Alertaron que hay cuatro residencias habilitadas y preocupa la situación ante el contexto actual
La coordinadora del área de geriátricos de Anses, Corina Alexander, aludió a la “verdadera situación” de estos espacios. Dio detalles del relevamiento realizado y del proceso de regularización que se inició. Dijo que este trabajo resulta central para el desarrollo de acciones en este contexto.
Encendida la alarma ante la aparición de dos casos positivos en instituciones que alojan a adultos mayores, y un día después de las acciones para prevenir casos de coronavirus, la coordinadora del área de geriátricos de Anses, Corina Alexander, advirtió sobre la “verdadera situación” de estos espacios, habló de falta de planificación por parte del Estado y de una situación irregular en cuanto a la habilitación.
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En ese sentido, hizo referencia a la tarea institucional que puso en marcha junto con la UDAI y Pami para normalizar una situación que debía estar resuelta para poder “tomar medidas concretas desde marzo”.
“Hubo una alta responsabilidad de los dueños de geriátricos para evitar contagios pero no pueden quedar en sus manos, tiene que haber políticas dirigidas”, enfatizó.
Mientras avanza con el proceso, mediante la fiscalización semanal de inspectores que envía la Provincia, Alexander sostuvo que un relevamiento previo permitió detectar que “cuatro están habilitados de forma oficial” y que once cuentan con el permiso municipal.
“Esto que se hizo en un mes pudo haber sido un ejercicio de políticas locales de regularización de los geriátricos”, más aún en medio del actual contexto epidemiológico.
En función de este escenario, alertó sobre el estado de “gravedad” que genera al detectar que “todos estos años nos hemos manejado sin una planificación” del sector representados por personas que deben garantizar un “staff de personal acorde para la buena calidad de vida de los adultos mayores”.
“Esta realidad no tiene nada que ver posiblemente con el seguimiento que puedan hacer a nivel sanitario, en este u otro sector, pero sí con la responsabilidad que durante años no hubo una política determinada al respecto”, resumió.
El proceso de regularización
El proceso de regularización se inició en marzo. Con el desafío de potenciar la relación institucional de Anses con los geriátricos, comenzó un trabajo para definir un diagnóstico de situación y solicitó el listado con todas las instituciones que funcionan en Tandil. La Asociación de Geriátricos y Afines Regional Tandil (Agyart) y Pami llevaron adelante un abordaje similar.
Como resultado, según Alexander, estableció que “hay alrededor de 70 geriátricos en Tandil de los cuales cuatro están habilitados de forma oficial”, es decir, por la Provincia de Buenos Aires y “la mayoría ni siquiera tiene permiso municipal”.
Este escenario generó especial preocupación y motivó, en conjunto con la Agyart, un relevamiento para determinar cuáles eran los establecimientos en condiciones de obtener la habilitación provincial.
A partir de allí, el titular de la Regional 1 de Anses, Darío Méndez, se comunicó con la jefa de gabinete del área de Fiscalización de la administración bonaerense, Agostina Pagella, y con el director de la dependencia, Juan Canella, para avanzar en ese proceso de regularización.
En ese sentido, y con la participación de la UDAI de Anses, a cargo de Federico Martínez, y de Pami, que dirige Facundo Llano, se realizó un relevamiento y recopilación de datos de aquellos geriátricos con posibilidades de obtener “una habilitación definitiva”.
En ese caso, “completamos unas once carpetas que ya tenían su habilitación municipal”.
Inspecciones semanales
Ante lo expuesto, responsables del área de Fiscalización encendieron las alertas y colocaron a Tandil entre los municipios donde llevar adelante las inspecciones necesarias para regularizar la situación de los geriátricos.
En el último mes, con la documentación enviada, la Provincia se contactó con el Municipio para acordar la inspección “y contrastar los datos de cada una de las carpetas”, detalló Alexander.
Sin embargo, “nos encontramos con la sorpresa que el Municipio no aporta esos inspectores si la Provincia no firmaba un convenio con una empresa que pudiera hacer una base de datos del sector”.
Desestimada la opción, relató la empleada de Anses, la administración bonaerense decidió enviar a los inspectores a Tandil y, tras obtener el permiso para ingresar a la ciudad dada la importancia de la tarea, desde el jueves pasado ingresan una vez por semana para avanzar con la regularización.
