Con el aislamiento, preocupan los casos de mujeres que tienen que convivir con su agresor
El aislamiento forzoso podría complejizar las situaciones de violencia que muchas mujeres viven a diario en sus hogares. Además, la imposibilidad de salir a trabajar repercute negativamente en las mujeres solas a cargo de hijos y en el colectivo LGTB.
Con el dictado de la cuarentena obligatoria y general, las organizaciones que abordan la violencia de género evidenciaron su preocupación ante la posibilidad del incremento de casos de violencia que el aislamiento forzoso pudiera traer aparejado.
Recibí las noticias en tu email
Yanina Venier, referente de la Mesa Intersectorial contra la Violencia Intrafamiliar y de Género de Tandil, apuntó que están tratando también de visibilizar las situación habitacional, alimenticia y económica que viven muchas mujeres solas a cargo de hijos en esta coyuntura excepcional.
“Muchas tienen trabajo fuera de la casa y no lo pueden realizar, estamos tratando de gestionar ayudas sociales y alimentarias, para centralizar desde lo territorial la distribución y articulación con esta posibilidad de aportes económicos y para alquileres con Desarrollo Humano municipal y el Ministerio de las Mujeres”, explicó.
Durmiendo con el enemigo
Venier expresó su preocupación en torno al nuevo escenario desplegado con la pandemia y las medidas adoptadas para atenuar su impacto, que podría recrudecer las estadísticas en violencia. En esta dirección, refirió que ” se intentó durante mucho tiempo que las mujeres pudieran salir de sus casas para proyectar sus propias vidas y que el Estado genere espacios para eso, creando otros ámbitos de sociabilidad, que en este momento no están disponibles. Todavía no encontramos un dispositivo único. Se reforzó la comunicación telefónica entre mujeres, la presencia de las organizaciones y los recursos estatales vigentes, que pedimos que amplíen la cobertura”.
De acuerdo al marco normativo vigente, la atención a nivel local en la Comisaría de la Mujer se desarrolla con normalidad y se están articulando encuentro puntuales con el equipo técnico para que no se aglomere gente.
“Nos preocupan las mujeres que están atravesando una situación de violencia de género y que están conviviendo con su agresor por necesidad. Pero destacar la importancia de tomar medidas ante la desigual manera en que esta pandemia afecta a mujeres y población LGBT, que no tiene garantizados derechos básicos como vivienda y alimentación, y no cuenta con un trabajo remunerado y estable”, detalló. La titular de la Mesa remarcó la importancia de fortalecer los lineamientos para la población en general acerca de cómo van a funcionar las instituciones que trabajan en género, y también con niñas, niños y adolescentes.
Dónde pedir ayuda
En Tandil, la Dirección de Políticas de Género y Diversidad Sexual a cargo de Matilde Vide que funciona bajo la órbita de Desarrollo Humano y Hábitat coordinada por Alejandra Marcieri, es el área estatal que gestiona las respuestas sobre la problemática. Debido al cierre de las dependencias municipales y la orden de funcionar con guardias mínimas y atender urgencias, se pusieron a disposición distintos canales de comunicación. Por consultas es posible comunicarse por mail secretariadesarrollosocial@tamdil.gov.ar o por teléfono al 249 434-3677. Por denuncias llamar al 101 o dirigirse a la Comisaría de la Mujer ubicada en Alem 1073.
“Se atienden las urgencias que vienen por juzgados y denuncias, y la Casa de Abrigo funciona como servicio esencial. Las consultas se responden de 9 a 14 por teléfono o por mail. Lo mejor es que escriban al mail, hemos respondido muchísimas consultas por este medio”, puntualizó Marcieri.
Por su parte, el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación sumó a la línea 144 tres líneas de whastapp y un mail para brindar asesoramiento inmediato. Uno de ellos es 11-2771-6463, 11-2775-9047 y el otro 11-2775-9048. El mail que crearon con el mismo fin es linea144@mingeneros.gob.ar.
Prórroga de cautelares
La Suprema Corte de Justicia bonaerense prorrogó hasta el 31 de marzo “o hasta que la situación de aislamiento social (por el coronavirus) cese”, las medidas cautelares y de protección dictadas en casos de violencia familiar y de género.
Concretamente, el magistrado pidió que se consideren “prorrogadas hasta el 31 de marzo o hasta que la situación de aislamiento social, preventivo y obligatorio cese, las medidas cautelares o de protección judicialmente decretadas” como exclusión del hogar, prohibición de acercamiento y contacto, perímetros de exclusión, otorgamiento de dispositivos de alerta, internaciones, o cualquier otra que haga a la protección de personas por situaciones de violencia familiar y de género.”
Pidió “hacer saber a las fuerzas de seguridad provincial y municipal de dicha circunstancia, a los efectos de que, cuando las víctimas requieran de su protección, sepan que las medidas oportunamente dispuestas se encuentran vigentes”.