Informáticos advirtieron que la Ley de Economía del Conocimiento sin convenio colectivo de trabajo es injusta
Diputados debatirá hoy el proyecto que nuevamente excluyó la voz de los trabajadores. Ahora, con personería gremial aseguran que no hay excusa para no ser oídos. Si bien celebran el apoyo a esta industria, una de las más dinámicas de la economía del país, hablan de injusticia social al no ser considerados ni contar con un Convenio Colectivo de trabajo.
La Cámara de Diputados emprenderá hoy la tercera sesión telemática, en la que el oficialismo busca aprobar el proyecto de ley de Economía del Conocimiento, medida que cuenta con acuerdos y consensos con la oposición. En este marco, la Asociación Gremial de Computación (AGC), sindicato que nuclea y representa a los trabajadores de la industria Informática, manifestó su postura respecto de la normativa que apunta a beneficiar a uno de los sectores más pujantes de la economía.
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Si bien aseguraron que celebran que el Estado brinde su apoyo a este sector de la industria, también advirtieron que la exclusión de la legítima representación sindical en la toma de decisiones que afectan al conjunto de la industria no solo es lesiva para los derechos laborales, sino que es nociva para el desarrollo productivo, económico, social y humano del país.
Así, Manuel Alonso, delegado regional de AGC, reveló que a lo largo de estos días llevaron a cabo varias reuniones virtuales con diputados para dar a conocer su postura, asegurando que varios estuvieron abiertos a escucharlos.
“Siempre hemos sido coherentes, estamos de acuerdo y apoyamos el desarrollo de la industria del conocimiento en general, porque aporta y mejora la situación económica del país, pero planteamos que los trabajadores puedan participar en las decisiones del texto de la Ley el régimen de aplicación”, explicó, ya que nuevamente no fueron convocados a debatir el proyecto impulsado.
A diferencia de otras oportunidades, ahora el sindicato de los trabajadores informáticos ya cuenta con la personería gremial que fue ratificada en primera y segunda instancia por la Justicia, lo que legitima la representación. “Ya no hay excusa para que nuestra voz sea escuchada”, indicó.
Con innovación y calidad
A modo de ejemplo, el gremio planteó que el uso de fondos públicos para el fomento sectorial sin la revisión de los trabajadores, “ha sido una constante en las últimas dos décadas, sin que exista evidencia de que los propósitos declamados se hayan alcanzado”, sobre todo en capacitación y formación laboral.
Por lo tanto, subrayaron que aspiran a que la industria informática sea capaz de complejizar su perfil productivo con innovación y calidad; que deje de competir por los bajos costos de la fuerza de trabajo, y que se proyecte globalmente en base a una estrategia de desarrollo orientada a la especialización en tecnologías avanzadas, capaz de generar empleos de altas habilidades, con altos salarios, “como lo han hecho países exitosos en la Economía del Conocimiento, como Irlanda o Finlandia, cada cual con su propio modelo”.
Para esto, aseguraron que se requiere de una política industrial de largo plazo, pero fundamentalmente, de trabajadores capacitados, con espíritu crítico y con visión de conjunto de la industria, “con una legítima representación sindical imbuida de un profundo compromiso gremial y solidario, pero también político, con el desarrollo del país”.
“En la mesa de las decisiones políticas, es imprescindible la presencia sindical y sostenemos que aprobar la Ley de Economía del Conocimiento sin un Convenio Colectivo de Trabajo (CCT) en el sector informático, es un acto de Injusticia Social”, ratificaron
Sin Convenio Colectivo de Trabajo
En este sentido, Alonso remarcó la importancia de este convenio, que ampare sus derechos y regule las relaciones laborales en el sector, como ocurre en todas las demás actividades productivas, comerciales o de servicio.
Para el referente del sector en Tandil, una Ley de estas características debe estar acompañada de un CCT, ya que ven como una injusticia que no haya un encuadramiento que considere los salarios y condiciones laborales de los trabajadores, que son “los que aportan el conocimiento para que esta economía pueda desarrollarse”.
“No vemos con buenos ojos que se promocione o se le den beneficios fiscales a grandes empresas informáticas que por otra parte están dando aumentos salariales por debajo de la línea de la inflación”, sostuvo al explicar por qué es necesario dicho convenio.
Aseguró que son esas grandes firmas las que están teniendo un inmenso beneficio fiscal, con notable aumento en su facturación en términos nominales y reales grandes, pero que no se ven reflejados en los sueldos de los trabajadores.
De hecho, en el comunicado presentado por la AGC advirtieron que “el representante empresario propicia un clima de desregulación, individualización y segmentación de las condiciones laborales de los trabajadores informáticos (TI), precarizándolas”.
Qué contempla la Ley
La propuesta en debate, que cuenta con el aval del Ministerio de Producción, da continuidad a la Ley 25.922, modificada por 26.692, manteniendo para los beneficiarios la reducción de un 60 por ciento la alícuota sobre el impuesto a las Ganancias y del 70 por ciento sobre el pago de las contribuciones patronales, que puede llegar al 80 en caso de que incorporen mujeres, profesionales con estudios de posgrado en ingeniería, ciencias exactas o naturales; discapacitados; y personas que sean previamente beneficiarias de planes sociales o que habiten en zonas de menor desarrollo relativo.
Al mismo tiempo, se mejoran las condiciones de acceso al régimen para las pequeñas y medianas empresas y se contempla la creación de un Fondo exclusivo para la promoción de la Economía del Conocimiento, con el objetivo de financiar la capacitación y formación laboral, proyectos de inversión productiva, internacionalización de empresas y actividades de innovación. El texto establece, asimismo, la creación de un Consejo Consultivo integrado por entidades del sistema de ciencia, tecnología e innovación.