Interviene el OPDS
A tres años de su cierre, el predio de Metalúrgica Tandil permanece ocioso mientras continúa su proceso de saneamiento
En 2019 se puso en marcha el plan de desguace y remediación elaborado por Renault, que fue demorado por la pandemia. Se estima que el proceso culminaría el año próximo. El gigante de Villa Galicia es una Zona Especial de Interés Urbanístico y se desconoce qué suerte correrá después el macizo, propiedad de la empresa automotriz francesa.
En noviembre de 2018 se puso punto final a la actividad de Metalúrgica Tandil en la ciudad, luego de un mes de conflictividad que incluyó la toma de la planta y una multitudinaria marcha por las calles citadinas.
Recibí las noticias en tu email
El cierre se hizo con el acuerdo sellado por integrantes de Renault –firma propietaria de la empresa metalmecánica- y representantes de los trabajadores en la sede local del Ministerio de Trabajo provincial, y marcó el fin de una era. La fábrica se había inaugurado en 1948 y durante décadas fue el epicentro industrial local.
Más allá del simbolismo de este final y de la suerte que después corrieron el centenar de trabajadores despedidos, el espacio físico de la planta fabril -que supo ser el corazón de Villa Italia- comenzó en ese entonces un proceso de remediación y desmantelamiento que sigue hasta estos días y que podría prolongarse por un año más.
En esta línea, la compañía multinacional presentó en diciembre de 2018 un plan de saneamiento que fue avalado por el OPDS (Organismo Provincial de Desarrollo Sostenible), con el objetivo de garantizar que el terreno esté en condiciones ambientales propicias y conforme a lo que dicta la legislación vigente.
El desmantelamiento
En abril de 2019, el Concejo Deliberante declaró al predio delimitado por las calles Figueroa, La Rioja, Lisandro de la Torre y Pizzorno como Zona Especial de Interés Urbanístico. Esto implica que el macizo de tierra ya no cuenta con indicadores urbanísticos y que, por lo tanto, el Estado municipal se reserva la intervención ante cualquier proyecto que se proyecte a futuro.
Al momento de rubricar el cierre, los referentes de la firma de capitales franceses manfiestaron que Tandil no constituía un punto de interés para la producción y que la intención era, una vez concluidos todos los pasos, vender los terrenos.
Así, tras el freno a la actividad productiva en la planta, a principios de 2019 se inventariaron los bienes de uso según el protocolo establecido y se colocaron a la venta a la venta en el interior del grupo Renault. Posteriormente se ofrecieron al público y fueron adquiridos por empresas del rubro. En junio de ese mismo año, se inició el esquema de desguace y comenzaron a enviar la chatarra a Mar del Plata.
No obstante esto, lo más costoso en términos económicos y de tiempo es el procedimiento que marca la ley provincial 14.343, que tiene por objeto regular la identificación de los pasivos ambientales, y la obligación de recomponer sitios contaminados o áreas con riesgo para la salud de la población, con el propósito de mitigar los impactos negativos en el ambiente, tratamiento que aún no ha terminado.