FRASES EN LA HISTORIA
“Cedan las armas a la toga”
Por Daniel Xodo
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(“Cedant arma togae”. Marco Tulio Cicerón, filósofo, jurisconsulto y político romano, 106/43 a.C.)
Junto a Marco Aurelio, Seneca y Lucrecio, Cicerón es uno de los principales filósofos del período clásico de Roma orientados principalmente a la filosofía política y la ética.
Célebre por su oratoria, para lo cual se había formado en Grecia y Asia estudiando Filosofía, Retórica. Derecho y Literatura, recorre varias escuelas filosóficas sin adherir particularmente a ninguna, evidenciando un eclecticismo influenciado en gran medida por el estoicismo.
En Roma, desarrolla una importante carrera política y como abogado, defendiendo a ultranza a la República y el orden social y político establecido por ella, aunque esta muestra ya signos de decadencia, evidenciando los problemas generados por la disparidad de derechos entre las diferentes clases: los “optimates”, integrado en gran medida por los terratenientes y los descendientes de familias patricias, la clase “equestre” y la plebe.
Aun defendiendo los intereses de los optimates -se ignora si por convicción o interés- sostiene que las clases medias son las que deben defender la Republica y les adjudica la responsabilidad de velar por la misma.
Critica por igual a César y Pompeyo por sus ambiciones de poder. No participa del asesinato de César, pero lo convalida reservadamente. Y se transforma en enemigo acérrimo de Marco Antonio que busca suceder a César.
Así también, cuando Octaviano derrota a Marco Antonio, viéndolo como un futuro dictador señala: “Laudandum adolescentem, ornandum, tollendum” (“El muchacho debe ser alabado, honrado y eliminado”).
Sostiene y pregona la idea de que el derecho se funda en la ley natural, no en el simple consenso de los hombres, dando una orientación ius-naturalista al derecho romano. “Que algo lo decida la mayoría no lo hace legítimo, para ello se debe recurrir a la ley natural” y se explaya sobre de la “tiranía de las mayorías”.
El pensamiento occidental tiene una enorme deuda con Cicerón que ha influido en la ética y la moral en todos los siglos posteriores a su muerte.
Justicia, sabiduría, fortaleza y templanza, tomados por él de Platón, trascienden al cristianismo a través de San Ambrosio y San Agustín (considerados padres de la Iglesia) que valoran sus escritos y los toman como referencia natural de la fe cristiana, y también de Santo Tomás de Aquino, uno de sus principales teólogos, aunque Cicerón, naturalmente, no había sido cristiano pues vivió antes de que Cristo naciera.
Luego de frustrar la conspiración de Catilina, que atentaba contra la República y también contra los privilegios de la clase senatorial y vencido éste en batalla, hace matar al resto de los conjurados, incluido un Cónsul, argumentando una vieja ley, el “Senatus consultum ultimum de republica defendenda” (Decreto del senado en defensa de la República), que autorizaba al Senado a tomar medidas extremas cuando la República estaba en peligro, sin considerar que, de modo general, sólo una asamblea de la plebe podía condenar a muerte a un ciudadano romano sin juicio previo.
Acusado por esta acción, es expulsado de Roma y debe exiliarse. Indultado, retorna pero nuevamente debe huir en el 43 a.C.
En esta huída es alcanzado y voluntariamente extiende su cuello para facilitar la labor a los asesinos. Su cabeza y sus manos serían exhibidas en una tribuna del foro romano.
Siglos después, dos ciudades, Arpino y Sora, se disputarían ser su lugar de nacimiento. Para dirimir la cuestión, resolvieron el asunto mediante un combate de sus campeones en justa de caballería. Ganó Arpino. Por lo tanto, se consideró herejía que alguien afirmara que Cicerón hubiera nacido en otra parte.
De la variada y abundante obra literaria, “De Ofiiciis” (Sobre los Deberes) es una de las más relevantes y su obra póstuma.
Fiel a sus convicciones sobre el derecho En parte de uno de sus versos expresa “Cedant arma togae” (Que las armas cedan a la toga), aludiendo a que el gobierno de las armas debiera dar paso al gobierno civil. el de la fuerza al del derecho y la política.
Sin duda una recomendación apropiada a los tiempos que transcurrían.
Pocos años después de su muerte, un victorioso general, Octaviano, recibía del senado el titulo de Augusto, convirtiéndose en el primer emperador de Roma.
(Fuentes: Posteguillo S. (2023). Maldita Roma. Penguin Random House.Grupo Editorial. Buenos Aires.
Malet A. (1944). Historia romana. Los orígenes. Las conquistas. El imperio. Hachette. Buenos Aires
Grimal P. (2008). Historia de Roma. 2da ed.Paidos. Buenos Aires.
https://es.wikipedia.org/wiki/Senatus_consultum_ultimum
https://it.wikipedia.org/wiki/De_consulatu_suo
https://encyclopaedia.herdereditorial.com/wiki/Autor:Cicer%C3%B3n,_Marco_Tulio
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https://www.lavanguardia.com/historiayvida/mas- lhttps://es.wikipedia.org/wiki/Cedant_arma_togaehttps://www.lavanguardia.com/historiayvida/mas-historias/20230403/8864585/frases-ciceron-sobre-como-evitar-maldad-antigua-roma-pmt.html)