La situación sanitaria mejoró en Tandil pero las autoridades están atentas a un posible regreso a Fase 2

Tras las medidas de restricción más severas aplicadas hace ya más de un mes, Tandil logró abandonar el estadio más restrictivo del sistema bonaerense y posicionarse en la Fase 3, pero el incremento de casos hace que peligre su mantenimiento en ese nivel.

De acuerdo a lo enunciado por las autoridades provinciales, el esquema de Buenos Aires se ha adaptado al de la Nación y, para determinar qué fase ocupa cada distrito, se tienen en cuenta la Incidencia –casos cada 100 mil habitantes en los últimos catorce días- y la Razón – que es la comparación de las últimas dos semanas con las dos anteriores-.

“Esos dos parámetros hablan de detección de casos positivos, no de ocupación de camas ni internación y demás. Entonces se puede dar la paradoja de que nosotros, que empezamos a testear más, podamos descender de fase”, comunicó el vicepresidente del Sistema Integrado de Salud Pública, Matías Tringler.

Aclaró que como muchas personas no presentan síntomas cuando se contagian y, al ser un virus con gran circulación, es muy probable que el porcentaje de positivos se incremente. De modo que, atendiendo a las variables que observa el Gobierno, existe la posibilidad de descender nuevamente al estadio más restrictivo.

“Yo entiendo que va a haber otro análisis, porque nosotros hoy tenemos más camas de terapia libres, el nivel de internación ha bajado y una mejor situación epidemiológica. Pero estamos con un índice de incidencia, con estos números, muy cercano a superar los 500, que es el límite. Y el índice de razón, si esta semana termina un poco más alta que la anterior, ya nos va a dar mayor a uno, y el límite es 1.20”, explicó.

De cualquier forma, resaltó que las autoridades deberían realizar un razonamiento epidemiológico y hacer consultas para tomar una decisión de cambio de fase.