BARKER
Sigue el paro en Loma Negra y los trabajadores temen por el cierre
El viernes la comunidad acompañó a la movilización que se llevó a cabo en defensa de los puestos de trabajo y de la planta Barker. Temen que se produzca cierre cuando se concluyan las tareas de ampliación en L’Amalí II, fábrica que se construye en Olavarría.
Sin certezas sobre la continuidad de la cementera y en medio de un paro por tiempo indeterminado que se sostiene hace una semana, este viernes la comunidad se movilizó en Barker para defender la fuente de trabajo de cerca de 350 personas y la fábrica de Loma Negra en esa localidad del partido de Benito Juárez.
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La medida se basó en la decisión de la firma de no renovar contratos o cubrir puestos vacantes, ni tampoco efectuar pases a planta permanente de los contratos vigentes.
Este hecho encendió la alarma de los obreros, que temen que se inicie un proceso de reducción de personal que derive en el vaciamiento de la planta fabril que emplea a 350 personas.
Frente a ese escenario, el viernes por la tarde los vecinos de Barker se sumaron a la movilización convocada por los empleados, que partió desde la sede de AOMA y culminó en las puertas de ingreso a la cementera.
En diálogo telefónico con el ciclo televisivo “Tandil despierta” (EcoTV), el secretario general de la seccional Barker de la Asociación Obrera Minera Argentina -AOMA-, Martín Isasmendi, trazó un complejo escenario y si bien reconoció que la empresa “nunca nos planteó la posibilidad del cierre”, las distintas acciones los llevaron a sospechar sobre el peor desenlace.
“Vimos que estaban queriendo implementar una reducción gradual de personal como una estrategia para que no genere un impacto tan fuerte y de ese modo el día que los trabajadores quisiéramos ponernos de pie ya sea tarde”, alertó el dirigente.
En ese sentido, defendió la planta de Barker y sostuvo que la patronal “no tiene ningún argumento para cerrar la fábrica o querer hacer una reducción de personal en este momento”.
“Un pueblo fantasma”
Así, especuló con las consecuencias que traería aparejadas la inversión para la ampliación en la planta L’Amalí II, en Olavarría. “El día que esa fábrica comience a funcionar va a producir un impacto súper negativo sobre otras con tecnología más vieja”, advirtió Isasmendi.
“Nadie lo muestra y la dirigencia política mira hacia otro lado. Cuando esa fábrica abra, va a desaparecer Barker, va a quedar como un pueblo fantasma. En Sierras Bayas quedan 25 trabajadores en este preciso momento y saben que la fábrica de Loma Negra en esa localidad también tendrá un impacto negativo y nadie lo dice”, agregó.
Luego, el dirigente negó que la cementera de la vecina localidad se encuentre obsoleta y recordó que “en 2001 la fábrica cerró y lo tenemos marcado en nuestra identidad, por eso lo impactante de nuestra lucha, porque no queremos que nos vuelva a pasar lo mismo”.
En otro párrafo de la entrevista televisiva, valoró la movilización del viernes en Barker, la cual fue “histórica” y un “orgullo y ejemplo de que hay otro sindicalismo, honesto, desinteresado, pacífico pero contundente, con las convicciones que tiene y la construcción colectiva que se hace desde las bases porque acá nadie obliga a nadie a parar”.
“Se hacen las asambleas adentro de la fábrica, donde todos participan de las decisiones que se toman. Todo lo que hemos vivido estos días se resume con una sola palabra, orgullo”, concluyó el secretario general de AOMA en Barker.
