Por Fernando Izquierdo, de esta Redacción

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Lucas Irazábal es uno de tantos embajadores del deporte tandilense en el mundo.

Radicado en México, se abre camino internacional desde el pádel. Días atrás, en dupla con el mendocino Matías Lucero, consiguió un título en Monterrey y ya proyecta su pretemporada pensando en los objetivos de cara a 2025.

Desde el país norteamericano, Irazábal mantuvo un diálogo con Último Bondi (Tandil FM y Eco TV):

“Pudimos llegar al título con mucho esfuerzo. Fue un torneo anual que se realizó en un club muy cercano a dónde estoy viviendo. Estoy radicado en un pueblo que se llama Santiago de Monterrey. Nos invitaron junto a mi compañero mendocino que vive conmigo y, por suerte, se nos dio”.

-¿Las expectativas pasaban por lograr el título o fueron sin mayores referencias respecto al nivel que encontrarían?

-Fuimos con la premisa de ganar el torneo, con mi compañero tuvimos la suerte de poder viajar a Cancún a competir previamente en un torneo con algo más de nivel, nos fue bien. Ahí, terminamos de conocernos y nos planteamos ganar este campeonato que terminamos obteniendo. Tuvimos mucha hinchada porque nos fueron a ver chicos con los que entrenamos.

-¿Cómo fue el desarrollo de la final?

-El primer set nuestro fue buenísimo, lo ganamos 6-0. En el segundo, nuestros rivales recuperaron su nivel, terminamos ganándolo por 7-6, en tie break.

-Venís viajando hace mucho con el pádel, te lo tomaste en serio.

-Sí. Me gusta viajar y este hermoso deporte ha tenido un crecimiento muy grande en los últimos años, lo cual me ha permitido visitar distintos países. Había estado en México anteriormente, también fui a Italia. Hoy, me toca estar de regreso en México, donde se juega mucho al pádel. Divido el tiempo entre competir y trabajar de profesor.

-Una pasión por el pádel que alcanza también a tu familia.

-Sí, es una familia “padelera”. Todo el tiempo están siguiendo este deporte, mis padres, mis hermanas y mis sobrinos, lo llevan en la sangre. También en nuestra Academia, en Tandil, hay muchos niños que aman este deporte. Gracias a Dios, el pádel hoy está de moda y lo puedo compartir con gente cercana.

-¿Cómo dosificás tu tiempo para abarcar la parte de jugador y la de profesor?

-Es complicado. Entreno poco porque me queda lejos el lugar al que tengo que ir, acá se complica con la movilidad, estoy en una ciudad muy grande. Pero aprovecho que hay muchos argentinos que juegan muy bien. Trato de entrenar lo que puedo, pero también estoy muy enfocado en la parte de mi trabajo, que es ser entrenador, para solventar mis gastos. Lo bueno es que hay mucha gente que te apoya, con lo cual podemos encarar unos cuantos viajes.

-¿Tenés proyectada una permanencia en México o apuntás a países de un pádel más desarrollado como España?

-Siempre trato de ilusionarme con muchas cosas e ir cumpliéndolas en la medida de lo posible. Tengo pensado cerrar el año en México, donde me he hecho de la confianza de mucha gente, algo que quiero aprovechar. También busco invertir dinero para desarrollar un entrenamiento personal y mejorar como jugador. Y, dentro de eso, apunto a España o a volver a Italia y dedicarme sólo a jugar, al menos por un tiempo.

-¿Con Premier Padel como objetivo máximo en el horizonte?

-Es algo que siempre estuvo en la mira. Hoy, las posibilidades son más amplias. Creo que, si te lo proponés, podés llegar. Ahora que encontré este compañero me ilusiona ir y probar. En los próximos meses, en Ciudad de México, se va a disputar un torneo de nivel A1, trataremos de ir. También tengo un Cupra FIP en los próximos días, se trata de un torneo muy competitivo.

-Un dato alentador es que el pádel te permite permanecer en la élite hasta una edad avanzada.

-Es así. Fernando Belasteguín es un ejemplo de eso. Es un gran deportista que ha hecho las cosas como se debe, nunca falló. Podés proyectar a largo plazo, no es que pasás los 24 años y ya está. Se te puede dar siendo más grande.

-¿Cuán apasionado es el mexicano por el pádel?

-En Monterrey, se juega mucho. Este último torneo tuvo una inscripción de doscientas parejas. Están todo el día jugando al pádel, lo viven pasionalmente. Acá es un deporte muy social. Siempre Argentina y España están por encima, pero acá se han abierto muchísimos clubes, de distintos tamaños. También hay muchos entrenadores y gente que toma clases, los profesores están saturados de trabajo. El nivel ha mejorado respecto a mi anterior visita a México, en 2021. Hay jugadores muy buenos, dentro de un nivel amateur.

-¿A qué jugadores de renombre te tocó enfrentar?
-A “Tolito” Aguirre, Agustín Torre, “Facu” López…y he tenido la oportunidad de entrenar con el gran “Bela” (Fernando Belasteguín), un momento que nunca me olvido.

-¿Te sentís lejos de ese nivel o en un buen día podrías competirles?

-Si doy lo mejor y estoy enfocado, con buen ritmo, les puedo ganar algunos games, jaja.

-¿Qué objetivos tenés a corto plazo?

-Cerrar este ciclo en México, compitiendo lo más que pueda. También conocer distintos lugares, es algo que me gusta mucho. Y estoy muy enfocado en la pretemporada de fin de año, viendo si puedo hacer algo de mi interés. Pienso en seguir trabajando y disfrutando, porque lo bueno de esto es que hago lo que me gusta, es un privilegio.