Medicina estética
Algunos conceptos del caso de la modelo y el supuesto cirujano que tiene al país expectante
Argentina es un país joven, e inmaduro, que supo ser potencia mundial, que no ha padecido guerras en su territorio ni mayores desgracias que conduzcan a una unidad nacional. Vivimos mirando al exterior, creyendo que la vida allá es mejor, sin tener idea de lo bendecidos que somos y de lo hermoso que es este país. Tenemos una idiosincrasia muy particular, nos creemos vivos, nos parece gracioso evadir la ley, pasar un semáforo en rojo, estacionar en línea amarilla, total no pasa nada. Es un país donde los derechos del delincuente están por encima de los de los trabajadores, donde da lo mismo cualquier cosa, donde cualquiera puede hacer lo que quiere.
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El argentino sabe lo que está bien y lo que está mal, no es ignorante, y gran labor hacen los maestros, maestras, profesores y profesoras y familias para enseñar, a pesar que el país no se los retribuya. Prueba de ello es que en el exterior el Argentino se comporta 10 puntos, es respetuoso, amable, respeta los límites de velocidad, los peatones, las luces rojas, y lo hace porque sabe que la ley se cumple y que las penas son graves.
Cuando la policía desea actuar, el fiscal no respalda, si respalda el fiscal no lo hace el juez, si el juez lo hace, aparecen los defensores de los derechos humanos, o gana el del mejor abogado, y así es una historia de nunca acabar.
Tal vez un Bukele ordenaría las cosas, que no dista mucho de la severidad de las leyes en Japón, o de la gestión de Giulani en Nueva York, pero los organismos internacionales lo muestran como dictador con 95 por ciento de apoyo de la población. Creo que no hay que llegar a eso, sino apoyar la educación y el cumplimiento de las normas para poder vivir en convivencia y armonía.
La Cirugía Plástica y Reparadora y la Medicina Estética no están exentas a la realidad del país. En la Argentina, hay muchas personas diciendo que son médicos y no lo son, algunos casos se mediatizaron como el caso Rimolo, pero es uno de los países que menos controles realiza. En Tandil también se hizo conocido el caso del supuesto cirujano cardiovascular que no era médico y operó a muchos ciudadanos en una institución local. Al día de hoy todo sigue igual, las instituciones no tienen un protocolo estricto de admisión, y puede ir alguien a operar sin demasiado análisis, y puede meter a quirófano a su asistente aunque no sea instrumentadora, o médica, o sepa mantener la esterilidad. En este país, donde cada uno puede hacer lo que quiera, ya que no hay ley de especialidades, por lo cual cualquier médico puede ejercer en lo que desee, por más que no tenga idea. A nadie se le ocurre ir a ver un cirujano plástico para que le realice un parto, le opere un riñón, lo opere de cataratas, o de un tumor cerebral. Sin embargo la población concurre a otros especialistas para realizarse un procedimiento estético, o lo que es peor acuden a personal no médico.
Por lo expuesto me atrevo a decir que el paciente es un ser pensante e inteligente, y lucido para poder discernir a quien consultar, y también para desconfiar si no lo atienden en una institución adecuada, o le cobran muy barato, nadie compraría un auto de alta gama por un valor bajo, sin sospechar que algo no anda bien.
Hoy la estética debe ser considerada como parte de la salud, verse bien ayuda a sentirse bien, y a que a uno le vaya mejor.
Ahora se habla de este caso que es conocido pero poco se habla de todas las personas que no son conocidas, que no tienen prensa porque no venden. Poco se habla de las minorías, como las personas trans por ejemplo, que han sido víctimas de la marginalidad y la experimentación, inyectándoles sustancias industriales.
Este médico en cuestión, no es cirujano, aunque si lo dice su titulo universitario. ¿Y como puede ser esto? Se lo explico, ciertas universidades dan el título de médico cirujano, aunque jamás haya operado a nadie, así como a mí la UNLP me dio el título de médico.
Este hombre vivía en el Litoral, su novia (conocida modelo) vino a estudiar a Buenos Aires, y se relacionó con la farándula.
En Capital Federal no hay colegio de médicos y los controles son aún menores que en cualquier otro lugar del país. Deciden venir a probar suerte a la Capital, y evade de alguna manera varias causas por muertes de gente de menos recursos en el litoral.
Comienza a operar con ayudantes que si tenían cierta idea quirúrgica, a personas de la farándula de manera gratuita, por canje publicitario.
A la mujer argentina le gusta tener más cola, pero los implantes glúteos requieren de expertise para colocarlos, tienen un postoperatorio algo molesto y son caros. Se le ocurre la idea de realizar lipotransferencia de glúteos, pero no solo con la propia grasa de la paciente, sino agregando algo que le de mayor consistencia, lo que el llamaba metacrilato. La realidad, confirmado por biopsia es que el utilizaba un cemento en polvo que se utiliza en traumatología para fijar las prótesis. Está autorizado por ANMAT, pero para ese uso traumatológico.
El cuerpo censa que hay un exceso de minerales en el cuerpo, además del óseo normal, se da cuenta que hay más, comienza a tratar de eliminarlo, y como no puede llegar a sacar el que está mezclado con la grasa, saca de los huesos, superando la capacidad de filtración renal, dañando los riñones y como consecuencia diálisis para poder vivir.
Es una irrealidad esperar un trasplante cadavérico para una persona que además de haber llegado de una manera cuestionable a practicarse ese procedimiento, si le pusieran un órgano sano, lo dañaría en poco tiempo.
Por todo lo expuesto, no hay dudas que el actuó mal, no estudio, no era especialista, uso material no autorizado para ello, pero también está mal que nadie controlo eso, ni a esta persona que ya tenía antecedentes y este caso de la modelo conocida es solo uno más de decenas de los que acumuló en Bs As.
Ahora lo que es peor, y como sociedad preocupa, es que cuanto más famoso, cuanto más escándalos acumulaba, más se le llenaba el consultorio, mucha gente de Tandil lo fue a ver y se operó con él de hecho. El pacientes es responsable de sus decisiones también.
Creo que es un caso de repercusión nacional, que nos invita a reflexionar, no solo porque hay gente que va consultar con alguien así, sino también a nivel micro, acá en la ciudad, porque hay gente que va a hacerse procedimientos estéticos o cirugías, con personas que no son médicos, o que son médicos pero que no son especialistas, o que atienden en lugares dudosos.
Si estás pensando en un procedimiento estético, no dudes y consulta con cualquiera de los Especialistas en Cirugía Plástica y Reparadora de la ciudad, reconocidos por la Sociedad Argentina de Cirugía Plástica y Reparadora.