Pelé y Romeo, juntos en una noche para el recuerdo
La estrella brasileña y el tandilense fueron rivales en 1969. Detalles de una jornada imborrable en La Plata.
El diario La Nación publicó un informe evocativo de las visitas del Santos de Brasil a La Plata, en épocas en que Pelé se lucía con la camiseta del mítico equipo paulista.
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La nota, cuya autoría corresponde al periodista Máximo Randrup, detalla las ocasiones en que Santos se enfrentó con Gimnasia y Estudiantes durante la década del ’60.
En primer término, el equipo brasileño jugó un amistoso con Gimnasia, el 9 de febrero de 1962. Empataron 2-2, en cancha del “Lobo”, seis días después de que los brasileños aplastaran en Avellaneda al vigente campeón argentino Racing Club, por 8-3. Pocos meses después, “O Rei” lograba el segundo título mundial con el seleccionado de su país, en Chile.
Casi ocho años más adelante, el 4 de diciembre de 1969, Santos enfrentó a Estudiantes, en el marco de la Supercopa de Campeones Intercontinentales, un torneo de corto vuelo que apenas llegó a desarrollar dos ediciones. El “Pincha” ganó 3-1 en su cancha y opacó a la gran estrella brasileña. Con la casaca blanca y roja a bastones verticales, Daniel Romeo era el más joven del plantel. El tandilense tenía apenas 18 años y compartía equipo con varios de los bicampeones de América ’68-’69 y campeones de la Intercontinental de la temporada anterior frente a Manchester United.
Esa noche, Estudiantes formó con Gabriel Flores; Rubén Pagnanini, Hugo Spadaro, Raúl Madero y Oscar Malbernat; Carlos Bilardo, Néstor Togneri y Daniel Romeo; Marcos Conigliaro, Camilo Aguilar y Juan Ramón Verón, autor de dos goles y figura estelar. Enfrente, jugadores como Clodoaldo, Carlos Alberto, Edu y Joel, además de Pelé, todos integrantes del seleccionado de su país.
Ni el equipo platense ni su rival de esa vez progresaron en el torneo, a tal punto que el partido de segunda rueda no llegó a jugarse, porque ambos quedaron sin posibilidades de clasificarse.
Por entonces, Pelé tenía 29 años. Había recorrido el mundo con Santos y se disponía a dar su última gran función con el seleccionado brasileño, campeón en México 1970. A su lado, un joven Romeo vivió una de sus noches de gloria.