Elegante Sport
Mariano Zabaleta y el lamentable recuerdo del peor momento que vivió en su carrera
El tandilense Mariano Zabaleta supo codearse con los mejores en el circuito ATP, se consagró en tres torneos (Bastad, en dos oportunidades, y Bogotá) y alcanzó el puesto 21° del ranking en el año 2000. Sin embargo, en esa misma temporada protagonizó, sin quererlo, uno de los peores incidentes en la historia del tenis.
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La “Serie de los sillazos”, como se la conoció, ocurrió en abril del 2000 en el marco de un enfrentamiento entre Chile y Argentina por la Copa Davis.
El duelo se llevó a cabo en el país trasandino, que optó por jugar en el Parque O'Higgins, un estadio nuevo con capacidad para más de 10.000 espectadores que aún no había terminado de construirse y, por eso, las sillas no estaban fijas.
El clima era tenso. Días antes la Selección Argentina de fútbol había goleado a los chilenos y muchos tomaban este encuentro deportivo como una revancha. De hecho, el propio Nicolás Massú reveló que había muchos fanáticos del balompié en el estadio.
En el primero de los partidos, Marcelo Ríos le dio el punto a Chile luego de ganarle a Hernán Gumy por 6-4, 6-3, 4-6 y 6-1. En el segundo duelo, el viernes 7 de abril, el tenista tandilense estaba en ventaja ante Massú por 7-5, 2-6, 7-6 y 3-1 cuando comenzaron a arrojarle monedas, naranjas y otros proyectiles desde la tribuna.
Zabala intentó tomar un objeto para enseñárselo al umpire pero un joven ball boy se anticipó y lo escondió. El tenista serrano lo increpó, lo que provocó que el público se exasperara aún más.
La temperatura en el estadio fue subiendo hasta que un espectador arrojó una silla. Inmediatamente después, decenas de asientos comenzaron a volar desde las gradas a la cancha. La peor parte se la llevó Carlos Zabaleta, padre de Mariano, quien sufrió un severo corte en la cabeza que requirió unos 20 puntos de sutura.
Por la noche, Argentina decidió retirarse de la serie alegando falta de seguridad, mientras que Chile ofreció seguirla a puertas cerradas. Así, se presentó el sábado y, ante la negativa del equipo argentino, el resultado fue 5-0 en favor de los chilenos.
En diálogo con el programa Elegante Sport, que se emite por Tandil FM 104.1, Zabaleta recordó: “Fue la única vez que pasó en el tenis, y tuve la mala suerte de que me pasara a mi. Obviamente me afectó mucho”.
En ese sentido, enfatizó que los jugadores profesionales están preparados mentalmente para que les pasen cosas malas, como pelearse con una pareja, que fallezca algún familiar cercano o tener que hacer frente a una lesión. “Pero pelearte todos contra todos en una cancha no está en las posibilidades”, manifestó.
“A la Argentina la descalificaron, había periodistas que decían que había sido culpa mía, los de Chile decían que me tenían que meter preso, a mi viejo le partieron la cabeza… Tuve sensaciones muy fuertes que me sacaron de eje. Me acuerdo que después de esa Copa Davis perdí ocho o nueve primeras rondas seguidas, y yo venia jugando increíble”, lamentó y sentenció: “Me pasó una catástrofe deportiva”.