Los detalles del plan bonaerense para volver a clases
El Plan Jurisdiccional fue aprobado por el Ministerio de Educación de la Nación y ya se comenzó a distribuir en los 135 distritos de la provincia. En el marco de las Unidades Educativas de Gestión Distrital (UEGD), las autoridades del sistema educativo, los consejos escolares, los representantes de los trabajadores de la educación, los integrantes del Comité Distrital Mixto de Salud y Seguridad, junto a las autoridades sanitarias y educativas de los municipios tomarán conocimiento de los protocolos, se capacitarán y comenzarán a organizar su implementación según las particularidades de cada institución educativa.
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El documento contiene especificaciones dirigidas a estudiantes, familias, docentes, directivos y auxiliares sobre medidas y criterios sanitarios; de organización escolar y pedagógica; de limpieza, higiene y seguridad de los establecimientos educativos; para el uso de transporte público; condiciones de infraestructura escolar y uso de los espacios de la escuela y protocolo de actuación ante la aparición de casos Covid-19.
En los distritos donde las condiciones epidemiológicas permitan reanudar la actividad presencial, cada escuela debe elaborar su Plan Institucional para el regreso progresivo a las clases presenciales, trasladando todas las especificaciones del plan a las características del establecimiento educativo.
“Es un plan para el que hemos trabajado durante mucho tiempo, en el marco de los lineamientos federales y con el acompañamiento tanto del Ministerio de Salud, del Gabinete de ministros y del grupo de expertos que asesoran al Gobierno provincial, como también de los representantes de los trabajadores docentes y auxiliares”, explicó Agustina Vila, directora general de Cultura y Educación bonaerense.
“Su puesta en marcha implicará que los directivos, docentes y auxiliares sean los primeros en regresar. Se realizará la limpieza y la desinfección de cada establecimiento, dando cumplimento a estrictos protocolos y se planificará la continuidad pedagógica según los contenidos curriculares priorizados, en formatos que contemplen la actividad educativa presencial y no presencial. Iremos informando a las familias cada decisión que tomemos. Han hecho un importante esfuerzo en este tiempo y sabemos que toda decisión que se toma respecto de la escuela impacta en los estudiantes pero también en las rutinas y formas de organización de la vida cotidiana de toda la comunidad”.
La nueva rutina escolar
El plan establece que los horarios de ingreso y egreso a la escuela serán alternados para distintos grupos, de modo tal que compartan estos momentos la menor cantidad de personas y se genere menor concentración de circulación en la vía pública.
Para ingresar a la escuela, los trabajadores deben tener vigente el permiso de la aplicación Cuidar, mientras que el estudiantado debe llevar, en su cuaderno o carpeta, una Declaración Jurada firmada por la persona adulta responsable en la que deje constancia de que se encuentra en condiciones de asistir. Al ingreso se tomará la temperatura corporal, que debe ser como máximo de 37.4°.
La división de secciones de estudiantes se realizará en tantos subgrupos como sea necesario hasta cubrir el cumplimiento del distanciamiento prescripto por la autoridad sanitaria (2 metros en espacios comunes y 1,5 metros en el aula, entre estudiantes y a 2 metros de distancia del docente a cargo del curso), con un máximo de diez estudiantes por salón.
Durante la primera etapa del regreso seguro a las clases presenciales, la jornada tendrá noventa minutos de dictado de clase en forma continua, sin recreo. Los bloques de clases de las distintas secciones serán en horarios distintos, de modo que cohabiten la escuela en forma simultánea la menor cantidad de personas posible.
El mismo grupo de estudiantes tendrá un encuentro por semana y quienes cursen el último año de cada nivel tendrán tres encuentros semanales para abordar los denominados “contenidos prioritarios”, definidos por los docentes de cada grupo a partir de los lineamientos emanados de la cartera educativa. El plan expresa claramente que el trabajo presencial debe integrarse con las tareas pedagógicas que continuarán realizándose de manera no presencial.
En la segunda etapa, se irá ampliando la cantidad de matrícula que comenzará a tener clases presenciales, según lo permita la situación epidemiológica. En esta instancia, las instituciones educativas pondrán en marcha diferentes modelos de presencialidad, conforme a las definiciones sanitarias y también, a las particularidades que presenta cada establecimiento educativo, por ejemplo, en relación a su infraestructura.
Con respecto a los hábitos de los estudiantes, el plan indica sanitizar la mochila antes de salir de los hogares y al llegar a la escuela, dejarla fuera del aula mientras se encuentran en clase, higienizarse las manos en períodos máximos de 90 minutos y al manipular objetos; evitar compartir útiles, comidas y bebidas; como también el contacto físico.
Protocolos anexos
El extenso documento del Plan Jurisdiccional para el regreso seguro a las clases presenciales contiene también protocolos anexos, algunos de los cuales comenzaron a implementarse desde el inicio de la pandemia, que regulan actividades específicas relacionadas con la cotidianidad de la vida escolar.
Uno de ellos, el Protocolo de Limpieza y Desinfección para Establecimientos Educativos en Contexto Covid-19, establece orientaciones para la realización de las tareas de limpieza, desinfección, secado y ventilación, identificando las diferentes superficies existentes en la escuela, la periodicidad de las tareas y la correcta utilización de los elementos disponibles, tanto para un resultado eficiente como para el cuidado de la salud de los trabajadores. Cabe destacar que durante 2020, la DGCyE septuplicó los recursos destinados a limpieza con respecto al año anterior.
Otros anexos establecen el conjunto de medidas a tomar ante la presencia de un posible caso de Covid-19 en la escuela, la utilización de las bibliotecas escolares y las medidas de prevención requeridas para el transporte escolar, tanto en cuanto al acondicionamiento de los vehículos como al comportamiento de los pasajeros.
El Plan fue elaborado por la DGCyE y enriquecido a partir de un amplio trabajo de análisis y los aportes de las distintas asociaciones de representación gremial en los ámbitos de la Mesa de Cogestión (Artículo 9 de la Ley 10.579) y del Comité Mixto Jurisdiccional. Su punto de partida es la situación epidemiológica actual y el conocimiento disponible hasta la fecha, por lo que su contenido podrá ser revisado ante los cambios que se produzcan en el contexto de la enfermedad o las nuevas evidencias sobre el comportamiento del Covid-19.