a presupuesto ni origen de los fondos, pero sí con el espacio que se construirá.
El director de Juventud, Mariano Martina, contó que ya se ha concluido con el retiro de escombros y rellenado del terreno, asimismo ya adelantaron las transacciones para la reposición de bienes materiales, por lo que de ahora en adelante todas las energías están puestas en la reconstrucción del espacio físico.
“Esta obra va a incluir una oficina, como espacio de co-working, y dos aulas modulares, lo que va a permitir retomar la actividad lo más rápido posible”, expresó.
Presupuesto y licitación
Tal como confirmó Martina, en los próximos días sale el llamado a licitación por un monto que ronda los 8 millones de pesos, con un plazo de 60 días de construcción.
El detalle indica que son cerca de 4 millones del seguro por la destrucción del inmueble, que además otorgó un millón más para reposición de bienes; y otros 4 millones extra de una partida que destinó el Municipio para avanzar con esta inicial etapa.
Según atesoró el funcionario, la intención es poder terminarla a lo largo del primer semestre del año, aunque admitió tener la esperanza de que todo el proceso en su totalidad lleve menos de seis meses, “porque los fondos ya están disponibles”. En este sentido afirmó que el dinero de la aseguradora ya ingresó, a lo que se sumó ese monto extra del presupuesto municipal.
El pliego, entonces, estipula un plazo de obra dentro de los 60 días, aunque advirtió que primero tendrá lugar todo lo que refiere a la cuestión administrativa, el concurso de precios, la presentación de las ofertas y la selección de las mismas, que “lleva su tiempo”.
Ya todo está en trámite y esperan en las próximas semanas tener novedades con el llamado de licitación y las propuestas que se presenten.
El resurgir de las cenizas
Con esos ocho millones que se presupuestaron, se proyecta la construcción de un espacio de trabajo en común u oficina, más un espacio grande que será dividido por una puerta corrediza para formar dos aulas, una de 40 metros cuadrados y otra de 80. Además, se harán otras reparaciones y se arreglará el espacio exterior.
Una vez que empiecen a funcionar bajo esas instalaciones y considerando el protocolo por coronavirus, se estima que podrán albergar a unas 20 o 30 personas en total.
A su vez, en esta primera parte de la obra apuntan a recuperar y techar el espacio de la mesa de entradas, que es lo que quedó en pie del edificio anterior, y explicó que la refacción se hará con los recursos de la Secretaría de Desarrollo Humano.
También, señaló que con el millón de pesos de la aseguradora ya a disposición para reponer los bienes materiales, iniciaron el proceso de compra de tecnología “que es lo más volátil en el mercado”. Asimismo, están avanzadas las gestiones para la adquisición de sillas, escritorios y gacebos.
Vale recordar, que la Dirección recibió una donación de dinero que se utilizó para adquirir material didáctico y juguetes y así reponer parte de los consumidos por las llamas. El aporte fue realizado por un grupo de egresados del año ’76, en memoria de Raúl Inclán, y se sumó a otras muestras de apoyo y solidaridad de la comunidad.
Con todo esto, admitió que ya podrían tener una estructura digna como para retomar la actividad normal, dentro de los parámetros que el coronavirus impone, claro.
Por otro lado, anticipó que la segunda etapa apunta a la construcción de un salón de usos múltiples (SUM) de unos 200 metros cuadrados. Esta será una obra mucho más costosa y, si bien está la idea, todavía no se ha evaluado en profundidad el presupuesto.
Los pasos dados
Fue el sábado 10 de octubre al mediodía cuando se desataron las llamas en las instalaciones ubicadas en 11 de septiembre y Arana que dejaron daños materiales y pérdidas totales en la oficina de Punto Digital y la Dirección de Juventud. El sector de la Ludoteca, por fortuna, no fue afectado, ni tampoco otros dos salones pequeños.
Al mes de aquella tragedia y luego de hacer un inventario de las pérdidas, se procedió a la demolición y limpieza del lugar, juntando, descartando y derribando todo aquello que podría resultar inseguro ni se volvería a utilizar.
Hoy en día, reveló Martina, que ya han completado el relleno del terreno, ya que al ser una construcción antigua y con pisos de madera, tenían un espacio de casi un metro hasta la tierra y debieron completar ese hueco.
El tiempo si bien ha sido angustiante, resultó proactivo, e inmediatamente trabajaron en restablecer los servicios en el salón de la Ludoteca, ya que las conexiones de luz, gas y agua como estaban vinculadas al edificio que se quemó fueron interrumpidas.
Allí es donde se mantienen trabajando desde que las condiciones fueron óptimas, de lunes a viernes de 8 a 14, y mientras no haya cambios y continúen con protocolo reducido será así. “Esperamos que la obra se ejecute lo antes posible”, manifestó el director del área.
El espacio de referencia de siempre
“Cuando avancemos y tengamos fecha de posible inauguración se presentará como un espacio nuevo”, reveló.
El fundamento es que buscarán darle ese carácter más abierto y espíritu participativo que siempre estuvo en el objetivo del lugar, y que ahora, con un sitio físico hecho desde cero será posible hacerlo.
Finalmente, Martina no dejó pasar la oportunidad de reconocer, como lo ha hecho en todo momento, el apoyo y acompañamiento de la sociedad. Así como aquel día de octubre, destacó la solidaridad de los vecinos que hasta hoy continúan acercando materiales, revistas y otros, necesarios y útiles para las actividades. “Este ha sido siempre un lugar de referencia para la gente”, sostuvo.
