La “selección regional” que elaboró Santamarina
Quince de los veintiocho jugadores de Santamarina que formaron parte de la concentración en La Masía son nacidos en Tandil o localidades cercanas.
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El dato confirma la intención de la dirigencia aurinegra de nutrirse con futbolistas propios o captar a algunos de la zona.
Entre ellos, Martín Michel aparece como símbolo del futbolista tandilense de los últimos tiempos. El delantero nacido en 1983, formado en Grupo Universitario, se hizo ídolo del aurinegro tiempo después de su llegada al club, que se produjo en 2011. Ni Quilmes, ni Universitario de Sucre, ni Gimnasia de Jujuy (sus otros clubes en el profesionalismo) supieron cobijarlo como Santamarina.
En una edad intermedia están otros jugadores locales como son el marcador de punta Agustín Politano y el volante Nicolás Valerio, ambos clase 1992.
Dentro del grupo de los chicos tandilenses, los más grandes son del ’96: el arquero Tomás Casas y el atacante Marcos Alzueta.
Del ’97, apenas con veinte años, aparecen el volante externo Francisco González Metilli, el marcador Lucas Sánchez, el volante zurdo Facundo Leiva, el defensor Julián Palmieri y el atacante Enzo Lamarche, nacido en Rauch.
De la camada siguiente, clase 1998, están el volante Agustín Mazzola y el polifuncional Matías Kabalín, solo superados en juventud por el arquero Facundo Pérez, nacido en 1999 y regresado al club tras pasar por Racing de Avellaneda y Rosario Central.
Los dos restantes del grupo son jóvenes llegados de ciudades cercanas. El juarense Braian Pérez vino a mediados del año pasado desde Temperley y tiene 22 años. Otro atacante, el olavarriense Juan Ignacio Barbieri (21), llegó a prueba y es pretendido para este mercado de pases o para el de mitad de año.
Entre todos (podría agregarse al marplatense Leonardo Fredes), conforman una verdadera “selección regional” con base en Tandil.
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