ECO SALUD
Profesionalismo y calidad humana para los momentos críticos de la vida
La terapia intensiva es un lugar cerrado que alberga a pacientes críticos que demandan un cuidado particular que se le brinda en ese sector.
La terapia intensiva de los centros asistenciales es un lugar clave en el sistema de salud. Ahí llegan los pacientes con cuadros de gravedad, “que muchas veces están con asistencia respiratoria mecánica, o diversos tipos de patologías que requieren un monitoreo y cuidado especial, y por eso demanda un cuidado especial”, explicaron los doctores Carlos Servin y Martín Beldarrain, responsables de la terapia intensiva del Sanatorio Tandil, uno de los centros de referencia locales.
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En diálogo con Eco Salud de El Eco Multimedios, los profesionales explicaron que la terapia intensiva “maneja pacientes que tienen una patología que está amenazando su vida y como tal requiere cuidados muy específicos desde el punto de vista tecnológico, pero fundamentalmente desde los recursos humanos, que tiene que ser calificado para el manejo de la persona en esa situación, donde pequeños cambios que uno hace pueden tener gran impacto en la evolución”.
Los especialistas remarcaron que esos pacientes “la mayoría de las veces se están debatiendo entre la vida y la muerte y hay que ser muy preciso en el trabajo que se hace. La observación se realiza las 24 horas, durante todo el tiempo que demande la asistencia”.
La posibilidad de estar acompañados por la familia
La terapia intensiva del Sanatorio Tandil cuenta con una modalidad de trabajo en la que “cuando el paciente está en determinada condición clínica puede estar acompañado de la familia y eso es clave para poder transmitirle, junto con el apoyo de ellos, noticias que veces no son tan buenas”, destacó Beldarrain.
Para ello, en las cuatro camas con habitaciones cerradas con las que cuentan para esta modalidad, ocho en total en el servicio, “trabajamos en la mitad del espacio, donde la familia resulta de un apoyo muy importante y además el paciente se siente acompañado, por lo cual eso cambia mucho cómo uno se comunica con el paciente y la familia”, resaltó.
“La contención es fundamental más cuando son pacientes añosos, el hecho de estar encerrado en un área particular donde tienden a perderse y ahí el familiar nos ayuda a contenerlo y de esa manera hacer más fácil el proceso”, apuntó Servin.
Sobre este punto, destacaron “el trabajo en conjunto que demanda acciones muy activas, no sólo en la parte profesional de terapia intensiva como médicos, enfermeros o kinesiólogos, sino también un trabajo activo de las familias con el paciente. Todos interactuamos de manera tal para sacar adelante a la persona”.
Patologías que más llegan a la terapia
Los profesionales indicaron que las patologías que más se atienden en el área varían de acuerdo con el grupo etario y al momento del año. “Por nombrar algunas pueden ser agudas neurológicas como el ACV isquémico o hemorrágico, patología cardiovascular como infarto agudo de miocardio, insuficiencia cardíaca descompensada, problemas respiratorios infecciosos o no infecciosos”.
“En invierno se ve más el repique de las enfermedades que tienen que ver con la parte respiratoria y sobre todo con el costado infeccioso que complican muchas veces patologías crónicas preexistentes. Y en verano se ven más las patologías traumáticas, donde las actividades recreativas están más desarrolladas”, explicaron.
Tiempo de permanencia y abordaje del paciente en el área
El cuadro clínico y la evolución diaria que va teniendo la persona define el tiempo de estadía en terapia intensiva, sostuvo Beldarrain, e indicó que “muchas veces nos preguntan eso en los informes médicos los familiares y el mismo paciente cuando está en condiciones de conocer su estado clínico y uno no puede dar la respuesta a eso, porque justamente lo grave del cuadro hace que sea muy dinámico y eso es lo que va definiendo el tiempo de estadía”.
“El paciente requiere un abordaje particular donde hay que entender en las condiciones en las que se encuentra, entablar una empatía, explicarle la situación y de esa manera ayudarlo y acompañarlo”, manifestó el doctor Servin. “No siempre el paciente es consciente de lo que está padeciendo, o en otros casos no tienen todo el estado cognitivo apropiado y se hace más difícil para entablar esa comunicación”.
Por ello, “cuando el paciente está totalmente lúcido uno trata de contarle todo procesando la información para que pueda entender la magnitud de lo que está atravesando”, resaltó.
Relación con los otros servicios
El área de terapia intensiva mantiene una comunicación permanente con otros servicios ya que “somos como un embudo, tenemos que tener un trato importante con todos los servicios y muy fluido, como con clínica médica, guardia, quirófano, con todos los profesionales”, remarcaron los responsables.
“No sólo muchas veces nos llegan de otros servicios los pacientes sino que en algunas situaciones donde la persona entra en terapia intensiva tiene cuestiones a resolver que no están en nuestras manos, y tenemos que articular nuestro trabajo con otras especialidades”.
Una de las especialidades que forma parte del tratamiento es la de kinesiología que cuando el paciente se encuentra en condiciones comienza “a realizarse de a poco la rehabilitación, contamos con tres kinesiólogos que se dedican básicamente al manejo del paciente en terapia intensiva que suele estar muy debilitado por el cuadro que tuvo, por lo que demanda una asistencia importante”.
El rol de la tecnología en un área crítica
El soporte y asistencia a través de la tecnología “es crucial. Nosotros dependemos mucho del monitoreo que se le hace al paciente con tecnología que nos otorga datos objetivos que permiten tomar decisiones, tanto desde el punto de vista cardiovascular o respiratorio, y muchas veces en lo neurológico”, indicó Beldarrain.
“Nos apoyamos mucho en las imágenes a través de la ultrasonografía aplicada en diferentes áreas del paciente para poder tomar o avalar decisiones o frenar ciertas terapéuticas que pueden tener un costo alto de salud para la persona”, describió.
Además de la tecnología que se aplica al paciente, los profesionales indicaron que cuentan con otras “que se encuentran en las habitaciones y nos permiten hacer telemetrías. Esto es, ver centralizada la información que se está tomando de la persona en la isla de trabajo de enfermería”.
El servicio cuenta con cámaras de circuito cerrado en cada una de las habitaciones “que nos permiten ver qué está pasando, por lo cual la tecnología la usamos en diferentes aspectos. Es crucial para tener los ojos encima del paciente”.
La vida y la muerte conviven en terapia
En terapia intensiva muchas veces las personas se debaten entre la vida y la muerte. Y en ese sentido, Servin se refirió a cómo se afronta la situación de muerte, momento que describió como “complejo”. “Depende el tipo de paciente, las expectativas, si es joven o adulto, si ya lleva una enfermedad crónica o aguda, por tanto, la muerte de por sí ya es difícil pero los escenarios son diferentes”, contó.
Beldarrain sostuvo que “nunca es fácil transmitir a una familia que un paciente joven se está muriendo, y en general uno ya va viendo la evolución y se le transmite la verdad a la familia, nunca se le da falsas expectativas, por lo cual, su entorno va transitando la enfermedad y viendo que la condición no es buena y es una manera, si se quiere, de prepararlos para la situación que se va a ir dando a lo largo de la internación”.
La otra cara es cuando el paciente puede superar esa instancia y ser dado de alta del área. “Es una caricia al alma y hemos tenido, particularmente, hace unos días un encuentro con un paciente que estuvo mucho tiempo internado en una situación que le comprometió la vida, -tuvimos que hacer una reanimación intensa y prolongada y a pesar de todo lo que atravesó salió adelante- y nos vino a visitar para agradecer a todos los que lo atendieron, eso es muy gratificante”.
Prevención para no llegar a una terapia
Los doctores Servin y Beldarrain refirieron que hay acciones que cada persona puede realizar para no llegar a tener que estar en el área ante alguna complicación. Y eso “depende de la patología, pero si hablamos de traumatismo de cráneo, usando el casco; o si hablamos de prevención vial, uno tendría que poner el acento para evitar y disminuir los accidentes que terminan generando todas estas complicaciones para el paciente y la familia”.
Asimismo subrayaron que “en otro costado en la prevención están todas las patologías crónicas cardiovasculares que tienen ciertos factores de riesgo como el colesterol alto, la hipertensión arterial, lo que muchos llaman asesinos silenciosos porque no dan síntomas, el sedentarismo”.
“Esas situaciones no sólo llevan al paciente en sí a complicaciones a terapia intensiva, sino que, quienes llegan a la terapia por otras patologías pero que además tienen estos factores de riesgo que nunca se han atendido de forma correcta le quitan la posibilidad de responder favorablemente ante situaciones tan adversas como las que atraviesan en el área, es decir, tienen una enorme desventaja para que les vaya bien”, resaltaron.
Para conocer más sobre los servicios del Sanatorio Tandil pueden hacerlo ingresando a su página web www.sanatoriotandil.com.ar, en sus redes sociales o en Sarmiento 770.