De Villa Italia con orgullo: de jugar al básquet en Unión a dirigir un club de playa en el caribe mexicano

“Dicen que viajando se fortalece el corazón”. La letra de Lito Nebbia se ajusta perfectamente a las historias de viajeros y migrantes que se reflejan habitualmente en estas páginas, y la de Mariano Destéfano no es la excepción. 

Mariano nació hace 35 años en Villa Italia, lugar donde vivió hasta que decidió migrar. El club Unión y Progreso fue un espacio importante en su vida, porque ahí jugó al básquet durante varios años. Fue a la Escuela Primaria 21 y en la secundaria se anotó en la Escuela Granja. Después se dedicó a trabajar en diferentes sitios hasta que en 2016 quiso ir fue a probar suerte a México y desde entonces, el chico alto que jugaba al básquet hizo un camino de hormiga hasta llegar a ser gerente de un club de playa en Isla Mujeres, en la Riviera Maya, cerca de Cancún. 

“Mi familia siempre, mi papá y mi mamá, se criaron también en Villa Italia, así que viví casi toda mi vida prácticamente ahí. Desde chiquito todo el día adentro del club, ¿no? Cuando nací me dieron una pelota de básquet y me dijeron “tomá, andá al club”. Así que casi toda mi infancia fue jugando al básquet en Villa Italia. Terminé el colegio en el 2007 y ahí mi mamá me dio la posibilidad de estudiar, pero la verdad es que nunca me gustó, entonces tuve dos intentos fallidos de estudiar y ahí me di cuenta de que no era para mí y me fui a trabajar directamente”, compartió con El Eco de Tandil desde México.