Tras el acuerdo entre Loma Negra y AOMA denuncian que las negociaciones perjudican a los trabajadores
La líder del Movimiento 1 de Octubre criticó la forma en que el conflicto de Barker llegó a su fin. Alegó que el convenio favorece a la precarización laboral y atiende a políticas nacionales de explotación. Denunció también que les han mentido a los trabajadores sin darles detalles reales del contrato. “Todo esto barre las conquistas históricas de la clase trabajadora”, dijo Altamirano.
Luego de tres meses de conflicto y a una semana de que Loma Negra y AOMA hayan llegado al acuerdo que determinará la reconversión de la cementera, desde el Movimiento Primero de Octubre denunciaron que la negociación lleva a la precarización laboral. El convenio aceptado indica que la planta continuará abierta con 160 operarios y se dedicará a la molienda, embolsado y despacho de cemento.
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El acercamiento entre las partes fue posible el pasado 20 de junio en el marco de la conciliación voluntaria que dictó el Ministerio de Trabajo bonaerense, en una nueva convocatoria que permitió la apertura de un canal de diálogo a expreso pedido de la gobernadora María Eugenia Vidal. Sin embargo, Graciela Altamirano, líder de la agrupación social, alzó su voz para manifestar que esta resolución se amolda al proyecto que modificará la ley laboral que propuso el presidente de la Nación, Mauricio Macri, y que será tratada luego de las elecciones.
“AOMA con sus dirigentes locales y nacionales firmaron la precarización laboral”, enfatizó al contactarse con El Eco Multimedios. En este sentido, recordó que, como en 1981, Loma Negra Barker vuelve a ser la “triste y célebre conejillo de indias”, ya que en ese año pasaron al inicio de la flexibilización laboral los despidos de miles de trabajadores, se “súper explotó” a los que quedaron bajo la tercerización y multiplicidad de tareas con la complicidad del gremio de ese momento.
Según advirtió, sin ser ley aun el proyecto de reforma laboral propuesto, AOMA es la primera en aceptar “condiciones nefastas para sus trabajadores”. ”Este acuerdo, que quieren vender como un triunfo, es la réplica de las políticas de explotación”, determinó.
Los trabajadores en números
Luego de tres instancias en la conciliación obligatoria y la intervención de la Secretaría de Trabajo nacional y provincial, la empresa propuso continuar con la actividad con 160 trabajadores, mientras que 41 quedarán cesantes.
Esto implicaría que los empleados percibirán un 70 por ciento de su salario, a la vez que cumplirán con una jornada reducida de dos semanas por mes, sin descontarles los días en los que no concurran a la fábrica. Tras un extenso intercambio, la mayoría de los trabajadores avaló el ofrecimiento.
En un desglose de los pasos que se fueron dando, Altamirano dejó reflejada su visión de cómo afecta a los empleados la negociación realizada. Recordó, entonces, que de 300 trabajadores una parte arregló, y de los que continuaron luchando 41 fueron despedidos “por sus propios compañeros impulsados en asamblea por el gremio”.
Solo 160 de ellos quedan actualmente en la planta, a los que consideró que les hicieron firmar una compensación “encubierta” que implica aceptar el futuro despido. “Una indemnización en cuotas, a cuenta del despido dentro de ocho meses”, explicó.
Asimismo, aseguró que la aceptación los limita en su derecho de poder manifestarse de manera alguna en un futuro conflicto, porque subscribieron renunciando al derecho a huelga. “Firman la multiplicidad de tareas y la disponibilidad total a disposición de la empresa siendo todos los días iguales”, agregó.
Por último, lamentó que esta determinación finalmente lo que hace es dejar sin efecto todo lo obtenido en 2016, barriendo las conquistas históricas de la clase trabajadora.
Mentiras, traición y repudio
La referente del Movimiento 1 de Octubre dejó en claro que les han mentido a los trabajadores diciendo que eran “todos o ninguno”, cuando en definitiva lo que hicieron fue despedir “siendo cómplices” a 41 familias.
Por otra parte, sostuvo que a las 160 personas que mantienen su puesto también les han faltado a la verdad. “¿Por qué no les explican punto por punto lo que significa el acuerdo? En qué condiciones seguirán trabajando y bajo qué figura legal, ya que para que un trabajador pueda decidir correctamente tiene que conocer toda la información, la letra chica”, cuestionó con indignación.
Su enfoque apunta a que sean realmente “todos o ninguno”, desestimando completamente el convenio que han alcanzado las partes. “Seguimos denunciando y repudiando la entrega de la lucha de los trabajadores de Loma Negra Barker”, aseveró, remarcando que “si hay traición todos deben enterarse”.