Por errores en el pago de los salarios, desde la UTA no descartan una medida de fuerza para febrero
Ante la falta del pago de un bono de cinco mil pesos que debía abonarse en diciembre y el pago del salario con una escala antigua, el delegado local de la Unión Tranviarios Automotor, Sebastián Altamiranda, remarcó que no descartan tomar una medida de fuerza en caso de que la situación no se revierta.
Mientras que desde la Cámara de Transporte se analiza un pedido de aumento de boleto, desde la Unión Tranviarios Automotor continúan clamando por el pago de un bono de cinco mil pesos que les adeudan desde diciembre y por la correcta liquidación del sueldo. De no satisfacerse sus reclamos, podrían tomar alguna medida de fuerza.
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El delegado local de la UTA, Sebastián Altamiranda, confirmó en diálogo con El Eco de Tandil lo que había manifestado a principios de enero: “Veremos ahora en los primeros días de este mes cómo se acomodan las cosas. Si pagan todo como corresponde, no pasa nada. Pero si tenemos alguna complicación, veremos qué es lo que hacemos”.
Remarcó que la situación para los choferes no ha sido fácil desde el mes doce, ya que tienen pendiente el cobro de un bono de cinco mil pesos y, además, “cuando liquidaron el sueldo, lo hicieron mal”, pese a que luego lo reacomodaron. En ese sentido, explicó que “estamos a la espera para ver cómo nos liquidan, porque tienen que reajustarse algunas escalas”.
“Los compañeros quieren cobrar”
Enfatizó Altamiranda que si la Cámara de Transporte no cumple con lo que corresponde, “seguramente vamos a hacer alguna medida, porque venimos desde diciembre con algunas situaciones irregulares: pagaron el aguinaldo en dos veces, liquidaron mal la escala y no pagaron el bono. Entonces la situación es muy compleja”.
Si bien los empresarios se encuentran a la espera de que llegue un subsidio desde la Provincia que los ayude a solventar los gastos, los choferes “no podemos saber si es así y, por lo tanto, estamos a la espera de que nos liquiden bien en febrero para ver qué es lo que hacemos”.
Asimismo, comentó que estuvieron a punto de llevar a cabo alguna medida de fuerza durante el mes de enero por lo problemas con el cobro del salario: “Hay una escala nueva, pero nos liquidaron con la vieja. Y eso lo reacomodaron después de unos cuantos días. Pero si no lo hacían, les parábamos. Porque correspondía un aumento por el reacomodamiento de septiembre a noviembre, la cláusula gatillo, pero no lo habían acomodado. Y ahora queda que liquiden diciembre, que ya cerró en un 18,3 por ciento, así que eso lo pagarían en febrero”.
Respecto al bono, indicó que están dos meses atrasados ya que se los deberían haber abonado en diciembre. No obstante, remarcó que siempre estuvieron al día y les pagaron todo pero “ahora se les ha complicado”.
“Nosotros tenemos buen diálogo, nos ponemos de acuerdo, pero cuando se pone brava la mano, los compañeros quieren cobrar, entonces uno tiene que responder por ellos”, completó.
“Venimos aguantando”
Daniel Albanese, titular de la Cámara de Transporte, manifestó a El Eco de Tandil que “el transporte público “está en emergencia, y ha sido muy castigado por las políticas neoliberales del Gobierno anterior”, y señaló que “ojalá que realmente actualicen los subsidios para que no haya que trasladar a tarifas los costos que son inevitables y no se pueden meter debajo de la alfombra”.
Desde la UTA reconocieron que la situación no es favorable para los empleadores, pero sostuvieron que igualmente ellos deben cobrar lo que les corresponde. “Ellos aducen que hoy se les hace muy difícil con el tema de los subsidios y algunas otras cuestiones, que no les dieron el aumento que ellos deseaban; realmente la tienen complicada. Veremos qué es lo que pasa”, reconoció Altamiranda.
Recordó que dialogan con periodicidad y que “tratamos siempre de llegar a un acuerdo”. Empero, ante la postura de la Cámara, que advierte que “se le complica”, el delegado local de la UTA aseveró: “Uno dialoga, pero también tiene que responder a los compañeros, que son los que realmente hacen fuerza. Entonces si ellos no pueden cumplir con lo que corresponde, nosotros tenemos que tomar medidas”. En ese aspecto, enfatizó que “por ahora venimos aguantando y charlando, pero todo tiene un límite”.
Respecto a las medidas que tomarían en caso de que en febrero volvieran a registrar inconvenientes con el cobro del sueldo, declaró que aún no lo han debatido pero que seguramente no se realice un paro en primera instancia sino que se lleve adelante un recorte de horario.
“El detonante para una medida de fuerza sería que volvieran a incumplir con la escala de salario actual. El bono está ahí, en el aire, y veremos si lo pagan. Pero sí o sí tiene que abonar teniendo en cuenta la escala actual”, concluyó Altamiranda.