CARLOS ZULBERTI
“Hay que tomar riesgos, el chico tiene que salir de la casa”
El presidente del Centro de Entrenadores de Básquetbol brega por el regreso al ruedo de esa disciplina. “Esta situación no se aguanta más”, sentenció el DT de Jorge Newbery.
Por Fernando Izquierdo, de esta Redacción
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Carlos Zulberti, director técnico del club Jorge Newbery, se encuentra al frente del Centro de Entrenadores Tandilenses de Básquetbol. Desde allí, lanza un grito de ayuda en pos de la reanudación de esa disciplina en la ciudad, esgrimiendo como principales argumentos las necesidades de los clubes, los profesores y los jugadores.
En su diálogo al respecto con este Diario, Zulberti comenzó contando que “tenemos la intención de volver a trabajar, todos lo necesitamos. Los profesores tienen su ingreso económico desde los clubes. Tanto la Confederación Argentina como la Federación de la Provincia han presentado sus protocolos. En la ciudad, Independiente ha confeccionado uno que se ha presentado al Municipio. Los clubes necesitan volver a trabajar, tener a los socios abonándoles la cuota. Esta situación no se aguanta más, ni económica ni psicológicamente. Hay que sacar a los chicos de la casa, no pueden estar encerrados porque, de alguna manera u otra, los va a afectar.
Los tandilenses hemos tenido una gran disciplina, acatando todas las órdenes que se nos han dado, salvo excepciones que siempre hay. El virus no está circulando por Tandil. Si se controlan los accesos, sobre todo de gente proveniente de los lugares de mayor contagio, creo que no deberíamos tener problemas. Hay que empezar a tomar riesgos, ¿hasta cuándo vamos a seguir así?”.
-¿Qué tipo de entrenamiento proponen en los protocolos?
-Técnica individual, que cada chico trabaje en un espacio determinado con pelota. Se corregirán lanzamientos y otras cuestiones, obviamente que no es lo lógico, pero la idea es que los clubes tengan ingresos de las cuotas, que los profesores puedan trabajar y que los chicos salgan de su casa. Obviamente, estaremos privados de practicar jugadas de uno contra uno o dos contra dos, esenciales para este deporte, pero es lo que hay. No lo haremos durante un tiempo.
-¿Qué respuestas vienen recibiendo desde el Municipio?
-El intendente Lunghi está siendo muy cauto, está tomando todos los recaudos necesarios y no va a dar un paso sin saber bien dónde está parado. No va a dar un paso en falso. Pero tiene que saber bien que el deporte es una parte fundamental de la formación y la educación de los chicos. Estamos hablando de que el deporte es salud y resulta que abrimos los bares, los restaurantes, y los clubes siguen cerrados. Eso no puede ser.
-¿En algún punto, por ser del “palo” de la salud, Lunghi se excede en las precauciones o es ecuánime en ello?
-En general, está haciendo lo que debe. Y si en algún momento, por una cuestión de compromiso o lo que fuera, tiene que aceptar que ingrese gente a Tandil, que lo haga. Quedate tranquilo que seremos miles en la 226 frenando todo. Creo que él tomó los recaudos necesarios, por eso disfrutamos estar en esta situación. El esfuerzo ya lo hicimos, va a tener que empezar a aflojar.
-El básquetbol de Tandil tiene pocos chicos en categorías formativas. ¿Un eventual regreso sería aún con menor concurrencia?
-Para mí, no. Imagino un regreso masivo. Considero que los padres van a “tirar de cabeza” a sus hijos al club, porque lo necesitan. Los chicos no aguantan más en sus casas y sus padres ya no los soportan, hay un círculo vicioso en torno a ello. Más allá de que se ha dañado la situación económica, los clubes tendrán cierta flexibilidad para que el chico tenga un lugar si así lo desea. De alguna manera, los clubes cumplen esa función porque son instituciones sin fines de lucro.