El Ejecutivo extendió por cinco años la vigencia del contrato con Eycon para la gestión del SUMO
Rubricó un nuevo acuerdo con la empresa para darle continuidad al sistema de boleto electrónico y estacionamiento. Incorporó una cláusula para la rescisión del contrato en caso que se habiliten los beneficios de la tarifa social federal. En tanto, obligó a realizar mejoras en cuanto a la actualización tecnológica.
El Ejecutivo resolvió avanzar en la renovación de la concesión por cinco años más del sistema que actualmente opera el SUMO y selló días atrás un nuevo contrato con la empresa proveedora Eycon SA.
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En esta nueva etapa, y en medio de un proceso de recambio de gobierno, incluyó una cláusula referida a la posibilidad de rescindir el acuerdo en caso que se produzcan cambios en la política de transporte nacional y se genere nuevamente la posibilidad de adherir a los beneficios de la tarifa social federal que contiene la SUBE.
El contrato con la empresa de Bahía Blanca venció el 27 de octubre pasado y desde este lunes comenzaron a regir las nuevas disposiciones incluidas en el acuerdo.
“Estamos conformes. Nos parece que el sistema está estabilizado, funcionando bien”, resumió el secretario de Gobierno, Oscar Teruggi sobre el nuevo acuerdo alcanzado con Eycon SA, que tiene a cargo las cuestiones operativas vinculadas al estacionamiento medido y al boleto electrónico.
Aún queda pendiente la tercera parte del Sistema Único de Movilidad Ordenada (SUMO) relacionada a las bicicletas públicas. Además de las características de la zona urbana, “todavía no se logró encontrar la modalidad y vamos a ver si lo podemos llevar adelante”, sostuvo.
De este modo, el Gobierno comunal culminó un nuevo proceso de contratación para continuidad del sistema y su mantenimiento por otros cinco años.
Rescisión del contrato
En diálogo con El Eco Multimedios, el secretario de Gobierno, Oscar Teruggi, confirmó que se acordó una prórroga por cinco años, tal cual lo preveía el contrato original.
A modo de previsión, el contrato añadió una cláusula en la que se contempla la finalización del vínculo contractual en caso que se amplíen los beneficios que contempla la tarjeta SUBE hacia otras ciudades del país y que establece una tarifa diferencial para jubilados y pensionados, excombatientes de Malvinas, beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo, por Embarazo, personal doméstico, entre otros.
En caso de anular la vigencia del contrato, correrá un cargo en contra del Municipio.
“No se habla de la SUBE sino de la tarifa social federal porque nuestro paso a la SUBE era para ir en busca de esos beneficios”, aclaró el funcionario. En caso de implementarse a través de la SUMO, “no tendríamos necesidad de ir a la SUBE”, por lo que el contrato refleja que, en caso de existir beneficios a los cuales el Municipio podría acceder en cuanto a mejoras en la prestación del servicio hacia los vecinos, “poder rescindir ese contrato”.
Si este esquema se produce en los primeros años, “corresponde como cargo el pago por un año del canon y si es en los meses posteriores, lo que falte para completar la contratación”, informó Teruggi.
Otras cláusulas
Otra de las disposiciones tiene vinculación con el aumento del boleto, dado que el canon mensual del contrato se abona en cantidad de tickets. “Entonces, lo que hemos incorporado es una cláusula que contempla máximos y mínimos que tienen que ver con promedios de aumentos en años anteriores, previendo sumas desmedidas y que el contrato se vaya fiera del alcance del Municipio”, explicó.
En tanto, también sumó ciertos requisitos relacionados a la actualización tecnológica de los equipamientos utilizados en los colectivos (validadoras) y para la carga de crédito en las tarjetas, además incorporar como alternativa a través de plataformas digitales como Mercado Pago.
“Tienen tiempo para los primeros meses de 2020 para incorporar la nueva tecnología, que son mejoras”, concluyó el secretario de Gobierno.
