La cooperativa Nuevo Amanecer sigue en alerta para evitar un alquiler “irrisorio” por las fábricas

Sin certezas y en estado de alerta, la cooperativa Nuevo Amanecer observa con especial atención el escenario en el marco del juicio de quiebra que derivó un pedido de pago de un canon locatario por el uso de las plantas que funcionan en Tandil y Mar de Plata.

En ese sentido, y tras una audiencia que se celebró el lunes, la Defensoría del Pueblo bonaerense anunció el acompañamiento en el reclamo de los trabajadores de la firma recuperada.

El organismo provincial que conduce Guido Lorenzino se presentará en la quiebra que se desarrolla en el Juzgado Civil y Comercial 12 de Mar del Plata, a cargo de Andrea García Marcote.

Tras una audiencia ante el Juzgado, la sindicatura reclamó a la cooperativa el pago de un canon locativo para el uso de los dos predios que pertenecen a la firma quebrada y que hoy utiliza la empresa recuperada.

Pese al paso de los años, y luego de la sanción de la Ley 14.663 en 2014 que declaró de utilidad pública y sujetos a expropiación los inmuebles con sus instalaciones y maquinarias de Mar del Plata y Tandil, el proceso de expropiación nunca terminó por concretarse por parte de la Provincia y tampoco de ser convalidada por la Legislatura bonaerense -sólo tuvo media sanción- la normativa que buscó prorrogar la norma por otros cuatro años.

Desde la Cooperativa consideraron que la exigencia de este canon podría poner en peligro el proceso económico y el crecimiento de los puestos de trabajo, la calidad de la producción y la vinculación social, ya que impulsa un importante proyecto social que incluye, entre numerosas iniciativas, contar con una escuela y un bachillerato popular para la finalización de estudios.

Mientras esperan por el accionar del organismo provincial, y a la par de otras gestiones, los trabajadores buscan darle un nuevo impulso a la ley que declare de utilidad pública y sujetos a expropiación de los inmuebles en favor de la cooperativa.

“Inentendible” e “irrisorio” 

En diálogo telefónico con El Eco de Tandil, el presidente de la cooperativa Nuevo Amanecer, Fabio Pandiani, expresó sorpresa por la decisión judicial y consideró que resulta “inentendible”.

En primer lugar, contextualizó que el pedido por el pago del canon locatario se inició el año pasado, tras caerse este año el proyecto de ley de expropiación al conseguir sólo media sanción en la Cámara de Senadores.

“Hay sindicaturas nuevas dentro de la quiebra”, que comenzaron a concretar reuniones con los asociados en las que les adelantaron que iban a avanzar con el tema del canon locatario.

Hace un mes, en una audiencia por Zoom, la jueza “no dio lugar a ningún requerimiento que pueda solicitar nuestro asesor legal”, como la opción a compra mediante un leasing o al decreto que firmó el gobernador Axel Kicillof en el que brinda “cobertura” a las cooperativas de cualquier medida en el territorio bonaerense.

La referencia es a una normativa sancionada en abril pasado por medio de la cual se declaró la emergencia económica, financiera y tarifaria de las empresas recuperadas en todo el territorio bonaerense por un año y suspendió durante ese período “todas las acciones judiciales, trámites y/o diligencias, en el estado en que se encuentren, que tengan por finalidad ordenar y/o ejecutar el desalojo de empresas recuperadas”.

Finalmente, el proceso avanzó hasta que ratificaron un pedido de “un canon locatario de alrededor de dos millones de pesos” por el uso de la planta de Tandil y de Mar del Plata.

“Estamos hablando de un valor irrisorio” por dos inmuebles “abandonados” a los que “les pusimos un valor personal y productivo”, con “inversiones nuestras y de distintos niveles del Estado”, alertó Pandiani.

A partir de allí, se abrió un compás de espera, que llevó a los integrantes de la cooperativa a plantear la problemática que atraviesan ante funcionarios, instituciones y organismos, que derivó en una intervención de la Defensoría del Pueblo bonaerense ante lo que consideraron un “ataque” al sistema productivo.

“Creo que quieren solventar el gasto de la quiebra con lo que producimos nosotros”, enfatizó.

Actualmente, la cooperativa Nuevo Amanecer cuenta con 124 socios, 43 de la fábrica de Tandil y 81 en Mar del Plata, y alrededor de 1.500 familias dependen de manera indirecta de la actividad de la fábrica recuperada.

Trabajan con 80 mil litros de leche diarios, con un buen nivel de producción y más de 26 productos para exportar y crecer, “pero si no tenemos una seguridad en cuanto a la quiebra, estamos atados”.

Para finalizar, pidió “tranquilidad” y acompañamiento a los tamberos que proveen la materia prima “en la lucha que será para todos”.

Pedido a la jueza

Según se informó en estas páginas, el defensor del Pueblo, Guido Lorenzino, recibió el lunes a integrantes de la cooperativa Nuevo Amanecer ante la preocupación por la situación que atraviesan en el marco del proceso de quiebra, “debido al requerimiento por parte de la jueza de montos de dinero respecto a créditos que no pueden afrontar en este momento”, en el cual “están realizando un gran desarrollo productivo y demás acciones”.

Por ese motivo, el funcionario ratificó que “nos vamos a presentar en el expediente para tratar de coordinar con la jueza y con el resto de los acreedores, en este caso AFIP y ARBA, de qué manera entre todos, desde los distintos niveles del Estado, el Poder Judicial y la Defensoría, ayudamos a este grupo de trabajadores que decidió ser parte de la reconstrucción de la provincia, haciendo un gran esfuerzo para sostener una actividad tan noble como es la producción láctea”.

En ese sentido, el funcionario adelantó que “vamos a ver de qué manera le podemos dar un empujón para que se puedan sustentar sin que la quiebra sea un peso en el esfuerzo que están haciendo y me parece que ese es el rol que tenemos que cumplir”.

La presentación será en esa línea, y se sumará un pedido de audiencia con la magistrada que lleva adelante el proceso “para construir una mesa de trabajo que nos permita dialogar y avanzar en esta línea de trabajo”, cerró Lorenzino.