Internet
La importancia de tener un buen servicio de internet en casa
Muy probablemente, hace treinta años no imaginábamos que en el día de hoy íbamos a poder contar con un dispositivo que ofrezca servicios de llamadas, mensajes de texto, música, cámara fotográfica, GPS y más.
Lo sorprendente de todos estos servicios es que la mayoría funciona si el dispositivo cuenta con acceso a internet, la verdadera estrella de este gran avance tecnológico.
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En nuestra vida cotidiana, tenemos muy incorporado el uso de internet, ya sea a través de datos móviles o internet wifi, y a veces se nos olvida las facilidades que nos ofrece para la gran mayoría de nuestras actividades.
No tener internet en casa resulta casi impensado en el día de hoy, porque para que nuestro hogar funcione correctamente es tan importante como cualquier otro servicio.
Internet y sus planes
La mayoría de los hogares cuentan con servicio de internet y es que no tenerlo nos mantendría algo desconectados del mundo. Las opciones son diversas, existen planes que se adaptan a las diferentes necesidades, tanto por el monto como por los servicios que ofrecen.
Para los clientes más exigentes existen planes de hasta 1000 megas de velocidad de bajada. Aunque para quienes no hacen uso de internet de una manera tan exhaustiva, también existen planes más modestos con 25 megas de velocidad de bajada, por ejemplo.
Además de contar con wifi incluido, estos planes ofrecen la posibilidad de conectar todos nuestros dispositivos a internet y brindan soporte técnico las 24 hs. del día para que podamos acudir a los expertos en el tema frente a cualquier eventualidad que exista con la conexión.
Internet en las casas
Según un estudio realizado por la agencia We Are Social junto a la plataforma de manejo de redes sociales "Hootsuite" durante el 2021, el 80% de la población argentina hace uso de Internet diariamente, con un promedio de 9 horas 36 min de conexión por día. Los números son claros, internet se ha vuelto vital para nuestras vidas.
Lo que antes era asociado rápidamente con las actividades recreativas como ver una película, una serie, escuchar música o navegar por nuestras redes sociales, ahora ha trascendido.
El teletrabajo se ha instalado con gran firmeza, llevando el desarrollo de la jornada laboral dentro de nuestras casas. Por eso, lo que quizás antes se desarrollaba en una oficina por largas horas, ahora sucede dentro de nuestros hogares.
Asimismo, las actividades educativas también han optado por mantener la modalidad virtual como opción. En jornadas menos extensas que las laborales pero igualmente demandantes de una buena conexión a internet.
Por otro lado, el uso de internet para juegos online también requiere de una buena velocidad que no interrumpa la interacción entre los jugadores.
Además, es posible hacer compras en supermercados, pagar impuestos o servicios, hacer transferencias bancarias e ingresar a tiendas online de forma fácil y rápida con tan solo tener internet en nuestros hogares y un dispositivo electrónico conectado.
Internet de las cosas
Internet de las cosas (También denominado internet of things en inglés) es un concepto que se ha instalado fuertemente en los últimos años. Es mucho más que conectar cosas a internet, es más bien una interconexión digital entre dispositivos que permite intercambiar datos entre ellos.
Esta interconectividad facilita el acceso a información referida al uso y el rendimiento de los dispositivos para luego ofrecer recomendaciones que mejoren la experiencia del usuario.
Con frecuencia vemos internet de las cosas en nuestros hogares: al momento de encender la alarma de la casa, regular la iluminación o programar nuestra cafetera todo desde un dispositivo móvil.
Esto no es más que otra prueba evidente de que internet en nuestros hogares es indispensable. Entre algunos de los beneficios que ofrece internet de las cosas, podemos mencionar el acceso a la información y la facilidad con la que estos datos son intercambiados entre dispositivos conectados, el aumento de productividad como resultado de un ahorro de tiempo y energía, la automatización del funcionamiento una vez que los dispositivos logran definir ciertos patrones de conducta del usuario.
Como vemos, hoy en día con un dispositivo móvil y un buen servicio de internet es posible realizar gran cantidad de tareas que anteriormente se realizaban de forma manual. También es posible programar artefactos y sincronizar electrodomésticos entre sí. La pregunta es… ¿Hasta dónde seguirá sorprendiéndonos el uso de internet en nuestra vida cotidiana?